— Me he divorciado — cuchicheo Snaut. Si pocos dias antes alguien hubiese iniciado asi una conversacion, yo me hubiera reido con ganas; pero la Estacion habia embotado mi sentido del humor—. Desde anoche he vivido horas que valen anos — agrego—. Anos que no se olvidan. ?Y tu?
Al cabo de un instante respondi:
— Nada.
No sabia que decir. Le tenia mucho afecto a Snaut; sin embargo, desconfiaba de el, o mejor dicho, desconfiaba del motivo de la visita.
—?Nada? — repitio Snaut—. Tu debias…
Fingi no entender.
—?Que?
Con los ojos entornados, se inclino tan cerca de mi que me echo el aliento en la cara.
— Nos enredamos en este asunto, Kelvin. No consigo comunicarme con Sartorius. Solo se lo que te escribi, lo que el me conto despues de nuestra pequena conferencia…
—?Desconecto el telefono?
— No, un corto circuito en el laboratorio. Quiza lo provoco el mismo, a menos que… — Cerro el puno con fuerza y amago el ademan de aplastar un objeto. Una sonrisa desagradable le levanto las comisuras de los labios. Yo lo miraba sin decir una palabra. — Kelvin, he venido para… ?que piensas hacer?
—?Vienes a buscar mi respuesta a tu carta? Saldre de paseo, no tengo motivos para rehusarme. Justamente preparaba mi viaje…
Snaut me interrumpio.
—?No! No se trata de eso.
—?No? ?De que, entonces? Te escucho.
— Sartorius… cree estar sobre la pista. — Snaut no me sacaba los ojos de encima. Yo no me movia; trataba de conservar un aire indiferente. — Todo comenzo con ese experimento de rayos X que el y Gibarian llevaron a cabo, ?te acuerdas? Eso puede haber provocado cierta alteracion…
—?Que alteracion?
— Apuntaron los rayos directamente al oceano, modulando la intensidad de acuerdo con un programa.
— Ya se. Niline ya lo hizo, y muchos otros.
— Si, pero las radiaciones eran debiles. Esta vez fue una radiacion poderosa. Recurrieron a toda la energia disponible.
— Eso puede tener consecuencias… violacion de la Convencion de los Cuatro, y las Naciones Unidas…
— Vamos, Kelvin, bien sabes que eso ya no es importante. Gibarian esta muerto.
— Ah, y Sartorius lo ha convertido en chivo emisario.
— No se. No hablamos de eso. A Sartorius le llama la atencion el horario de los « visitantes »; llegan siempre cuando uno se despierta. Parece que el oceano se interesara principalmente por nuestras horas de sueno y extrajera entonces de nosotros modelos y formulas. Ahora Sartorius quisiera enviarle nuestro « estado de vigilia ». Nuestros pensamientos conscientes ?entiendes? — ?Por correo?
— Ahorrate las bromas. La idea es modular los rayos mediante un electroencefalograma tomado de uno de nosotros.
— Ah. — Yo empezaba a entender. — Uno de nosotros, soy yo.
— Si, Sartorius ha pensado en ti.
— Que generoso.
—?Entonces?
Yo callaba. Snaut le echo una ojeada a Harey, que leia con aire absorto; en seguida, volvio a mirarme. Yo senti que me ponia palido.
—?Entonces? — repitio Snaut.
Me encogi de hombros.
— La idea de utilizar rayos X para transmitir algun sermon sobre la grandeza del hombre me parece ri- dicula.
—?De veras?
— Si.
— Muy bien — dijo sonriendo como si yo hubiese coincidido con el—. Entonces, ?estas en contra del proyecto de Sartorius?
Ignoraba como habia ocurrido, pero veia ahora que Snaut me habia llevado por las narices.
— Muy bien — prosiguio—. Hay un segundo proyecto: construir un aparato Roche.
—?Un desintegrador?
— Si. Sartorius, ya ha hecho los primeros calculos. Es posible, y ni siquiera requiere mucho gasto de energia. El aparato generara un campo magnetico negativo las veinticuatro horas del dia, durante un tiempo ilimitado.
—?Y los efectos?
— Ningun problema. Campos negativos de neutri-nos. La materia comun no sufrira ningun cambio. La desintegracion alcanzara solo las estructuras de neu-trinos, ?entiendes?
Snaut sonreia, satisfecho. Yo lo miraba, con la boca abierta, y el dejo de sonreir. Fruncio el ceno, me observo con atencion, y espero un momento antes de hablar.
— Bueno, dejamos de lado la operacion « Pensamiento ». Sartorius esta trabajando ya en el segundo plan. Lo llagaremos « Liberacion ».
Cerre un instante los ojos. De pronto., me decidi, Snaut no era fisico. Sartorius habia desconectado o destruido el videofono. Perfecto.
— Yo llamaria « Operacion Masacre » a este segundo proyecto — dije.
— Tu sabras por que. No me niegues que has practicado bastante ultimamente. Pero esta vez hay una diferencia radical. No mas « visitantes », no mas creaciones F… Se desintegraran tan pronto como aparezcan.
Yo menee la cabeza, y esboce una sonrisa que queria parecer natural.
— Hay un malentendido. No te hablo de escrupulos morales, sino de supervivencia. Mi querido Snaut, yo no quiero morir.
—?Como?
Snaut me miraba con desconfianza.
Saque de mi bolsillo una hoja cubierta de formulas.
— Yo tambien considere la posibilidad de ese « experimento ». ?Te extrana? Sin embargo, fui yo quien formulo la hipotesis de los neutrinos ?no? Mira. Si, es posible generar campos negativos, que serian inofensivos para la materia ordinaria. Pero en el momento de la desintegracion, cuando la estructura de neutrinos se derrumbe, liberaremos un considerable excedente de energia. Si admitimos por kilogramo de sustancia en reposo 108 ergos, para una creacion F habra que multiplicar 57 por 108. ?Sabes lo que eso significa?… Una pequena bomba de uranio estallando dentro de la Estacion.
—?Pero tu piensas que Sartorius no lo ha tenido en cuenta?
Esboce una sonrisa maliciosa.
— No necesariamente. Te das cuenta, Sartorius pertenece a la escuela de Frazer y Cajolla. Segun ellos, en el momento de la desintegracion, toda la energia latente es liberada como radiacion luminosa, intensa, pero no destructiva. Sin embargo, hay otras hipotesis, otras teorias acerca de los campos de neutrinos. Segun Cayatte, segun Awalow, segun Sion, el alcance de la emision es mucho mas vasto; al llegar al maximo, la energia se transforma en una poderosa emision de rayos gamma. Sartorius confia en sus maestros y en sus teorias, magnifico; pero hay otros maestros y otras teorias. Ya sabes, Snaut — prosegui, viendo que mis palabras lo habian impresionado—, tambien es preciso tener en cuenta al Oceano. Para realizar esas creaciones, ha aplicado sin duda un metodo optimo. En otras palabras, los procedimientos del oceano dan la razon a esas otras teorias, y no a Sartorius.
— Pasame ese papel, Kelvin…
Le di la hoja. Snaut inclino la cabeza y trato de descifrar mis garabatos.
Senalo una linea de ecuaciones.
—?Que es esto?
Tome de nuevo la hoja.
—?Esto? El tensor de transmutacion del campo magnetico.