– Adelante -dije al tiempo que dejaba el tenedor en el plato.

– Es sobre lo que ocurrio… lo que paso entre nosotros, quiero decir. Cuando empece a… interesarme por tu sobrino.

– Ha llovido mucho desde entonces, Tara -repuse; no tenia ganas de remover ese asunto.

– Lo se, lo se. Pero tengo que desahogarme. -Respiro hondo y me miro a los ojos-. Lo siento. Lamento mucho lo que hice. Fue un error. Fui injusta contigo y con Tommy. No entiendo en que estaria pensando para actuar asi, igual que una colegiala enamorada, pero, como tu dices, ha llovido mucho desde entonces y creo que yo… que ya no soy la misma. Solo queria pedirte perdon. Siempre he apreciado tu amistad, y te echo de menos. Me porte muy mal contigo, y te pido disculpas.

Me incline y le puse una mano en el hombro.

– Tara, no te preocupes. Lo pasado, pasado esta. Ninguno de los dos es perfecto. No puedes imaginar la de veces que he metido la pata en relaciones a lo largo de los anos.

Ella sonrio y yo me eche a reir sacudiendo la cabeza. Me sorprendio comporbar cuanto me alegraba que Tara se hubiese sincerado. Cuando volvimos a concentrarnos en la comida reinaba un ambiente de autentica cordialidad. De nuevo eramos amigos, y eso ya era mucho. Pero, ademas, la mujer que tenia delante parecia muy distinta de la Tara de quien me habia desenamorado.

– Dale recuerdos mios -dijo, retomando la conversacion anterior-, A menos que te parezca una mala idea, claro. Quiza sea mejor que no le hables de mi. No creo que me tenga mucho aprecio despues de… Bueno, no puede decirse que lo ayudara, ?verdad?

Antes de que mencionara directamente la columna que habia escrito sobre Tommy, causandole no pocos contratiempos, cambie de tema.

– Olvidalo. De todos modos no te he citado aqui para hablar de Tommy o de historias pasadas. Esto es una comida de negocios, ?sabes?

– ?De verdad? -dijo, aunque estaba seguro de que en ningun momento se le habia pasado por la cabeza que fuera otra cosa-. Vale, pues. Dime, ?como va todo en mi antigua guarida?

– Trabajo. Mucho trabajo.

– ?Habeis encontrado un sustituto para James?

– No. Desde que murio yo me ocupo de su trabajo. P. W. se largo al Caribe, dejandome a su endemoniada hija como prenda para que velara por sus acciones en la compania. Te aseguro que esa chica es una verdadera pesadilla, me hace la vida imposible.

– ?Como es eso?

De pronto me di cuenta de que no me importaba hablar con ella de esa clase de asuntos. Seis meses atras, incluso doce, me habria preocupado ver mis palabras en letras de molde o en boca de todo el mundo, pero ahora, aunque apenas llevabamos juntos media hora, confiaba en ella. Pense que podia desahogarme y explicar como me sentia ultimamente, ya que en ese momento no tenia a nadie a quien confiar mis problemas. Le hable de Caroline, del modo en que poco a poco habia ido implicandose en el negocio, pese a que, en mi opinion, no era muy habil en su trabajo, y la forma en que intrigaba para quedarse con el puesto de James Hocknell.

– Pero no lo conseguira, ?verdad? -pregunto Tara antes de beber un sorbo de agua.

– No, claro que no. Pero yo no lo quiero. Llevo seis meses trabajando y no puedo mas. Necesito un descanso. Ya no soy joven.

– Quieres volver a tu vida ociosa, a hacer lo que te de la gana todo el dia.

– Pues si. -No me daba verguenza admitirlo-. Es decir, me gustaria seguir con el mismo grado de implicacion, pero no a este precio. No quiero ser responsable de cuanto ocurre a mi alrededor. Me gustaria que volviera a ser como antes.

– ?A quien no? -murmuro como de pasada, pero yo me guarde esa frase pues sospeche que era una indirecta-. ?Y que vas a hacer? ?Fichar a alguien de otra emisora? Si quieres puedo recomendarte a algunos…

– No, no -la interrumpi-. No te preocupes. Se me ha ocurrido una idea, pero no se si tiene mucho sentido. Debo darle unas cuantas vueltas mas. Bueno, cuentame cosas. Pero se sincera. ?Estas contenta con tu trabajo?

