Johnny se volvio hacia el y le pregunto, completamente serio:

—?Como se descubre un cometa? Ojala pudiera hacerlo.

—No tendrias tiempo —replico Tim—. Se necesitan anos, decadas a veces, y nunca se tienen garantias. Coges un telescopio y, a traves de el, memorizas el cielo. Luego te pasas todas las noches contemplando nada y helandote el culo. Hace frio en ese observatorio en la montana.

Mary Jane dijo algo. Johnny estaba alarmado, pero no lo mostro. El tecnico de sonido, con sus auriculares, hizo a Johnny una sena.

—?Te gusta poseer un cometa? —pregunto Johnny.

—Medio cometa —dijo Tim automaticamente—. Me encanta.

—No lo poseera durante mucho tiempo —dijo el doctor Sharps.

—?Eh? ?Como es eso? —inquirio Tim.

—Los rusos se apropiaran de el —explico Sharps—. Van a enviar un Soyuz para estudiarlo de cerca desde el espacio. Cuando lo consigan, el cometa sera suyo.

La noticia era desoladora.

—?Pero no podemos hacer nada? —pregunto Tim.

—Claro. Podemos lanzar un Apolo o algo mas grande. Tenemos todo el equipo necesario inmovilizado, oxidandose. Incluso llevamos a cabo los trabajos preliminares. Pero el dinero se agoto.

—?Pero —quiso saber Tim— podriais lanzar un cohete si tuvierais el dinero?

—Podriamos subir alli y observar como la cola del cometa envuelve a la Tierra. Es una verguenza que el pueblo americano no se preocupe mas por la tecnologia. A nadie le importa un comino, mientras funcionen sus cacharros electricos. ?Te has detenido a pensar en como dependemos de cosas que ninguno de nosotros comprende? —Sharps abarco con un gesto espectacular el estudio de television.

Johnny empezo a decir algo, acerca del ama de casa que usaba un computador domestico como pasatiempo, y cambio de idea. El auditorio en el estudio escuchaba. Habia un prudente silencio que Johnny hacia tiempo que habia aprendido a respetar. Querian oir a Sharps. Tal vez aquella seria una buena noche y aquel uno de los programas que la gente grabaria para verlo una y otra vez, los domingos, los aniversarios...

—No solo la television —decia Sharps—. La chapa de formica de tu mesa, por ejemplo. ?Que es la formica? ?Alguien sabe como se fabrica? ?O como se fabrica un lapiz? Y mucho menos la penicilina. Nuestras vidas dependen de esas cosas, y ninguno de nosotros sabe mucho de ellas. Ni siquiera yo.

—Yo siempre me he preguntado que es lo que hace crujientes a las tiras de los sostenes —dijo Mary Jane.

Johnny se apresuro a intervenir para centrar de nuevo el programa en Sharps.

—Pero dime, Charlie, ?que beneficios producira el estudio de ese cometa? ?Como cambiara eso nuestras vidas?

Sharps se encogio de hombros.

—Puede que no cambie nada. Tu me preguntas por los beneficios de la nueva investigacion, y todo lo que puedo responderte es que siempre ha sido beneficiosa, quiza no de la manera que tu lo considerarias. ?Quien habria pensado que obtendriamos toda una nueva tecnologia medica gracias al programa espacial? Pues la conseguimos. Hoy hay centenares de personas vivas porque los tecnicos especializados en el factor humano tuvieron que crear nuevos instrumentos para los astronautas. Johnny, ?has oido hablar alguna vez del Club de Roma?

Si, Johnny habia oido hablar, pero seria necesario recordarselo al auditorio.

—Son un grupo de personas que realizaron simulaciones mediante ordenadores electronicos para descubrir cuanto nos durarian nuestros recursos naturales. Incluso con un crecimiento cero de la poblacion...

—Nos dices que estamos acabados —le interrumpio Sharps—, y eso es estupido. Estamos acabados solo porque ellos no nos dejaran usar realmente la tecnologia. Dicen que se estan agotando los metales, pero hay mas metal en un pequeno asteroide que todo el extraido en las minas de todo el mundo en los ultimos cinco anos. Y hay centenares de millares de asteroides. Todo lo que hay que hacer es ir a por ellos.

—?Podemos hacerlo?

—?Puedes apostar a que si! Hasta con la tecnologia que ya tenemos, podriamos hacerlo. Johnny, ahi en el espacio esta lloviendo sopa, y nosotros ni siquiera sabemos algo sobre los platos para contenerla.

