su pagina asesinodelmaletero.com habia durado solo doce segundos. Pero era suficiente. Significaba que alguien habia introducido las palabras «asesinato» y «maletero» en un buscador. Ahora trataria de descubrir quien y por que.

Dos minutos mas tarde, a Carver se le hizo un nudo en la garganta al identificar la IP -una direccion de ordenador basica- con un servicio proveedor de Internet. Tenia una noticia buena y una mala. La buena: no se trataba de un proveedor grande como Yahoo, que contaba con pasarelas de trafico por todo el mundo y por tanto localizar una IP requeria mucho tiempo. La mala noticia: era un pequeno proveedor con el dominio LATimes.com

Es Los Angeles Times, penso, y sintio una opresion en el pecho. Un periodista de Los Angeles habia entrado en su pagina web asesinodelmaletero.com. Carver se recosto en su silla y penso en como debia abordarlo. Tenia la direccion IP, pero no un nombre que la acompanara. Ni siquiera podia estar seguro de si era un periodista el que habia hecho la visita. En los periodicos trabajaba un monton de gente que no era periodista.

Rodo en su silla hasta la siguiente estacion de trabajo. Se conecto como Mc Ginnis, porque habia averiguado sus codigos hacia tiempo. Fue a la pagina web del Los Angeles Times y en la ventana de busqueda del archivo en linea escribio «asesinato maletero».

Obtuvo una lista de tres articulos que contenian esas dos palabras en las ultimas tres semanas, incluido uno publicado en la pagina web esa misma noche y que saldria en el periodico de la manana siguiente. Cargo en pantalla el ultimo de los articulos y lo leyo.

REDADA ANTIDROGA DE LA POLICIA

CAUSA INDIGNACION EN LA COMUNIDAD

por Angela Cook y Jack Mc Evoy

de la redaccion del Times

Una redada antidroga en un complejo de viviendas de Watts ha suscitado la ira de los activistas locales, que se quejaron el martes de que el Departamento de Policia de Los Angeles solo presto atencion a los problemas de un barrio habitado por una minoria cuando una mujer blanca fue presuntamente asesinada alli.

La policia anuncio la detencion de 16 residentes de Rodia Gardens por acusaciones relacionadas con las drogas, asi como la incautacion de una pequena cantidad de narcoticos tras una investigacion de una semana. Portavoces de la policia afirmaron que la operacion de «vigilancia y barrido» fue en respuesta al asesinato de Denise Babbit, de 23 anos, residente en Hollywood.

Un pandillero de 16 anos residente en Rodia Gardens fue detenido por el asesinato. El cadaver de Babbit fue hallado hace dos semanas en el maletero de su propio coche en un aparcamiento de la playa de Santa Monica. La investigacion del crimen condujo a Rodia Gardens, donde la policia de Santa Monica cree que Babbit, bailarina exotica, fue a comprar drogas. Alli fue raptada, retenida durante varias horas y agredida sexualmente de manera repetida antes de ser estrangulada.

Varios activistas de la comunidad se preguntaron por que los esfuerzos para contener la marea de venta de drogas y crimen relacionado en el barrio no tuvieron lugar antes del asesinato. No tardaron en senalar que la victima en el maletero era blanca mientras que los miembros de la comunidad eran casi en su totalidad afroamericanos.

«Afrontemoslo -dijo el reverendo William Treacher, cabeza visible de un grupo llamado South Los Angeles Ministers, tambien conocido como SLAM-: esto es solo otra forma de racismo policial. Olvidan Rodia Gardens y permiten que se convierta en caldo de cultivo de drogas y bandas de delincuentes. Pero matan a esta mujer blanca que se droga y se gana la vida quitandose la ropa y, ?que pasa? Organizan un operativo. ?Donde estaba la policia antes de esto? ?Por que hace falta un crimen contra una persona blanca para atraer la atencion hacia los problemas en la comunidad negra?»

Un portavoz de la policia nego que la raza tenga nada que ver con la operacion antidroga y aseguro que se habian producido numerosas operaciones similares en Rodia Gardens antes.

«?Quien se va a quejar de que quiten a los traficantes y pandilleros de las calles?», pregunto el capitan Art Grossman, que dirigio la operacion.

