Yo sobrevivi. Sharon murio.

Miranda cerro los ojos con fuerza y respiro hondo.

– No se por que no se te habra llevado a ti tambien -dijo Miranda, sin quitarle los ojos de encima a la chica inconsciente-. Pero tu has tenido la suerte. Tu has sobrevivido. Has llegado hasta aqui y volveras a estar entre nosotros. Tienes que hacerlo. Por Ashley. Porque en alguna parte de tu mente adormecida se encuentra la clave de la identidad del hombre que la ha secuestrado.

Miranda no se perdonaba por no recordar mas cosas de sus dias en cautiverio. Por no haber sido capaz de identificar a su agresor. Al hombre que mato a Sharon. Pero recordaba su voz de las pocas veces en que le habia hablado.

Puta.

?Que te parece esto?

Quedate.

Corre. Tienes dos minutos.

Ella repitio esas palabras para los investigadores. Para el experto en perfiles del FBI. Para el psiquiatra que tuvo que visitar por obligacion. Aquellas palabras crueles, dichas con voz apagada, incluso neutra, no significaban nada para ella. El experto en perfiles, claro esta, habia dado que hablar con la version de que el agresor habia sido victima de los abusos sexuales de una mujer de pequeno, y que ahora «castigaba» a su verdugo, pero ?de que servia eso a la investigacion? Miranda no lo sabia. Desde luego, si tuvieran un sospechoso, seria de alguna utilidad. Pero la policia no tenia pistas. El FBI tampoco.

Ella no les habia servido de nada.

Pero quiza JoBeth si podria servirles.

Miranda respiro trabajosamente.

– JoBeth, yo soy la que escapo -murmuro -. El Carnicero de Bozeman. Yo escape. Pero mi mejor amiga murio. Se llamaba Sharon y yo la queria. Como a una hermana. Lo compartia todo con ella. Jamas pense… bueno, jamas pense que nos podia suceder algo malo. Pero el Carnicero nos secuestro.

?Por que el Carnicero no se habia llevado a JoBeth? Miranda no lo sabia y Quinn y Nick solo podian especular. Quiza no tuvo tiempo para meterla en su coche. Quiza le vio la cara y tal vez lo conociera. Una especulacion que solo podia confirmar JoBeth Anderson.

– Jo, tienes que salir de esa nebulosa en que estas metida. Se que te duele. Y se que te dolera. Pero si no te despiertas pronto, el Carnicero matara a Ashley -dijo, y trago saliva-. Nada de esto es culpa tuya. Tienes que saberlo. Pero tambien tienes que despertarte y ayudarnos. Ayudar a la policia a encontrar al hombre que se llevo a Ashley. Antes de que le haga dano. Antes de que la cace.

Nada. Ningun movimiento, nada que le indicara a Miranda que JoBeth hubiera escuchado una sola de sus palabras. Miranda le apreto la mano y apoyo la frente sobre la cama, respirando profundamente.

Tenia una mision que cumplir. Tenia que encontrar a una mujer. Antes de que fuera demasiado tarde.

Al cabo de un momento, se incorporo, sintiendose mas fuerte y decidida. Le toco el hombro a JoBeth y dijo:

– Espero que te pongas bien, Jo. Prometeme que te pondras bien. Volvere para hablar contigo. Quiza vuelva esta noche y, si no, vendre sin falta manana por la manana, ?vale?

No esperaba una respuesta. Y no la tuvo.

Quinn no pudo aparcar frente a la oficina del sheriff debido a que media docena de vehiculos de distintos medios de comunicacion ocupaban todo el espacio disponible. Fruncio el ceno, aparco a la vuelta de la esquina y camino hasta el edificio, justo a tiempo para oir a Nick que hablaba desde lo alto de la escalera.

– No tengo tiempo para mas preguntas. Tengo que ocuparme de la investigacion.

Nick se volvio para entrar en el edificio mientras los reporteros lanzaban todo tipo de preguntas.

Quinn se metio por un callejon para evitar a los reporteros y le mostro su placa al agente que hacia guardia en la entrada de atras. Se fue directo al despacho de Nick.

– ?Que ha pasado? -pregunto, sirviendose una taza de cafe de la cafetera en el aparador.

