– Hoy mismo recibiran el informe preliminar de la autopsia de Fallon.
Kovac sacudio la cabeza como si le hubiera entrado agua en el oido.
– ?Que? Me dijeron que tardarian al menos cuatro o cinco dias en practicarsela.
– Alguien se cobro un favor invocando el nombre de Mike Fallon -explico Leonard-. A fin de cuentas, es un heroe en el departamento, y nadie quiere que sufra mas de lo estrictamente necesario. Teniendo en cuenta las circunstancias que rodean el suicidio…
Su boca carente de labios se removio como un gusano. Un asunto desagradable el de un suicidio de matices sexuales estrafalarios.
– Ya -mascullo Kovac- Que desconsiderado por su parte matarse de esa forma… si es que fue eso lo que ocurrio. Es una verguenza para el departamento.
– Eso es un tema secundario, aunque no carente de importancia -senalo Leonard a la defensiva-. A los medios de comunicacion les encanta hacernos quedar mal.
– Bueno, pues se lo pondriamos en bandeja. Primero son los agentes que se pasan el turno en clubes de striptease, y ahora esto. Esto se ha convertido en Sodoma y Gomorra.
– Guardese los comentarios, sargento. No quiero que nadie hable con la prensa acerca de este caso. Hoy mismo hare una declaracion oficial. «La precoz muerte del sargento Fallon ha sido un tragico accidente. Lloramos su perdida y llevamos a sus familiares en nuestros corazones» -recito las frases que habia memorizado, procurando conferirles fuerza.
– Breve y conciso -opino Kovac-. Suena bien siempre y cuando sea cierto.
Leonard lo miro con fijeza.
– ?Tiene usted alguna razon para creer que no es cierto, sargento?
– De momento no. Nos vendrian bien algunos dias para atar cabos sueltos… Ya sabe, una especie de investigacion. ?Y si fue un juego sexual que salio mal? Ello podria implicar el concepto de culpabilidad.
– ?Tiene pruebas de que hubiera alguien mas en la casa?
– No.
– Y le han contado que estaba deprimido y que iba al psicologo del departamento.
– Esto… si -asintio Kovac, suponiendo que al menos seria verdad a medias.
– Tenia ciertos… problemas -comento Leonard con cierta incomodidad.
– Se que era homosexual, si se refiere a eso.
– Entonces, no maree la perdiz -espeto Leonard.
De repente parecio muy interesado en los papeles de su mesa, pues se sento y abrio un expediente.
– No hay nada que investigar Fallon se suicido adrede o por accidente. Cuanto antes zanjemos este asunto, mejor. Tiene usted otros casos en marcha.
– Ah, si, mis asesinatos de manana -replico Kovac con sequedad.
– ?Sus que?
– Nada, senor.
– Cierre este caso y vuelva a concentrarse en el asalto Nixon. El fiscal del condado me esta presionando mucho. La violencia de bandas es una prioridad.
Si, penso Kovac mientras regresaba a su cubiculo; conviene mantener bajas las estadisticas de actividad de bandas para aplacar al ayuntamiento. En comparacion, la muerte extrana e inexplicada de un policia carecia de importancia.
Se dijo que deberia estar satisfecho. En realidad, le apetecia tan poco como a Leonard que el caso Fallon se prolongara, aunque por motivos distintos. A Leonard se la traia floja Iron Mike; con toda probabilidad, ni siquiera lo conocia. Lo que de verdad le importaba era el departamento. En cambio, Kovac queria cerrar el caso por el bien de Mike, al igual que la persona que habia presionado al forense. No obstante, ese puno de tension del que Kovac queria hacer caso omiso no desaparecia de su estomago, aferrandose a el como una amante. Mas aun, teniendo en cuenta el tiempo transcurrido desde su ultima amante.
Liska le arrojo el abrigo.
– Necesitas un cigarrillo, ?verdad, Sam?
– ?Como? Pero si lo estoy dejando. Gracias por apoyarme.
