de calma. Mas en verano que en invierno, excepto en Feria de Invierno. Entonces habia un monton de asesinatos multiples. La mayoria no eran ningun misterio, por supuesto. Pero ni siquiera en Hassadar los habia tan raros como para interesar a nuestros forenses. Nuestros medicos eran interinos del Distrito Universitario, principalmente, de practicas. Si alguna vez nos encontrabamos con algo realmente extrano, llamabamos a uno de los investigadores de homicidios de lord Vorbohn en Vorbarr Sultana. Alli deben tener un asesinato al dia, y de todo tipo, un monton de experiencia. Apuesto a que el jefe Venn ni siquiera tiene un departamento forense, solo un medico cuadri al que llama de vez en cuando. Asi que no es de esperar que tengan los niveles de exigencia de, ejem, SegImp a los que usted esta acostumbrado. Milord.
—Es… un punto de vista interesante, soldado. Gracias.
Tomo otro sorbo de cafe.
—Solian… —dijo, pensativo—. Todavia no se lo suficiente sobre Solian. ?Tenia enemigos? Maldicion, ?tenia ese hombre al menos un amigo, o una amante? Si lo mataron, ?fue por razones personales o profesionales? La diferencia es importante.
Miles habia echado un vistazo al historial militar de Solian en el viaje de ida, y le habia parecido normal y corriente. Si el hombre habia estado alguna vez en el Cuadrispacio, habia sido antes de unirse al Servicio Imperial, hacia ya seis anos. Habia realizado dos viajes anteriormente, con diferentes consorcios y diferentes flotas militares; entre sus experiencias no habia al parecer nada mas excitante que encargarse de algun tripulante beodo o de un pasajero molesto.
De media, mas de la mitad del personal militar de cualquier escolta por el Nexo seria nuevo. Si Solian habia hecho amigos (o enemigos) en las semanas transcurridas desde que aquella flota saliera de Komarr, tendria que haber sido en la
Apuro la taza y pulso el numero del jefe Venn en la consola. El comandante de la seguridad cuadri habia llegado tambien temprano al trabajo, al parecer. Su oficina personal estaba evidentemente en la parte en caida libre de la estacion. Aparecio flotando de lado en el visor de Miles, con una burbuja de cafe en la mano superior derecha.
—Buenos dias, lord Auditor Vorkosigan —murmuro amablemente, pero mino la cortesia verbal al no enderezarse para estar como Miles, quien tuvo que hacer un esfuerzo consciente para no doblarse en su asiento —. ?Que puedo hacer por usted?
—Varias cosas. Pero primero, una pregunta: ?Cuando se cometio el ultimo asesinato en la Estacion Graf?
Venn fruncio el ceno.
—Hubo uno hace unos siete anos.
—?Y, ah, antes de eso?
—Tres anos antes, creo.
Una autentica ola de crimenes.
—?Se encargo usted de esas investigaciones?
—Bueno, tuvieron lugar antes de mi epoca… Me nombraron jefe de seguridad de la Estacion Graf hace unos cinco anos. Pero no hubo mucho que investigar. Ambos sospechosos eran planetarios en transito: uno mato a otro planetario, el otro asesino a un cuadrumano con el que se habia puesto a discutir estupidamente por un pago. Su culpabilidad fue corroborada por testigos y confirmada con un interrogatorio con pentarrapida. Los asesinos casi siempre planetarios, se lo advierto.
—?Habia investigado usted alguna vez un asesinato misterioso?
Venn se enderezo, al parecer para poder mirar a Miles con el ceno fruncido de manera mas efectiva.
—Mi gente y yo estamos plenamente entrenados en los procedimientos adecuados, se lo aseguro.
—Me temo que prefiero guardarme mi opinion en lo concerniente a eso, jefe Venn. Tengo una noticia bastante curiosa. Hice que el cirujano jefe de la flota de Barrayar examinara de nuevo la sangre de Solian. Parece que la sangre en cuestion se produjo de manera artificial, presumiblemente a partir de una muestra de la sangre autentica de Solian o de algun tejido suyo. Tal vez quiera que sus forenses, sean quienes sean, comprueben de nuevo las pruebas archivadas de la bodega de carga y lo confirmen.
