interesaba en conseguir alguna ayuda extra para sus calculos. En realidad, no es muy buen matematico. Quiza fue solo eso… al principio.
— ?Y ahora?
— ?Ahora? — se limpio unas gotitas de espuma de la mejilla -. Ya le vio la semana pasada… dice que me amenaza con casarse conmigo.
— En realidad no me lo ha pedido, Jerry. Creo que Ted da por sentado que soy su novia y que se casara conmigo algun dia… despues de que haya demostrado que puede controlar el tiempo.
— ?Quiere usted decir que da por sentado una cosa asi?
Asintiendo, ella dijo:
— Debe usted comprenderle, Jerry. Esta tan enfrascado en su trabajo, que la gente… bueno, no es que en realidad sea algo secundario para el, sino que Ted, simplemente, no se preocupa por la gente a menos que se le obligue a prestar atencion. Y que no pueda posiblemente hacer lo que desea por si solo. Necesita que se le ayude. Por eso yo le auxilio y trato de no causarle problemas.
— Eso es muy conveniente para Ted.
— Asi lo espero. Jamas conoci a ninguna persona como el. Supongo que formo parte de sus planes para el futuro — dudo -. Me imagino que soy casi tan importante para el como controlar el tiempo.
— Se merece usted un destino mejor que ese — dije.
— Eso es lo que continuamente le digo.
Dirigi el bote de regreso al muelle y luego fuimos en coche a uno de los mejores restaurantes estudiantiles ?e Harvard Square, donde cenamos. Empezo a hacerme preguntas sobre Hawai y mi familia. Cuando se termino la comida, ella me estaba hablando de la guerra civil en Africa del Sur y de como su padre salvo el telescopio de trescientos ochenta centimetros de ser destruido por una turba de renegados.
Presenciamos un espectaculo en 3-D en el nuevo teatro Hologram y luego volvimos en coche a lo largo del Charles hasta 'Faculty Row', donde estaba situado su apartamento. Vivia con su tio, que era un profesor visitante del MIT, al igual que miembro del personal de Climatologia.
— Me he divertido mucho, Jerry — dijo mientras le ayudaba a bajar del coche -. Me he divertido inmensamente.
— Me alegro. Pronto tendremos que repetirlo.
— Estupendo.
Deseaba besarla, pero antes de que pudiese decidirme, dio media vuelta y subio los escalones hasta la puerta del apartamento. Me quede alli plantado, sintiendome estupido, mientras ella me daba las buenas noches con un gesto de su mano.
Me pase la siguiente manana en la Biblioteca Publica de Boston reuniendo libros-carrete sobre meteorologia (la mayor parte de los cuales, como resulto luego, no pude comprender) y discutiendo con el director de la Biblioteca para que me permitiese llevarmelos prestados, aun cuando yo no fuera un residente actual de la ciudad.
Regrese a la habitacion del hotel con los carretes bajo el brazo. El telefono sonaba mientras abria la puerta.
Grite: ?Hola! — para que se estableciese el circuito, pensando que podria ser Barney, pero cuando entre en el cuarto vi el rostro de mi padre en la pantalla.
— De modo que esta ahi, dijo cuando me coloque ante la pantalla visora.
Deje caer los carretes de microfilmes en el sofa.
Jeremy, acabamos de recibir las primeras rapidas predicciones del Departamento de Meteorologia, junto con un analisis de las tendencias climatologicas del proximo mes.
— ?Y que aspecto tiene todo?
Mi padre sacudio la cabeza.
— Nada bueno en absoluto. Voy a cancelar todas las operaciones de dragado durante el resto del mes. El aviso con tres dias de anticipacion de una tormenta… que puede o no alcanzarnos… no es suficiente base para nuestras operaciones. Prefiero cerrar y perder el dinero antes de que los aparatos de dragado se destruyan o muera alguien.
— Lo siento… -
— No es tuya la culpa. Has hecho todo lo que has podido. La dificultad es que si fallamos en este contrato con Modern Metals, circulara la noticia de que la mineria en mares profundos no es de confianza. Eso es lo que en realidad puede matarnos.
Permaneci sentado en el borde del sofa.
— Padre, ?te gustaria tener predicciones exactas, con una semana de anticipacion? Del todo exactas — precise.
Lanzo un grunido.
— En eso es donde trabaja Ted. A fin de mes, podra emitir un juego de predicciones para nosotros que nos indicara cual sera el tiempo en toda la zona donde se efectuan los dragados. Las predicciones se extenderan a dos o tres semanas en el futuro.
Mi padre se froto la barbilla, pensativo.
— Si puede hacer eso, mantendremos en marcha los dragados… para cerrarlos solo temporalmente, adelantandonos al clima tormentoso, y reabrirlos despues. Pero necesitaremos el aviso con una semana de tiempo para que el sistema funcione.
— Ted puede lograrlo, estoy seguro. Por lo menos con dos semanas. Entonces sabras exactamente cuando cerrar las operaciones de dragado, cuanto tiempo tendran que estar suspendidas y cuando podras volverlas a abrir. Podrias programar en el sistema de operaciones calculando con los efectos de las tempestades.
— ?Puede hacer eso… el tal Marrett?
— A fines de semana lo sabremos seguro.
Mi padre rumio durante unos momentos.
— Esta bien, Jeremy. Mantendre los dragados en funcionamiento hasta fines de semana. Ruega tan solo para que no nos pille otra mala tormenta.
— Conservare los dedos cruzados.
Sin darme cuenta, habia asignado a Ted una mision muy dificil… sin que el tampoco lo supiera. Trate de llamarle, pero no pude ponerme en contacto con mi amigo. Asi que recurri a Barney, en la Seccion de Computaciones.
— Ignoro cuando podras ver a Ted — me respondio -. Estara esta noche atareado repasando sus predicciones… y yo le ayudare. ?Por que no te reunes con nosotros alli?