hicimos el amor. Al volver a Chile y enterarme del embarazo, me parecio evidente que era de Eduardo. ?Nadie se embaraza con una sola noche! Menos a esta edad.

– ?Fue en las Bahias de Huatulco?

– No. En Huatulco me contuve, me reprimi y me costo. Cuando conocio mi historia, Bob quiso llevarme a Guatemala. Senti que no habia ninguna razon para negarme a amar a un hombre que era capaz de eso por mi.

Llego la gendarme. Habia concluido mi tiempo.

– Fue en Antigua -me dice Violeta, a traves de la gruesa figura uniformada.

– En Antigua… -le sonrei y nos abrazamos.

Estando ya en la puerta, volvio a mirarme.

– Me equivoque con la profecia. Crei que mis dos vidas eran el antes y el despues de Cayetana. Ahora comprendo que si le gano al horror, Josefa, esta sera mi segunda vida.

Ella sabe, sin ninguna duda, que es el fin del tiempo que respiro hasta el momento en que apreto el gatillo. Que todo el resto, venga lo que venga, sera diferente. Que para siempre su existencia quedara dividida en dos: la anterior al disparo -a ese preciso instante- y la que ella llamara su «segunda existencia».

«Su hija tendra dos vidas», le dijo la vidente a Cayetana. Ya termino la primera.

– Gracias por los pistachos.

En mi tercera visita le note por fin abultado el vientre. La maternidad se hacia evidente. Ya le habian levantado las restricciones y hacia la vida de una presa cualquiera. Las visitas eran reguladas, al aire libre, podiamos caminar y conversar con bastante tranquilidad, pero siempre rodeadas de gente. En cuanto se abrian las puertas a la hora fijada, llegaban varias personas a visitarla. Nunca mas pude verla a solas. Esa fue la ultima vez.

Me hablo de las mujeres de la carcel.

– La diferencia entre los delitos de hombres y mujeres es que los hombres matan por robo, por peleas callejeras, por alcohol, y sus victimas son casi siempre personas que nunca vieron antes ni supieron de ellas. Las mujeres, en cambio, no matan a alguien ajeno a sus sentimientos. He conversado con ellas y no he sabido de ninguna que haya asesinado a un desconocido. Ellas matan amantes, hijos, maridos… solo lo que han amado. No soy ninguna excepcion.

La note pesimista.

Al despedirnos, oculto la emocion con una sonrisa y me dijo:

– Jose, si las cosas salen mal, ?sabes cual seria mi ultimo deseo? Que te vinieras la noche anterior con tu guitarra y no dejaras de cantar hasta que todo hubiese concluido.

Andres me trajo un dia, desde la carcel, unas notas de Violeta: eran letras de canciones para mi. Sus largas horas de ocio no transcurrian en vano. Las lei. Mi primera reaccion fue encerrarme un dia entero con Eric Satie y con Philip Glass, escuchandolos, absorbiendolos. Siempre surtia un efecto magico: la creatividad me invadia, partia tras de mi, me perseguia. Ponerles musica a esos versos me nacio de las entranas mismas, con una espontaneidad y un frescor que hacia mucho tiempo no sentia. Recupere un gozo que casi habia perdido con mi ultimo disco, ese que Violeta critico tan duramente. En menos de un mes tenia listas las canciones. Nunca habia trabajado en creacion colectiva. Elabore la musica con meticulosidad, pero con un extrano apuro interno. La produccion de este disco se salio de todas las reglas: pobres musicos, pobres sonidistas, no les permiti detenerse un minuto antes de concluir el trabajo. Es que mi apuro tenia que ver con Violeta. Para mi era vital entregar el disco a la luz publica antes de que fallaran su caso. Sabia de mi propio poder.

Tuve problemas con mi agente. Su primer reparo fue que las canciones eran tristes, que eso no vendia. Que eran sesgadas. Lo obligue a decirme la verdad, y esta exploto con la obviedad de todo lo relacionado con la venta y el mercado: Alejandro consideraba que ligarme a un hecho delictual podia ser el fin de mi carrera. Ensuciaria toda mi imagen, tan limpia y bien trabajada. El estaba dispuesto a aceptarlo solamente si manteniamos en el anonimato a la autora de las letras. Me enfureci, lo trate de cobarde y ambiguo. Use frases calcadas de las que en algun momento Violeta me habia espetado a mi. Lo amenace: no acompanarme en esta aventura seria considerado una causal para romper nuestro contrato. «Me cambiaron el personaje», me respondio, desconcertado, «eres otra, nunca habias reaccionado asi por nada ni por nadie.» «Bueno», le sonrei, «?quien dijo que era tarde para empezar?»

Para Alejandro soy lo mas importante de su vida. Y como esta no es justa, el es solo uno mas en la vida mia. Ninguna simetria.

Cuando se estaba imprimiendo la caratula, me pregunto:

– Josefa, con todo este apuro no hemos hablado del titulo…

– No te preocupes, ya lo tengo; tambien lo tiene el equipo de produccion.

– ?Cual es? -no le hacia ninguna gracia sentirse marginado.

– VIOLETA DASINSKI, o una historia de anoranza.

Presente el nuevo disco en la television, frente a todo el pais, con enorme espectacularidad. Yo misma me preocupe de que hubiese un gran despliegue publicitario. De repente, en medio del set, cai en cuenta de que era la primera vez que estaba en la television sin un tranquilizante en el cuerpo. Se me seco la boca. Simplemente, con tanta excitacion, lo habia olvidado. Pero el show debia continuar. Tome el microfono.

– Cuando le preguntaron a Peter Gabriel sobre que trataba su ultimo album, respondio: «Buena parte de este disco es sobre los lazos.» Quisiera hacer mias sus palabras.

No hable mas. Solo cante.

Nunca se habia escuchado, vendido y publicitado tanto un disco mio. La cantante y la asesina, decian los diarios sensacionalistas. Por primera vez, la palabra compromiso se ligo a mi canto. Yo, que la habia evitado cuidadosamente. Para el reverso de la caratula elegi el texto de Violeta Parra que encerraba todo el sentido del album.

Yo no tomo la guitarra

por conseguir un aplauso,

yo canto la diferencia

que hay de lo cierto a lo falso;

de lo contrario no canto.

Lo que no le mostre a Andres, ni a nadie, fueron dos hojas que equivocadamente se le deslizaron a Violeta entre las canciones que me envio. Era su letra, su conocida escritura, copiando unos poemas quechuas. Su titulo estaba en ambos idiomas:

Sank 'ay / Carcel perpetua

?Para esto, Padre,

Me has engendrado?

?Para esto, Madre, me has parido…?

Carcel corrupta

Devora -?oh, pecado!

Mi solitario corazon…

?Mi corazon?

?He aqui mi canto de expiacion,

Casa de los cautivos!

?Casa de las cadenas,

Dame la libertad…!

Вы читаете Antigua vida mia
Добавить отзыв
ВСЕ ОТЗЫВЫ О КНИГЕ В ИЗБРАННОЕ

0

Вы можете отметить интересные вам фрагменты текста, которые будут доступны по уникальной ссылке в адресной строке браузера.

Отметить Добавить цитату