Venn fruncio todavia mas el ceno.
—?Entonces… deserto, no fue asesinado despues de todo! ?No me extrana que no pudieramos encontrar ningun cadaver!
—Corre… Se precipita usted, creo. Le garantizo que el panorama se ha vuelto mas que pantanoso. Le pido, por tanto, que localice todas las posibles instalaciones de la Estacion Graf donde pueda llevarse a cabo una sintesis de tejidos, y que compruebe si se esta realizando ese tipo de trabajo y para quien, o si podria haberse hecho de tapadillo, ya puestos. Creo que podemos suponer sin temor a equivocarnos que quien lo haya mandado hacer, Solian o alguien desconocido, estaba muy interesado en ocultarlo. El cirujano jefe me ha dicho que la sangre probablemente fue generada apenas un dia antes de que fuera derramada, pero la solicitud tuvo que hacerse en el momento en que la
—Yo… le sigo, desde luego. —Venn se llevo a la boca la burbuja de cafe, la apreto, y luego se la paso ausente a la mano inferior izquierda—. Si, desde luego —repitio mas debilmente—. Me encargare yo mismo.
Miles se sintio satisfecho de haber sacudido a Venn lo suficiente para que, avergonzado en el grado justo, se pusiera en marcha sin ponerse a la defensiva.
—Gracias.
—Creo que la Selladora Greenlaw deseaba hablar tambien con usted esta manana, lord Vorkosigan — anadio Venn.
—Muy bien. Puede pasarle esta llamada, si quiere.
Al parecer, Greenlaw era una persona madrugadora, o habia bebido su cafe mas temprano. Aparecio en el holovid vestida con un elaborado jubon, diferente al del dia anterior, severa y completamente despierta. Tal vez mas por costumbre diplomatica que por ningun deseo de complacer, se enderezo para que Miles la viera de manera adecuada.
—Buenos dias, lord Auditor Vorkosigan. En respuesta a sus peticiones, le he preparado una cita con los pasajeros de la flota komarresa a las 10.00. Puede reunirse con ellos para responder a sus preguntas en el mas grande de los dos hoteles donde estan albergados en este momento. El practico Thorne se reunira con usted en la nave y lo llevara hasta alli.
Miles echo atras la cabeza. Aquello era abusar de su tiempo y de su atencion. Por no mencionar el descarado movimiento de presion. Por otro lado… le ponian en las manos una sala llena de sospechosos, justo la gente que deseaba estudiar. Equilibro la irritacion y la ansiedad, para comentar simplemente:
—Es usted muy amable al hacermelo saber. ?Que es exactamente lo que cree que podre decirles?
—Eso se lo dejo a usted. Estas personas vinieron con ustedes los barrayareses; son responsabilidad suya.
—Senora, si asi fuera, ya estarian todos de camino. No puede haber responsabilidad sin poder. Son las autoridades de la Union las que los han colocado en este arresto domiciliario, y por tanto son las autoridades de la Union quienes deben liberarlas.
—Cuando terminen de abonar las fianzas, costes y multas de su gente, nos alegrara hacerlo.
Miles sonrio debilmente y unio las manos sobre la mesa. Deseo que la unica nueva carta que tenia para jugar aquella manana fuera menos ambigua. No obstante, le repitio a la Selladora Greenlaw la noticia sobre la muestra sanguinea manufacturada de Solian, bien envuelta en la queja de que la policia cuadri no habia determinado antes aquel detalle concreto. Ella replico al instante, como habia hecho Venn, que eso era una prueba mas que apoyaba la desercion y no el asesinato.
—Bien —dijo Miles—. Entonces, que Seguridad de la Union encuentre a Solian. Un planetario extranjero deambulando por el Cuadrispacio no debe de ser tan dificil de localizar para una policia competente. Suponiendo que lo este intentando.
—El Cuadrispacio —replico ella— no es un Estado totalitario. Y su teniente Solian puede que lo haya observado. Nuestras garantias de libertad de movimiento e intimidad personal podrian haber sido lo que le atrajo para separarse aqui de sus antiguos camaradas.