lagrimas en los ojos… una cosa que siempre constituye una molestia en caida libre; el liquido no puede ir a ninguna parte.
—Senor Bonforte, ha sido algo hermoso.
—Gracias, Jimmy.
Penny no pudo pronunciar una sola palabra.
Despues de la reunion me meti en la cama; una representacion dificil siempre me deja completamente rendido. Dormi mas de ocho horas y luego me desperto el bramido del altavoz. Me habia atado a la litera con los cinturones de seguridad… odio el flotar en el aire mientras duermo en caida libre… y por lo tanto no tuve que moverme de la litera. Pero no sabia que volviamos a acelerar, de modo que llame a la cabina de control entre el segundo y el tercer aviso.
—?Capitan Broadbent?
—Un momento, senor —contesto la voz de Epstein, el copiloto.
Luego escuche la voz de Dak.
—?Si, Jefe? Volvemos a acelerar, de acuerdo con sus instrucciones.
—?Eh? ?Oh, claro, desde luego!
—Creo que Clifton se dirige ahora hacia su cabina.
—Muy bien, capitan.
Volvi a tenderme en la litera y espere.
Inmediatamente despues que senti el tiron de la aceleracion a una gravedad, Clifton entro en mi cabina; tenia una expresion preocupada en su semblante que no pude descifrar… partes iguales de triunfo, confusion o ira.
—?Que sucede, Roger?
—?Jefe! ?Se nos han adelantado! ?El Gobierno de Quiroga ha dimitido!
7
Aun estaba medio adormilado, movi la cabeza para tratar de aclarar mis ideas.
—?Y por que parece tan preocupado, Roger? Eso es lo que trataban de conseguir, ?no es cierto?
—Pues si… desde luego. Pero… —se interrumpio.
—Pero ?que? No lo comprendo. Han estado trabajando e intrigando durante anos para llegar a esta situacion. Ahora que lo han conseguido… se parecen a la novia que no se encuentra segura de que se quiera casar con su prometido, y eso en el mismo dia de la boda… ?Por que? Los malvados han sido arrojados a la calle y los buenos de la pelicula iniciaran una era de miel y felicidad. ?No es asi?
—?Uh!… se conoce que no sabe mucho de politica.
—En efecto. Me cure de esa enfermedad cuando presente mi candidatura para jefe de patrulla en los boy- scouts.
—Pues bien, todo depende de hacer las cosas en el momento oportuno.
—Eso mismo decia mi padre. Mire, Roger, me parece entender que si las cosas fuesen como usted quiere, Quiroga aun seguiria en el Gobierno. Antes dijo que se le habia adelantado.
—Dejeme que le explique. Lo que queriamos en realidad era forzarle a pedir un voto de confianza y ganar la votacion y por lo tanto obligarle a que convocase elecciones generales… pero en el momento que nos conviniese, cuando podiamos ganar la eleccion.
—?Oh! ?Y ahora piensan que no la pueden ganar? ?Cree que Quiroga volvera a ser Ministro Supremo por otros cinco anos… o por lo menos que el Partido de la Humanidad recobrara el poder?
Clifton parecio pensativo.
—No; creo que tenemos muchas posibilidades de ganar la eleccion.
—?Eh? Es posible que todavia no este despierto. ?Es que no quieren ganar?
—Desde luego. Pero ?es que no comprende lo que esta dimision nos ha hecho?
—Creo que no.
—Bien, el Gobierno que esta en el poder puede convocar a elecciones generales en cualquier momento dentro de los limites constitucionales de cinco anos. Generalmente se dirigen al pueblo cuando el momento les parece el mas favorable para ellos. Pero no dimiten entre la convocatoria y las elecciones a menos que se vean obligados a ello. ?Comprende?
Me di cuenta de que los acontecimientos seguian un orden extrano, aunque yo no estaba muy acostumbrado a las cosas de la politica.
—Creo que si.
—Pero en este caso el Gobierno Quiroga ha convocado elecciones generales y luego ha dimitido en masa, dejando el Imperio sin gobierno. Por lo tanto el Soberano se ve precisado a llamar a algun otro para que forme un Gobierno regente que lleve la direccion del Estado hasta que se celebren las elecciones. De acuerdo con la letra de la Ley puede solicitar los servicios de cualquier miembro de la Asamblea Interplanetaria, pero como asunto estricto de precedente constitucional no tiene eleccion posible. Cuando un Gobierno dimite en masa… no simplemente cuestion de unas cuantas carteras, sino que abandona en bloque… entonces el Soberano debe requerir al Jefe de la Oposicion que forme el Gobierno regente. Es algo indispensable en nuestro sistema politico; evita que la dimision no pase de ser un gesto vacio de significado. En el pasado se han aprobado muchos otros sistemas, bajo algunos de ellos se cambiaba de Gobierno como de camisa. Pero el nuestro actual asegura un Gobierno responsable y duradero.
Me senti tan ocupado tratando de comprender todas las consecuencias de la situacion, que casi no comprendi sus siguientes palabras.
—De modo que, naturalmente, el Emperador ha requerido la presencia de Bonforte en New Batavia.
—?Como? ?New Batavia? ?Muy bien!
Estaba pensando que nunca habia visitado la Capital Imperial. La unica vez que estuve en la Luna las vicisitudes de mi profesion me dejaron sin tiempo ni dinero para hacer la excursion.
—?Es por eso entonces que hemos vuelto a acelerar? Bien, a mi no me importa ir a New Batavia. Supongo que siempre encontraran una manera de enviarme a casa si el
—?Que? ?Cielos!, no se preocupe por eso ahora. Cuando llegue el momento, el capitan Broadbent encontrara mil formas de hacer que usted llegue a su casa sano y salvo.
—Lo siento. Me olvide que tiene asuntos mas importantes que el mio, Roger. Desde luego que tengo que volver a casa ahora que mi trabajo ha terminado. Pero no me importa pasar unos cuantos dias o hasta un mes en la Luna, si es preciso. No tengo ningun asunto urgente entre manos. Pero le agradezco que se haya molestado en explicarme la situacion —mire atentamente a su rostro—. Roger. Parece estar muy preocupado.
—?Es que no lo comprende? El Emperador ha enviado a buscar al senor Bonforte. ?El Emperador! Y Bonforte no se encuentra en condiciones de presentarse en publico. ?Nuestros enemigos han realizado una jugada muy audaz y es posible que nos hayan llevado a un jaque mate!
—?Eh? Espere un momento. Poco a poco. Ya veo lo que quiere decir… pero, amigo, todavia no estamos en New Batavia. Estamos a cien millones de millas de distancia, o doscientos millones, o lo que sea. El doctor Capek lo habra estrujado y dejado listo para que se presente ante el Emperador cuando lleguemos. ?No lo cree asi?
—Bien… nos queda esa esperanza.
—Pero ?no esta seguro?
—No podemos tener la seguridad. Capek dice que no existe una informacion clinica completa para estos casos de dosis masivas. Depende del metabolismo de cada individuo y de la droga que se haya usado.
De repente me acorde de la ocasion cuando un subalterno me habia propinado, sin yo saberlo, una potente purga momentos antes de la representacion. (Pero yo desempene mi papel a toda costa, lo cual prueba el dominio de la mente sobre la materia… y luego le despedi en el acto).
—Roger, ?es posible que le hayan propinado la ultima e innecesaria inyeccion no solo por simple sadismo… sino para llevarnos a esta situacion?
—Yo asi lo creo. Tambien el doctor Capek es de la misma opinion.