– ?Entonces por que no lo haces?
El respiro en silencio en el auricular, como si pensara lo mismo.
– ?Que quieres saber? -pregunto quedo.
– ?Que habeis hecho hoy?
– Rutina. Interrogatorios.
– ?Patricia? ?Joachim? ?Los otros del club? ?Quiza algun cliente? ?Los padres? ?El hermano gemelo? ?La gente de la casa vecina? ?La senora gorda con el perro? ?Quien es Jesper? ?Y quien es el ministro?
Annika percibio su asombro a traves del telefono.
– Has hecho tus deberes -dijo el.
– No -respondio ella-,
– Hemos encontrado su ropa -anuncio el.
Annika sintio que se le erizaba el vello de los brazos. Esto no era aun oficial. Le estaba dando una exclusiva.
– ?Donde?
– En el crematorio municipal de Hogdalen.
– ?En el vertedero?
– No, en un compresor junto a una gran cantidad de desperdicios. La tuvieron que tirar en alguna papelera de Kungsholmen. Las papeleras se vacian cada dia en un camion de una empresa de Estocolmo y la basura se prensa junto a todo lo demas que se encuentra en la calle. Imaginate.
– ?La podeis utilizar como prueba?
– Hasta el momento, los tecnicos han encontrado entre las fibras del tejido restos de un televisor, relleno de sofa, residuos de cascara de platanos y excrementos de un panal de bebe.
El suspiro.
– ?Asi que el descubrimiento no vale nada? -senalo Annika.
– Por lo menos de momento.
– ?Estaba rota?
– Hecha anicos. A causa del compresor.
– En tal caso, ?todas las huellas dactilares, pelos, desgarrones y cosas por el estilo que podrian indicar algo estan destruidos?
– Lo has entendido perfectamente.
– ?Puedo escribir esto?
– ?Te parece que aporta algo?
Ella recapacito.
– El asesino la tuvo que tirar alli. Alguien pudo verlo.
– ?Donde? ?Cuanta gente crees que tira basura cada dia en las papeleras de Kungsholmen?
Ella penso en los envoltorios de helados de la papelera junto al lago.
– Mas o menos… ?todo el mundo?
– ?Correcto! Y ni siquiera hace falta que haya sido el asesino. La ropa la pudo encontrar un amigo del orden que quiso limpiar el suelo.
Ella espero en silencio.
– Por lo menos indica que vosotros, la policia, haceis algo -replico ella.
El se rio.
– Vaya, no esta mal -dijo el.
– Quiza no sea necesario relatar exactamente el mal estado en que se encontraba la ropa -anadio Annika-. El asesino no necesita saber eso.
Q rio, pero no respondio.
– ?Y los interrogatorios?
Q se volvio a cerrar.
– No puedo decir nada de eso. Continuan.
– ?Con las personas que nombre antes?
– Estas son solo el comienzo.
– ?Y la autopsia? ?Ha dado algo?
– Se lleva a cabo en horario de oficina, es decir, comenzara manana.
– ?Que clase de sitio es Studio Sex?
– Date una vuelta por ahi y veras.
– ?De que ministro hablaba la anciana, lo sabeis?
– ?Suerte que todavia tienes algo que descubrir! -dijo el-. Adios.
Annika recapacito durante unos segundos. Esto de la ropa era nuevo, podrian explotarlo. Era una pena que la policia no atribuyera mas valor al hallazgo, pero ahora, por lo menos, sabian que el asesino no la tenia.
Spiken, Jansson y Foto-Pelle habian regresado de la reunion. Estaban sentados en la mesa de noticias charlando.
– Tengo una cosa en exclusiva, por lo menos de momento -anuncio ella.
Los hombres levantaron la vista con la misma expresion de sorpresa y ligera irritacion.
– Han encontrado la ropa.
Los dos hombres estiraron la espalda y cogieron sus boligrafos.
– ?Cono! ?La podemos fotografiar?
– No, pero si el lugar en el que la encontraron. El crematorio municipal de Hogdalen.
– ?Consiguieron algo?
Annika sopeso su respuesta.
– En realidad no, pero la policia no lo podra refutar -dijo ella.
Los dos hombres asintieron.
– Esto esta muy bien -dijo Jansson-. Si lo juntamos a lo demas obtendremos una buena mezcla. ?Mira!
Le alargo a Annika un cuaderno de apuntes.
– Me parece que comenzaremos con tu asunto, «nueva pista de la policia». Fotografia de Josefin, fotografia del basurero. ?Dentro de poco tendras un «careto», Bengtzon!
Los hombres soltaron una risa amable. Annika bajo la mirada y se sonrojo.
– Luego tenemos al padre -continuo Jansson-. Berit ha hecho una entrevista fantastica.
Annika se quedo estupefacta.
– ?Si?
– Increible -murmuro Annika.
– Luego necesitaremos algo del lugar del crimen, ?sabes si ya hay flores?
– Por la tarde no habia muchas.
– Vete a ver si hay mas. ?Puedes? Tambien seria interesante que hablaras con alguno de los apenados que se acerquen al lugar, con alguien que escriba una carta o encienda una vela.
Annika suspiro y asintio.
– ?Que tal fue con los companeros de clase? -pregunto ella.
– Berit no encontro a ninguno, excepto a tu Charlotta. Tenemos una fotografia de ella en la habitacion de su casa. Seguro que muchos regresaran esta noche, las vacaciones estan a punto de terminar. Pero pasamos de ellos por el momento. Es suficiente por hoy. Ademas, tambien tenemos los incendios forestales y la situacion en el Oriente Proximo. Quiza acaben en guerra ahi abajo…
Los maquetadores irrumpieron anhelantes, con ganas de trabajar. Annika regreso a su mesa, escribio sobre la nueva pista de la policia y cogio su bolso para ir de nuevo al lugar del crimen.
Bertil Strand no estaba, y Annika encendio el televisor que colgaba de una esquina de la sala de recreo de los periodistas. Las noticias locales ni siquiera nombraron a Josefin.