—?Alto! En tal caso eso significa que Quiroga es el hombre que ha maquinado el secuestro… y que hemos tenido a un gangster dirigiendo el Imperio.
Roger movio la cabeza.
—No necesariamente. Ni siquiera es probable. Pero desde luego significa que las mismas fuerzas que controlan a los Activistas tambien controlan los destinos del Partido de la Humanidad. Pero nunca podremos acusarles de nada; son todos gente irreprochable, ultrarespetables. Sin embargo, han podido avisar a Quiroga de que habia llegado el momento de tenderse en el suelo y hacerse el muerto… y obligarle a hacerlo. Casi con toda seguridad —anadio—, sin decirle los verdaderos motivos de por que se consideraba este como el momento oportuno.
—?Cielos! ?Quiere decir que el hombre que ocupa el puesto mas alto del Imperio puede cerrar el negocio y abandonar, de esa forma? ?Todo porque alguien entre bastidores le ordene que lo haga?
—Me temo que eso es lo que creo.
Movi la cabeza lentamente.
—?La politica es un juego sucio!
—No —contesto Clifton con calor—. No existen los juegos sucios. Pero a veces uno se encuentra con jugadores deshonestos.
—No veo en que consiste la diferencia.
—Hay un mundo de diferencia. Quiroga es un politico de tercera fila y un hombre de paja… En mi opinion esta en las manos de unos cuantos malvados. Pero no hay nada de mediocridad en John Joseph Bonforte, y este nunca, nunca, ha sido un juguete de nadie. Como partidario, ha creido siempre en la causa, como jefe, nos ha dirigido por la conviccion.
—Reconozco mi error —dije humildemente—. Bien, ?que podemos hacer? ?Que Dak arrastre los pies de manera que el
—No podemos demorarnos. No estamos obligados a acelerar a mas de una gravedad; nadie puede esperar que un hombre de la edad de Bonforte soporte un esfuerzo innecesario para su organismo. Pero no podemos tardar en exceso. Cuando el Emperador llama, debemos acudir.
—?Entonces que?
Clifton me miro sin contestar. Yo empece a ponerme nervioso .
—?Un momento, Roger, no empiece a tener ideas absurdas! Todo esto no tiene nada que ver conmigo. Yo ya he terminado, excepto por unas cuantas representaciones en esta nave. Sucio o no, la politica no es un juego que me guste. . . Me contento con que me paguen y me envien a casa y les garantizo que ni siquiera me inscribire para votar.
—Probablemente no tendra que hacer nada. El doctor Capek posiblemente lo tendra curado cuando lleguemos a New Batavia. Pero de cualquier modo no seria nada dificil para usted… mucho menos que la ceremonia de adopcion marciana… solo una entrevista con el Emperador y…
—?El Emperador! —casi grite.
Como la mayoria de los americanos, no comprendia a la realeza y en el fondo no aprobaba la institucion… y ademas sentia un oculto e inadmitido temor a los Reyes. Despues de todo, los americanos llegamos al Imperio por la puerta trasera. Cuando firmamos el Tratado por el que nos convertimos en Miembro del Imperio a cambio de las ventajas de voz y voto en la Asamblea Interplanetaria, se acordo explicitamente que nuestras instituciones locales, nuestra Constitucion y todo lo demas, no serian afectadas… y tacitamente admitido que ningun miembro de la familia real visitaria nunca America. Quiza no haya sido una buena idea. Quiza si estuviesemos mas acostumbrados a la realeza no nos impresionaria tanto. En cualquier caso, es bien conocido el hecho que las democraticas damas americanas son las mas impacientes en su deseo de ser presentadas en la corte del Emperador que las de ningun otro pais.
—Tranquilicese —contesto Clifton—. Probablemente no tendra que hacerlo. Solo queremos estar preparados Lo que queria decirle es que un Gobierno regente no presenta ninguna dificultad. No formula ninguna Ley, ni cambia nada de las normas establecidas. Yo me cuidare de todo el trabajo. Todo lo que usted tendra que hacer… si es que tiene que hacer algo… sera presentarse en la audiencia oficial del Emperador Willem… y quiza acudir a una o dos conferencias de prensa controladas; depende del tiempo que tarde en curarse Bonforte. Lo que ya ha realizado ha sido mucho mas dificil… y le pagaremos por ello tanto si tiene que hacerlo como si no.