– Joder, no tengo ni idea, pero hay uno de la CNN que esta llamando al responsable de relaciones publicas para pedir una entrevista, y el tipo ese del programa de Los mas buscados quiere venir este fin de semana a filmar unas secuencias sobre el Carnicero.

– No nos podria perjudicar. Esos programas los ve mucha gente. -Aunque dentro de una semana o diez dias, Ashley ya estara muerta.

– ?Has visto el periodico de esta manana? -pregunto Nick, mirandolo fijo.

– No.

Nick le lanzo la seccion principal. Los titulares en la portada llamaban la atencion: El Carnicero vuelve a golpear.

– ?Como ha conseguido meter esa noticia?

– Habra parado las rotativas. Yo que se. La mayor parte del reportaje se podria haber escrito antes del secuestro de Ashley van Auden. Solo en el primero y el ultimo parrafo se refieren a ella. -Nick hizo una pausa y tamborileo con los dedos sobre la mesa-. ?Tu has hablado con Banks?

Quinn leyo el articulo por encima.

– No, la verdad es que no. Me lo encontre ayer en la Universidad de Montana State, donde andaba metiendo las narices.

– ?Que le dijiste?

– Nada importante. ?Por que? -pregunto Quinn, alzando la mirada.

– Sigue leyendo.

Quinn siguio leyendo. Un resumen del secuestro y muerte de Rebecca… Ryan Parker que encontraba el cuerpo… un refrito tras otro de noticias ya publicadas… Banks hablaba tambien de la llegada de una especialista del laboratorio de criminologia del FBI y anadia la informacion de que el rectorado le habia entregado a Quinn 189 carpetas con antecedentes de estudiantes de la universidad. Senalaba el articulo: Los expedientes de los sospechosos de la desaparicion de Penny Thompson habian sido devueltos a la universidad, lo que constituye un ejemplo evidente de la incompetencia y desorganizacion que caracterizan la investigacion.

Banks tambien se ensanaba con la oficina del sheriff y con Nick en particular: Una fuente anonima cercana a la investigacion ha declarado: «La oficina del sheriff lo ha manejado todo mal desde el principio. Ya es hora de que alguien competente tome cartas en el asunto. Vivimos en un estado de miedo permanente y esto tiene que acabar».

El articulo insinuaba que Quinn habia dicho que Nick era un incompetente sin citarlo abiertamente.

?Que conazo!

– Yo no le conte nada acerca de Olivia ni de los expedientes – dijo Quinn, lanzandole el periodico de vuelta a Nick-. Solo intenta sacarte de tus casillas. Es una cita anonima, Nick. No te lo tomes personalmente.

Por la expresion de su cara, Quinn supo que su amigo se habia tomado muy mal la critica.

– Estamos haciendo todo lo que podemos -dijo Quinn-. Tenemos a los mejores de los mejores examinando las pruebas. Estamos buscando en todas las cabanas y barracas conocidas. Estamos desmontando el coche de Ashley y el de Rebecca tambien. Y he reducido la lista de hombres que habrian conocido a Penny a unas cuantas docenas. Es bastante mas abordable que los cientos de nombres que teniamos hace doce anos, y los casi doscientos de ayer. Sigamos con ello.

– Tengo unas cuantas cosas que hacer -dijo Nick, incorporandose.

– ?Que?

– Nada importante. Solo unas cuantas ideas.

– Aqui estoy yo si quieres que nos pongamos con una tormenta de ideas. Barajemos las ideas que tengamos. -Nick tenia aspecto de derrotado, algo que Quinn nunca habria esperado de su amigo.

– En serio, no es nada. Pero si sale algo de ello, te llamare. Sigue con los amigos de Penny. Es probable que yo solo este persiguiendo sombras.

Salio antes de que Quinn pudiera hacerle mas preguntas.

Quinn fruncio el ceno. Nick estaba preocupado por algo, aunque quiza solo fuera ese articulo. Aun asi, quiza deberia acompanarlo y ayudarle con lo que tuviera entre manos.

Miro el enorme monton de carpetas que habia traido de la universidad el dia anterior. Habian eliminado las de aquellos que ya no calzaban con el perfil. Quedaban cincuenta y dos posibles sospechosos. Tenia que reducir aun

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