Carver dejo de leer el articulo. No percibio ninguna amenaza. Aun asi, no explicaba por que alguien del Times, presumiblemente Cook o Mc Evoy, habian buscado las palabras «asesinato» y «maletero». Solo estaban siendo concienzudos, cubriendo todas las posibilidades. ?O habia algo mas? Miro los dos articulos anteriores de los archivos que mencionaban asesinato y maletero y vio que los habia escrito Mc Evoy. Se limitaban a las noticias sobre el caso Denise Babbit: el primero trataba del hallazgo del cadaver y el segundo, al dia siguiente, de la detencion del joven pandillero por el homicidio.

Carver no pudo evitar sonreir para sus adentros al leer que habian acusado al chico del asesinato. Pero su humor no le impidio mantener la precaucion. Busco a Mc Evoy en la hemeroteca y enseguida encontro cientos de articulos, todos ellos relacionados con el crimen en Los Angeles. Era el periodista de sucesos policiales. Al pie de todos sus articulos estaba su direccion de correo electronico: JackMc [email protected].

Carver busco luego el nombre de Angela Cook y encontro muchos menos articulos. Llevaba menos de seis meses escribiendo para el Times y solo en la ultima semana habia firmado articulos de crimenes. Antes habia escrito sobre distintos temas que iban desde una huelga de basureros a uno de esos concursos para ver quien es capaz de comer mas. Parecia no tener asignacion especifica hasta esa semana, cuando habia compartido firma con Mc Evoy.

– Le esta ensenando el oficio -dijo Carver en voz alta.

Supuso que Cook era joven y Mc Evoy mayor. Eso la convertia a ella en un objetivo mas facil. Se arriesgo y entro en Facebook con una identidad falsa que habia preparado hacia tiempo y, efectivamente, Angela Cook tenia pagina. El contenido no era para consumo publico, pero su foto estaba alli. Era una belleza con el pelo rubio hasta los hombros, ojos verdes y un mohin en los labios. Ese mohin, penso Carver. El podria cambiarlo.

La foto era solo de la cara. Le decepciono no poder verla de cuerpo entero. Sobre todo la longitud y forma de sus piernas.

Empezo a tararear. Eso siempre lo calmaba. Canciones que recordaba de los anos sesenta y setenta, de cuando era nino; rock duro con el que una mujer podia bailar y exhibir su cuerpo.

Continuo buscando, descubriendo que Angela Cook habia abandonado una pagina de MySpace unos anos antes, pero no la habia borrado. Tambien encontro un perfil profesional en LinkedIn, y eso le condujo al filon de oro: un blog llamado www.CityofAngela.com en el cual mantenia un diario actualizado de su vida y trabajo en Los Angeles.

En la ultima entrada del blog, Cook rebosaba entusiasmo: la habian asignado a los sucesos policiales y criminales y el veterano Jack Mc Evoy iba a formarla para el puesto.

A Carver siempre le fascinaba lo confiada e ingenua que era la gente joven. No creian que nadie pudiera conectar los puntos; pensaban que podian desnudar sus almas en Internet, colgar fotos e informacion a voluntad y no temian consecuencias. En el blog de Angela Cook encontro toda la informacion que necesitaba sobre ella. Su pueblo, su hermandad de la facultad, hasta el nombre de su perro. Sabia que su grupo favorito era Death Cab for Cutie y su comida favorita la pizza de un lugar llamado Mozza. Entre datos no significativos, averiguo la fecha de su cumpleanos y que solo tenia que caminar dos manzanas hasta su pizzeria favorita. La estaba cercando y ella ni siquiera lo sabia. Pero cada vez se acercaba mas.

Hizo una pausa cuando encontro una entrada del blog de nueve meses antes con el titular «Mi Top Ten de Asesinos en Serie». Debajo habia una lista de diez asesinos cuyos nombres se habian hecho famosos por haber dejado un reguero de muertes en todo el pais. El numero uno de la lista era Ted Bundy, «porque yo soy de Florida y alli es donde termino».

Carver torcio el labio. Le gustaba esa chica.

Sono la alerta de la puerta de seguridad y Carver inmediatamente se desconecto de Internet. Cambio de pantallas y vio a traves de la camara que estaba entrando Mc Ginnis. Carver giro en la silla y estaba de frente a Mc Ginnis cuando este abrio la puerta de acceso a la sala de control. Tenia su tarjeta llave en una cuerda extensible fijada a su cinturon, lo cual le daba un aspecto de zumbado.

Вы читаете La oscuridad de los suenos
Добавить отзыв
ВСЕ ОТЗЫВЫ О КНИГЕ В ИЗБРАННОЕ

0

Вы можете отметить интересные вам фрагменты текста, которые будут доступны по уникальной ссылке в адресной строке браузера.

Отметить Добавить цитату