El publico del estudio aplaudio. No habian recibido ninguna indicacion de los ayudantes de produccion, pero aplaudieron. Johnny dirigio a Sharps una sonrisa aprobadora y decidio como iria el resto del programa. Pero primero hubo una senal frenetica: pausa para el anuncio de Jabones Kalva.

El programa siguio despues del anuncio. Cuando Sharps se calentaba, era realmente dinamico. Sus manos delgadas y huesudas oscilaban como aspas de molino. Tambien hablo sobre molinos de viento, y sobre la cantidad de energia que el sol emite a diario, acerca de la llamarada solar que habia observado la tripulacion del Skylab.

—?Johnny, habia suficiente energia en aquella pequena llamarada para hacer que funcionara toda nuestra civilizacion durante siglos! ?Y esos idiotas hablan de destruccion!

Pero estaban descuidando a Tim Hamner, y Johnny tuvo que hacerle intervenir en la conversacion. Hamner permanecia sentado, asintiendo, disfrutando con toda evidencia de lo que decia Sharps. Johnny se las ingenio para que el cientifico volviera a ocuparse del cometa y entonces vio su oportunidad.

—Charlie, has dicho que los rusos observarian de cerca el cometa Hamner-Brown. ?A que distancia?

—Podran acercarse mucho. Sin ninguna duda atravesaremos la cola del cometa. Ya te he mostrado por que no podemos saber cuanto se acercara la cabeza... pero pasara muy cerca. Si tenemos suerte, tal vez pasara a una distancia como la que nos separa de la Luna.

—Yo no llamaria a eso suerte —dijo Mary Jane.

—Tim, es tu cometa —dijo Johnny—. ?Crees que el Hammer-Brown podria realmente chocar con el planeta?

—Es Hamner, no Hammer —puntualizo Tim.

—Oh. —Johnny se echo a reir—. ?Que he dicho? ?Hammer? Si chocara contra nosotros seria un nombre mas apropiado, ?no crees?

—Tu lo has dicho —intervino Charlie Sharps.

—?Que hariamos si ocurriera? —pregunto Johnny.

—Bueno, ya tenemos algunos hoyos considerables debidos a impactos de meteoritos —dijo Tim—. El crater del Meteoro, en Arizona, tiene casi dos kilometros de anchura. El Vreedevort, en Africa del Sur, es tan grande que solo puede verse desde el aire.

—Y esos fueron meteoritos pequenos —comento Sharps. Todos se volvieron a mirarle y el sonrio—. ?Os habeis fijado alguna vez en lo circular que es la bahia del Hudson, o el mar del Japon?

—?Esos accidentes geograficos fueron producidos por impactos de meteoros? —pregunto Johnny. La idea era aterradora.

—Muchos pensamos que si. Y algo de enorme tamano choco con la Luna y casi la partio... Una cuarta parte de su superficie esta cubierta por un llamado oceano, que en otro tiempo fue un mar de lava que fluyo del punto donde choco un gran asteroide.

—Naturalmente, no sabemos de que esta formado el Hamner-Brown —informo Tim.

—Tal vez es hora de que lo averiguemos —dijo Mary Jane.

—Es solo cuestion de tiempo —dijo Sharps—. Cuanto mas largo sea el tiempo considerado, mayores son las probabilidades de que un cometa llegue a chocar con nosotros. Pero no creo que debamos preocuparnos por el Hamner-Brown.

Henry Armitage era un predicador que tenia un programa en la television. Habia predicado por la radio hasta que ano de sus fieles le dejo una herencia de diez millones de dolares. Ahora tenia su propia revista en papel satinado, su programa de television se veia en un centenar de ciudades y poseia un complejo de edificios en Pasadena que incluian une editorial.

Con todo, Henry redactaba gran parte de la revista, y siempre hacia los editoriales. Le encantaba mezclarse con los problemas del mundo. Sabia lo que significaban. Eran los signos de una mayor alegria venidera. Estaba escrito:

»—Dinos —habian preguntado los discipulos al Maestro—: ?Cuando veremos esos signos? ?Y cual sera la senal de tu venida y la del fin del mundo?

Вы читаете El martillo de Lucifer
Добавить отзыв
ВСЕ ОТЗЫВЫ О КНИГЕ В ИЗБРАННОЕ

0

Вы можете отметить интересные вам фрагменты текста, которые будут доступны по уникальной ссылке в адресной строке браузера.

Отметить Добавить цитату