—?Maldita sea! ?El dinero no tiene nada que ver con esto! Es que… oiga, para usar las palabras de un famoso actor teatral de otros tiempos: “?No cuenten conmigo!”.
Antes de que Clifton pudiera contestar, Bill Corpsman irrumpio en mi cabina sin llamar a la puerta, nos miro y dijo bruscamente a Clifton:
—?Se lo has dicho?
—Si —admitio Clifton—. No acepta el trabajo.
—?Como? ?Que tonteria!
—No es una tonteria —replique—, e incidentalmente, Bill, esa puerta por la que acaba de entrar tiene un sitio magnifico para golpear. En mi profesion se acostumbra a llamar a la puerta y gritar: “?estas presentable?”, antes de entrar. Quisiera que se acordase de eso.
—?Oh, mil rayos! Estamos en un lio y no hay tiempo para eso. ?Que es esa cobardia de no querer aceptar el trabajo?
—No es cobardia. Este no es el trabajo para el que me comprometi.
—?Basura! Quiza es demasiado estupido para darse cuenta de ello, Smythe, pero esta ya demasiado metido en el asunto para rezongar que quiere salirse ahora. No sera bueno para su salud.
Me acerque a el y le agarre por el brazo.
—?Me amenaza, Bill? Si es asi, salgamos fuera y lo discutiremos.
Se sacudio mi mano de encima con un ademan.
—?En una nave espacial? ?Es usted tonto? Pero ?es que no ha acabado de comprender que todo este lio es por culpa suya?
—?Que quiere decir?
—Quiere decir —contesto Clifton— que esta convencido que la caida del Gobierno Quiroga ha sido consecuencia directa del discurso que ha pronunciado hace unas cuantas horas. Es posible que tenga razon. Pero eso no tiene importancia ahora. Bill, trata de mostrarte cortes dentro de lo razonable, ?quieres? No iremos a ninguna parte si empezamos a pelearnos entre nosotros.
Me senti tan sorprendido por la idea de que yo habia sido la causa de la dimision de Quiroga que se me olvido el deseo que sentia de hacer saltar unos cuantos dientes a Corpsman. ?Era posible que hablasen en serio? Desde luego habia sido un discurso magnifico, pero no podia creer en los resultados.
Bien, si era cierto, no hay duda que el efecto habia sido rapido.
Dije pensativo:
—Bill, ?debo comprender que se queja porque el discurso que pronuncie tuvo un efecto mas grande del que usted queria?
—?Que va! Si fue un discurso ridiculo.
—?Es posible? Pero no se pueden sustentar dos opiniones contrarias. En realidad esta diciendo que un discurso ridiculo tuvo tal efecto que hizo saltar del poder al Partido de la Humanidad. ?No es eso lo que quiere decir?
Corpsman parecio furioso; empezo a contestarme y se dio cuenta de que Clifton escondia una sonrisa detras de la mano. Hizo una mueca, empezo de nuevo a hablar… y finalmente se encogio de hombros y dijo:
—De acuerdo, campeon, tiene razon; el discurso no ha tenido nada que ver con la caida del Gobierno Quiroga. Sin embargo, eso nos carga con una montana de trabajo. De modo que ?que hay de eso de que no quiere hacer su parte?
Volvi a mirarle y consegui calmar mi colera… sin duda gracias a la influencia del caracter de Bonforte; el representar el papel de una persona de temperamento sereno contribuye a la propia serenidad.
—Bill, de nuevo tengo que repetir que no se pueden tener dos opiniones distintas. Hace un momento ha dicho de una manera rotunda que no me consideraba otra cosa que un asalariado. Por lo tanto, no tengo otra obligacion que cumplir con mi trabajo, el cual esta terminado. No puede alquilarme para otro trabajo, a menos