– En tal caso, necesitas mucho aire fresco para quitarte la costra de los pulmones.
Se acerco a el y le lanzo una mirada significativa. Kovac la siguio hacia la puerta.
– El caso Fallon se acabo -anuncio cuando se ponia el abrigo.
Liska le dedico la misma mirada que el habia dedicado a Leonard, pero mas intensa.
– Ya le han practicado la autopsia.
– ?Que?
– Todo el mundo espera un dictamen de suicidio, solo que lo llamaran accidental para ahorrarle sufrimientos a Mike. Hoy mismo tendremos el informe preliminar y la bendicion de Leonard. Nadie de arriba quiere que Mike… ni el departamento sufra las consecuencias de los detalles sordidos.
– Claro -musito Liska, repentinamente palida.
Guardo silencio hasta que salieron a la calle, y Kovac no le pidio explicaciones. Llevaban juntos tiempo suficiente y habia aprendido a leerle el pensamiento. En su profesion, los companeros desarrollaban una suerte de intimidad no sexual, sino psicologica y emocional. Cuanto mas sintonizados estaban, mejor colaboraban en la resolucion de los casos. Su experiencia con Liska era de las mejores que habia tenido; se comprendian y se respetaban.
Camino junto a ella por el laberinto de pasillos hasta salir por una puerta poco utilizada en la cara norte del edificio. El sol brillaba cegador sobre la nieve, y el cielo poseia un diafano color azul claro. Hacia un dia enganosamente bonito, pues en realidad la temperatura era bajisima. No se cruzaron con nadie en la escalinata exterior, en la que nunca daba el sol, solo el viento. Por lo general, la gente salia por la cara sur como aves articas en busca de calor.
Kovac hizo una mueca al exponer el rostro al frio, embutio las manos en los bolsillos y hundio la cabeza entre los hombros para resguardarse del viento.
– Leonard te ha dicho que el caso Fallon esta cerrado -constato Liska por fin.
– Me ha ordenado que lo zanje.
– ?Quien ha conseguido que le hicieran la autopsia tan pronto?
– Alguien mas importante que el.
Liska se quedo mirando la calle mientras los musculos de su mandibula se tensaban. El viento le alborotaba el cabello corto y le humedecia los ojos. Kovac percibio que no le iba a hacer ni pizca de gracia lo que su companera estaba a punto de decirle.
– Bueno, ?me quieres explicar de una vez que te pasa? -pregunto de repente-. Hace un frio de muerte.
– Acabo de recibir una llamada de alguien que afirma saber en que caso estaba trabajando Andy Fallon.
– ?Como se llama?
– Aun no lo se, pero lo vi ayer en las oficinas de Asuntos Internos. Otro cliente insatisfecho.
El puno que atenazaba el estomago de Kovac se agrando y empezo a moverse.
– ?Y en que estaba trabajando Andy Fallon segun el?
– Un asesinato -repuso Liska, alzando la mirada hacia el.
– ?Asesinato? -repitio Kovac, incredulo-. ?Desde cuando investiga asesinatos Asuntos Internos? Imposible. Los delitos siempre se asignan a la division porque los de Asuntos Internos no se enteran de nada. ?Como iban a estar trabajando en un asesinato sin que nosotros nos enteraramos? Gilipolleces.
– Es posible si creiamos que el caso estaba cerrado -dijo Liska-. ?Recuerdas a Eric Curtis?
– ?Curtis? ?El agente que fue asesinado cuando estaba fuera de servicio? Pero si el tipo que se lo cargo esta entre rejas. ?Como se llamaba, Vermin?
– Verma, Renaldo Verma.
– Una serie de atracos a mano armada a victimas homosexuales. Cometio… ?tres o cuatro en dieciocho meses?
– Cuatro. Dos de las victimas murieron, y la ultima de ellas fue Curtis.
– Con el mismo modus operandi que los demas, ?verdad? Atado, apaleado y robado.
– Si, pero Eric Curtis era policia -senalo Liska.
– ?Y?