Samshow termino su vaso de agua y lo deposito sobre la mesa. Mantuvo un cubito de hielo dentro de su boca, pasandolo de un lado a otro con su lengua.
—?Comprendera esto el presidente, senor Gordon? —pregunto.
—Yo no lo comprendo —respondio Arthur.
—Dos objetos —dijo Samshow— orbitando dentro de la Tierra, eludiendose el uno al otro, presumo, mientras sus movimientos armonicos son frenados hasta que terminan encontrandose en el centro. ?No les recuerda nada esto, amigos?
Kemp no respondio. Sand se encogio de hombros. La expresion de Post fue de extremo desconcierto, luego de ligera comprension.
—Un detonador —dijo—. Algo asi como un temporizador. ?Es en eso en lo que esta pensando?
—No se en lo que estoy pensando. Estamos yendo demasiado aprisa, vamos a caernos de culo de un momento a otro… Pero si, supongo que lo que tengo en mente es un detonador o una bomba.
—Un temporizador accionado por la gravedad —murmuro Post—. Eso es elegante.
—?Y que ocurrira cuando se encuentren? —pregunto Kemp—. Puedo comprender un agujero negro. No hay nada mas excitante que un agujero negro, excepto dos agujeros negros…
—Si son agujeros negros. Los analisis del ordenador dicen que no pueden serlo. Su forma ha sido trazada, son alargados como gusanos, y el segundo es diferente —dijo Sand—. Miren sus huellas. Alta radiacion en la atmosfera. Hace mas ruido que el primero. Y recuerden su aspecto…, brillaba como un hijo de puta mientras cruzaba el aire. ?Walt? ?Como describiria usted el primero?
—Al principio dos destellos largos y brillantes. Luego mas pequenos y mucho menos brillantes.
La mano de Post se agito inquieta en el cuello de su camisa.
—Demonios, tambien podria ser un simple y viejo meteoro —dijo Arthur—. Los meteoros brillan. ?Sabria reconocer un aficionado la diferencia?
—?Pero que hay acerca de la radiacion? Supongamos lo que supongamos, seguimos estando en el limbo —dijo Sand.
—No es algo para tomarse a broma —dijo Post, y dejo escapar una risita incongruente.
Samshow se inclino hacia delante.
—Pero supongamos que la segunda fue una caida mas espectacular. ?Un objeto mayor?
—Las huellas pueden indicar un objeto ligeramente mayor. O…, ?alteraciones explosivas a lo largo de su camino? —sugirio Sand.
Arthur escuchaba, regocijado por la confusion creativa.
—?Que podria liberar toda esa radiacion?
—Los agujeros negros pequenos podrian —dijo Post—. Pero serian de una seccion considerablemente mas pequena que unos cuantos centimetros, si su masa fuera de solo cien millones de toneladas. No creo que crearan un gran espectaculo. Y si estan emitiendo rayos gama a un nivel lo bastante alto como para irradiar a unos marineros que se hallan a kilometros de distancia… —Su rostro se hundio—. No van a durar mucho. Ademas, no pueden ser agujeros negros, ?recuerdan?
—?Que quiere decir con que no van a durar mucho? —pregunto Samshow.
Post hizo una mueca de frustracion.
—No son agujeros negros. Podemos estar bastante seguros de ello. Pero de acuerdo, los agujeros negros emiten constantemente radiacion. Cuando son grandes, son mas frios que el universo a su alrededor, pero no se hallan al cero absoluto… Asi que el efecto es una clara absorcion de energia. Pero despues de decenas de miles de millones de anos, o si fueron creados pequenos, se vuelven mucho mas calientes, y pierden su masa mucho mas rapidamente, a nivel de porcentaje. Cuando caen por debajo de las decenas de miles de toneladas de masa, estallan inmediatamente…, diez mil toneladas de pura energia. —Trabajo rapidamente en su calculadora—. En realidad, no la suficiente para causar mucho dano si se hallan profundamente enterrados dentro de la Tierra.
—Pero lo que tenemos aqui es un centenar de millones de toneladas —dijo Sand—. O quiza dos veces eso, si contamos el segundo objeto.
—Estaba llegando a eso —dijo Post, alzando una mano—. El peor caso es que el agujero negro, o los agujeros negros, puedan absorber masa dentro de la Tierra, crecer, y finalmente absorber toda la Tierra.
Se miraron los unos a los otros, preguntandose hasta que punto estaban dispuestos a creer aquello, hasta que punto podian estar dispuestos a creerlo.
—Eso no tendria sentido si los alienigenas tuvieran intencion de utilizar las materias primas de la Tierra para construir mas naves espaciales —dijo Post.
—?Que hay de algo distinto, algo de lo que no sepamos aun nada? —insistio Arthur.
Samshow se echo a reir.
—?Esta diciendo que lo sabemos todo acerca de los agujeros negros?
Mas silencio.
—Quiza sea trivial —dijo finalmente Samshow—. Pero me gustaria hablar de este incremento en el oxigeno y descenso del nivel medio del mar…, ?cuales son las cifras?
—El nivel de oxigeno ha ascendido un uno por ciento, el nivel medio del mar ha descendido un centimetro. ?Cree que estan relacionados?
—Estoy seguro de que todos hemos pensado en eso —dijo Arthur—. Algo puede estar disociando el agua del mar en hidrogeno y oxigeno, a gran escala.
—?Y? —dijo rapidamente Sand—. ?Donde esta el hidrogeno?
—No tengo ni la mas remota idea —dijo Samshow—. Solo crei que debia mencionarlo.
El ceno de Post se intensifico.
—Muy interesante —dijo.
—?Hay alguien que haya traido alguna buena noticia? —pregunto Arthur—. ?Algo que nos alegre un poco antes de irnos a cenar?
Nadie respondio.
37
En una rara, peligrosa pero necesaria salida al pueblo, Edward se sento en el cafe, con un plato con los restos de una enorme hamburguesa con patatas fritas a un lado, y examino los papeles enviados por el jefe de su departamento en Austin. Notas de las pagas atrasadas, formularios W-2 rectificados, sugerencias de horarios de clases para el proximo semestre. Un formulario de descargo de responsabilidad preparado por los abogados de la universidad, segun el cual esta quedaba al margen de cualquier responsabilidad, por pequena que fuera, derivada de su estancia en el Valle de la Muerte. La implicacion de todo aquel papeleo era, por supuesto, que la firma de todos aquellos documentos —especialmente el ultimo— significaba la reanudacion de su carrera.
Minelli entro en el cafe y se sento discretamente a su lado.
—?Vas a firmar? —pregunto.
—No veo por que no —dijo Edward—. ?Y tu?
—Por supuesto. Vuelta a la normalidad. —Sonrio languidamente y alzo un pulgar, luego contemplo intensamente su dedo—. Haciendo autostop de vuelta a la vida. La vieja universidad esta actuando como si nos tuviera miedo.
La camarera, joven y rolliza y de brillante rostro, salio de la cocina con un bloc en las manos.
—?Quiere alguna cosa? —pregunto.
—?Que tal la carne mechada? —pregunto Minelli.
La camarera alzo los ojos al cielo.
—No recomendable —dijo—. De hecho, no tenemos.
—Bien, entonces nada para mi.
—?Alguna otra cosa? —pregunto a Shaw. Este nego con la cabeza. La muchacha le paso una cuenta impresa que llevaba en la parte delantera del bloc, y el le paso su tarjeta de credito.