– Tan contenta como lo estas tu con el tuyo. -Tara suspiro-. Me siento un poco desperdiciada, la verdad. Estoy muy harta de los programas que hago, y el resto son tareas puramente administrativas y de investigacion, que no me interesan en absoluto. Quiero volver a estar ante la camara. Me gustaria llevar un noticiario digno, serio, nada mas. Yo me ocuparia de todo; disenaria un formato innovador y contrataria un buen equipo profesional para que fuera un exito rotundo. Un buen noticiario, eso es lo unico que quiero.

Asenti con la cabeza y clave los ojos en la mesa, para no levantarme y ponerme a bailar de alegria; la comida de negocios habia resultado mucho mas positiva de lo que habia previsto.

– Tara, creo que ha llegado el momento de que los dos pongamos las cartas sobre la mesa, ?no crees?

Espere a que Tommy se hubiera instalado en casa antes de visitarlo. Andrea abrio la puerta y al verme solto un suspiro de alivio, aunque no hubieramos hecho muy buenas migas en el hospital. Su embarazo estaba muy avanzado y habia aumentado visiblemente de peso, pero por lo demas se la veia sana, aunque un poco cansada.

– ?Como esta el enfermo? -pregunte al tiempo que entraba y me quitaba el abrigo-. He pensado que debia darle un par de dias de descanso antes de visitarlo.

– Pues a mi me vendrian muy bien -dijo mientras me conducia al salon donde Tommy miraba la television-. Pero ya que estas aqui aprovechare para salir un momento. Te veo luego, Tommy, ?vale? -Su tono era aspero e irritado, como si fuera la canguro y estuviera hasta la coronilla de cuidar a mi sobrino.

Tommy solto un grunido y Andrea se marcho, dejandonos solos. Estaba tumbado en el sofa delante del televisor; llevaba una camiseta, pantalones de chandal y gruesos calcetines de lana. A juzgar por el aspecto de su cabello, debia de hacer dias que no se banaba, y aun estaba muy palido. Cuando entre, apenas me miro, y hasta subio el volumen. Estaba viendo la programacion infantil: dibujos animados.

– ?Sabes en que se diferencia un personaje de dibujos animados de una persona de carne y hueso? -me pregunto desde el sofa.

– Dimelo tu.

– En los dedos -murmuro-. Los dibujos animados siempre tienen cuatro dedos. Esa es la diferencia. ?A que crees que se debe?

Pense sobre ello.

– Bueno, si. Por eso y por el hecho de que los personajes de los dibujos normalmente estan animados -dije-. ?Que te pasa, Tommy? Sientate como es debido y comportate como un adulto, por favor. Voy a preparar cafe. ?Una taza?

– Te -musito.

Recorde que, pese a su adiccion a multiples sustancias estupefacientes, la unica droga que lo dejaba indiferente era la cafeina.

Cuando volvi con las infusiones, cruce la sala y apague el televisor.

– ?Eeeh! -protesto Tommy-. Estoy viendo un programa.

– Pues ya no -dije mientras me acercaba y colocaba la taza de te delante de el, que fruncio el entrecejo y se cubrio los ojos con las manos sin cambiar de postura, esperando a que continuara. Suspire y anadi-: Veamos. ?Como te encuentras? ?Mejor?

– Si, claro -repuso con sarcasmo-. Estoy de maravilla. Hagamos un repaso: tome una sobredosis, he estado a punto de palmarla, me paso el dia metiendome esos medicamentos repugnantes que me destrozan el estomago y me provocan una diarrea galopante; no tengo un penique, mi novia esta a punto de abandonarme y voy a ser padre en menos de un mes. Ah, se me olvidaba, y me han echado del trabajo. Con todo lo que me esta pasando ultimamente, comprenderas lo contento que estoy. Gracias por tu interes, eres muy amable.

– ?Te han echado? ?Cuando?

– Ayer -contesto en voz baja, y parecio un poco avergonzado-. Stephanie me llamo para interesarse por mi estado, al menos es lo que dijo al principio, pero luego anadio que habia pensado que deberia tomarme un descanso, que mis actividades extracurriculares (si, utilizo esa expresion) daban una imagen poco favorable de la emisora y que no podian permitirse el lujo de tenerme trabajando alli. De modo que muchas gracias por habernos

Вы читаете El ladron de tiempo
Добавить отзыв
ВСЕ ОТЗЫВЫ О КНИГЕ В ИЗБРАННОЕ

0

Вы можете отметить интересные вам фрагменты текста, которые будут доступны по уникальной ссылке в адресной строке браузера.

Отметить Добавить цитату
×