Sevet, la hija mayor de Tia Rasa, Luet la habia visto una sola vez. Siguiendo la costumbre, Rasa no ensenaba a sus propias hijas, sino que habia confiado su
—Quedate, Luet. Creo que sera educativo para ti ver que poco ha aprendido esta hija mia de su madre y su Tia Dhel. Sevet fulmino a Luet con la mirada.
—?Que es esto? ?Ahora te dedicas a la beneficencia?
—Su madre era una mujer sagrada, Sevya. Tal vez hayas oido hablar de Luet. Sevet se ruborizo.
—Te ruego que me perdones —dijo.
Luet no sabia como responder, pues a fin de cuentas la habian acogido alli por caridad y no debia mostrarse ofendida por la hiriente frase de Sevet.
Tia Rasa la salvo de tener que pensar una respuesta apropiada.
—Considerare que el perdon se ha solicitado y concedido, y ahora podemos iniciar nuestra conversacion en un tono mas civilizado.
—Por supuesto —dijo Sevet—. Comprenderas que he venido aqui directamente de casa de Padre.
—Por tus modales bruscos y ofensivos, he llegado a sospechar que habias pasado por lo menos una hora con el.
—El pobre hombre esta hecho una furia. ?Y como podria ser de otro modo cuando su propia companera difunde terribles mentiras sobre el?
—Pobre hombre. Me sorprende que esa nulidad que tiene por companera haya tenido agallas para hablar contra el… y cerebro para inventar una mentira. ?Que esta diciendo?
—Me referia a ti, Madre, no a su companera actual. Nadie piensa en ella.
—Pero como cancele el contrato de mi querido Gabya hace quince anos, no creera que yo tengo el deber de abstenerme de decir la verdad acerca de el.
—Madre, no seas imposible.
—Nunca soy imposible. A lo sumo me concedo el capricho de ser un poquitin improbable.
—Eres la madre de las dos hijas de Padre, y ambas somos famosas… las mas famosas de tus vastagos, y por razones honorables, aunque es verdad que la carrera de la pequena Koya esta apenas en su comienzos, y ni siquiera tiene su propio myachik…
—Ten la bondad de ahorrarme tus alusiones a tu rivalidad con tu hermana.
—Es solo una rivalidad desde su punto de vista, Madre… a mi ni siquiera me importa que su carrera de cantante sea un poco mas lenta. Siempre es mas dificil adquirir notoriedad para una soprano lirica… Hay tantas que apenas puedes discernirlas, a menos que esa soprano sea tu amada y leal hermana.
—Si, yo siempre te pongo ante mis ninas como ejemplo de lealtad.
Sevet sonrio un instante, pero comprendio que su madre se estaba burlando de ella y fruncio el ceno.
—Eres muy desagradable conmigo.
—Si tu padre te ha enviado para hacerme retractar de mis comentarios acerca de los acontecimientos de esta manana, puedes decirle que se lo que estaba planeando gracias a una fuente incuestionable, y que si no deja de proclamar que Wetchik pretendia asesinarlo, presentare mis pruebas ante el consejo para enviarlo al destierro.
—?No puedo decirle semejante cosa a Padre!
—Pues no lo hagas. Que se entere cuando yo lo haga.
—?Desterrarlo? ?Desterrar a Padre?
—Si hubieras estudiado mas historia (y pensandolo bien, dudo que Dhelya te haya ensenado mucha), sabrias que cuanto mas poderoso y celebre es un hombre, mas probabilidades tiene de ser desterrado de Basilica. Se ha hecho antes y se hara de nuevo. A fin de cuentas, es Gabya, no Wetchik ni Roptat, quien manda a sus soldados a patrullar las calles, fingiendo que nos protege de los matones que quizas el mismo ha contratado. La gente se alegrara de que se vaya… y eso significa que estara dispuesta a creer en cada prueba que yo presente.
Sevet adopto una expresion grave.
—Padre puede ser irascible y un poco escurridizo en sus negocios, Madre, pero no es un homicida.
—Claro que no. Wetchik se marcho de Basilica y Gabya no se atreveria a matar a Roptat sin que Wetchik este aqui para cargar con la culpa. Aunque sospecho que si Gabya hubiera sabido que Wetchik habia huido, habria matado a Roptat al instante para usar la apresurada partida de Wetchik como prueba de que mi querido companero era el asesino.
—Hablas de Padre como si fuera un monstruo. ?Por que lo aceptaste como companero?
—Porque queria tener una hija con una extraordinaria voz para el canto y sin el menor discernimiento moral. Funciono tan bien que renove el contrato por un segundo ano y tuve otra. Y luego me di por satisfecha.
Sevet rio.
—Eres una tonta, Madre. Si tengo discernimiento moral. Y no solo moral. Me case con Vasya, no con un actor de segunda.
—Deja de hacer insinuaciones sobre el companero de tu hermana. El Obring de Kokor es un encanto, aunque no posea el menor talento ni la menor oportunidad de que Koya le de un hijo, y mucho menos de que le renueve el contrato.
—Un
Sevet se levanto para marcharse. Luet le abrio la puerta, pero Tia Rasa detuvo a su hija.
—Querida Sevya —llamo—. Quiza llegue un momento en que debas escoger entre tu padre y yo.
—Ambos me habeis obligado a ello al menos una vez al mes desde que era pequena. Hasta ahora me las he arreglado para escabullirme de los dos, y me propongo continuar igual.
Rasa batio las palmas, un ruido brusco como el choque de dos piedras.
—Escuchame, hija. Se por lo que has pasado y te he admirado por el modo en que actuaste al tiempo que te compadecia por el hecho de que fuera necesario. Lo que estoy diciendo es que pronto, muy pronto, quiza no sea posible escabullirse. Es hora de que examines a tus progenitores y decidas quien merece tu lealtad. No digo amor, porque se que nos quieres a los dos. Digo lealtad.
—No deberias hablarme asi, Madre. No soy tu alumna. Y aunque logres desterrar a Padre, eso no significa que deba escoger entre ambos.
—?Y si tu padre enviara soldados a silenciarme? O tolchocks… lo cual es mas probable. ?Y si tu madre fuera degollada por un cuchillo que el contrato?
Sevet observo a su madre en silencio.
—Entonces tendria inspiracion para una magnifica cancion pichalny, ?no crees?
—Creo que tu padre es enemigo del Alma Suprema, y tambien enemigo de Basilica. Reflexiona, mi Sevet de triste voz, reflexiona y medita, pues cuando llegue el dia de escoger no habra tiempo para pensar.
—Siempre te he respetado, Madre, porque nunca has intentado volverme contra mi padre, a pesar de las cosas perfidas que el dijo de ti. Lamento que hayas cambiado.
Con gran dignidad, Sevet se marcho de la habitacion. Luet, aun desconcertada por esta conversacion tan violenta por debajo de su apariencia elegante, vacilo en seguirla.
—Luet —susurro Tia Rasa.
Luet se volvio hacia esa gran mujer y temblo por dentro al verle las mejillas humedas.
—Luet, debes decirme una cosa. ?Que nos esta haciendo el Alma Suprema? ?Que planea el Alma Suprema?
—No lo se. Ojala lo supiera.
—Si lo supieras, ?me lo dirias?
—Claro.
—?Incluso si el Alma Suprema te lo prohibiera? Luet no habia pensando en esta posibilidad. Tia Rasa tomo