pasado por la Academia Naval de Livorno, por lo que si lo hablaba bien o no era un detalle sin importancia. Ni si lo hablaba siquiera. En realidad, se trata de una institucion que, salvando las distancias, podria compararse con esos colegios privados femeninos en los que se ensena a las senoritas a comportarse en sociedad, solo que ahi se prepara a los chicos para seguir los pasos del padre en el ejercito o para entrar en el negocio familiar. Y no es que el ejercito sea una institucion que exija un gran nivel intelectual. -Antes de que Brunetti pudiera discutirselo, Paola dijo-: Si, quiza exagero, lo reconozco. Es cierto que Susanna tiene tendencia a ver sexismo donde no lo hay.
Cuando se hubo repuesto de la impresion causada por este alarde de ecuanimidad, Brunetti dijo:
– ?Recuerdas que ella dijera entonces todas esas cosas?
– Desde luego. Yo fui una de las personas que la recomendaron para el puesto, y por eso cuando la despidieron me lo dijo. ?Por que lo preguntas?
– Queria saber si habias hablado con ella despues de que ocurriera eso.
– ?Lo de ese chico?
– Si.
– No; hace, no se, por lo menos seis meses que no hemos hablado. Pero si lo recuerdo tan bien tal vez sea porque me confirmo todo lo que yo habia pensado siempre de los militares. Tienen la moralidad de las viboras. Todo vale para taparse las faltas unos a otros: la mentira, el fraude, el perjurio. No tienes mas que ver lo que ocurrio cuando aquellos norteamericanos chocaron con su avion contra el teleferico. ?Alguno de ellos conto la verdad? Que yo sepa, ninguno estuvo en prision. ?A cuantas personas mataron? ?Veinte? ?Treinta? -Gruno de indignacion, se sirvio media copa de vino, pero la dejo en la encimera, sin probarla, mientras proseguia-:
Hacen lo que se les antoja a cualquiera que no pertenezca a su grupo y, en cuanto la gente empieza a hacer preguntas, no sueltan prenda y se ponen a hablar de honor y lealtad y de toda la sacrosanta mierda. Hasta a un cerdo le daria nauseas. -Callo, cerro los ojos un momento y los abrio lo justo para ver la copa de vino y asirla. Tomo un sorbo pequeno y luego otro mayor. De repente, sonrio-. Fin del sermon.
En su juventud, Brunetti habia hecho dieciocho meses de modesto servicio militar, pasados, en su mayor parte, de caminatas por las montanas con otros
Se obligo a volver al presente y a su esposa.
– A ti siempre te han caido mal los militares, ?verdad?
La respuesta fue instantanea:
– Dame una razon en contra.
Consciente de que ella desestimaria su recuerdo de la cena en la cabana como un rito de fraternidad masculina de la peor especie, Brunetti descubrio que no tenia argumentos:
– ?La disciplina?
– ?Nunca has viajado en tren con un punado de soldados? -pregunto Paola, y luego repitio con un resoplido de desden-: ?Disciplina?
– El servicio militar los aparta de las faldas de mama.
Ella se rio.
– Quiza sea esa la unica ventaja. Desgraciadamente, al cabo de los dieciocho meses, todos vuelven al nido.
– ?Eso es lo que crees que hara Raffi? -pregunto Brunetti.
– Si en algo vale mi opinion -empezo ella, y Brunetti se pregunto cuando no habia valido-, Raffi no hara el servicio militar. Vale mas que se vaya a Australia
– ?Y tu le dejarias ir a Australia solo? ?Dieciocho meses? ?A fregar platos?
Paola lo miro y sonrio al ver la expresion de autentico asombro que el tenia en la cara.
– ?Por quien me tomas, Guido? ?Por una gallina clueca? No seria facil dejarlo marchar, ni mucho menos, pero creo que le haria mucho bien independizarse. -Como Brunetti no decia nada, agrego-: Por lo menos, le ensenaria a hacerse la cama.
– Ya se la hace -dijo Brunetti, tomando la frase al pie de la letra.
– Quiero decir, en un sentido mas amplio -explico Paola-. Asi comprenderia que la vida no se reduce a esta pequena ciudad con sus pequenos prejuicios y quiza se diera cuenta de que para conseguir lo que quieres tienes que trabajar.
– ?En vez de pedirlo a tus padres?
– Exactamente. O a tus abuelos.
Raras veces habia oido Brunetti a Paola expresar, ni veladamente, una critica de sus padres, por lo que la curiosidad le hizo ahondar en el tema.
– ?Para ti fue demasiado facil? Me refiero a tu infancia.
– No mucho mas facil que para ti dificil, carino.
Brunetti, que no estaba seguro de lo que ella habia querido decir, iba a preguntarselo cuando se abrio bruscamente la puerta del apartamento y Chiara y Raffi irrumpieron en el corredor, catapultados. El y Paola se miraron y sonrieron. Ya era hora de almorzar.
13
Como solia ocurrir, el almuerzo en casa, en compania de su familia, levanto enormemente el animo a Brunetti. No hubiera podido precisar si su reaccion era distinta de la del animal que vuelve a su guarida: segura, con el calor de la prole que saliva al oler la presa recien muerta que les trae. Cualquiera que fuera la causa, la experiencia lo reconfortaba y le permitia volver al trabajo con nuevas energias para reanudar la caza.
Toda imagen de violencia se borro de su mente cuando entro en el despacho de la
– ?No interrumpo, supongo? -pregunto viendo en los papeles el sello del Ministerio del Interior y, debajo, la franja roja que marcaba los documentos confidenciales.
– Nada de eso, comisario -dijo ella, guardando los papeles en una carpeta con movimiento indolente, con lo que desperto el interes de Brunetti.
– ?Puedo pedirle un favor? -pregunto el mirandola a los ojos y evitando leer la etiqueta de la carpeta.
– Por supuesto, comisario -dijo ella. Guardo la carpeta en el cajon de arriba y se acerco un bloc-. ?De que se trata? -pregunto, boligrafo en mano, con una amplia sonrisa.
– ?En la carpeta de la academia hay algo sobre la violacion de una muchacha?
El boligrafo cayo sobre la mesa y la sonrisa se desvanecio. Toda ella se retrajo, pero no dijo nada.
– ?Se encuentra bien,
Ella miro al boligrafo, lo recogio, puso el capuchon cuidadosamente, lo quito, miro a Brunetti y sonrio.
– Desde luego, comisario. -Miro el bloc, apoyo la punta del boligrafo en el papel-. ?Nombre de la muchacha? ?Cuando ocurrio?
– No lo se -empezo Brunetti-. Ni siquiera estoy seguro de que ocurriera. Debio de ser hace unos ocho anos, seguramente, mientras yo estaba en Londres, en un seminario de la policia. Fue en la San Martino. Segun el informe original, la muchacha fue violada, al parecer, por mas de uno. Pero no se presentaron cargos, y no se