treinta milenios.

Solo que algunas cosas habian resistido. Las emociones de Drake habian sobrevivido inalteradas. Se dio cuenta de que disfrutaba de su despertar. Estar sentado a medio metro de Ana, contemplando las viejas expresiones de cavilacion y preocupacion que le cruzaban el rostro… era una bendicion inconmensurable.

—Lo siento. —La nueva Ana inclino la cabeza—. Tu Servidor no tiene la culpa. Tu despertar es obra mia. Vine a Pluton y, como humana, anule las instrucciones que le habias dado a tu Servidor. —Fruncio el ceno—. Dice que se llama Milton. Curioso nombre para un Servidor.

—No tanto. —Drake sintio una punzada de intranquilidad ante ese comentario, que descarto—. Milton es el nombre que le di.

—En cualquier caso, ordene tu reanimacion.

—Y yo me alegro de que lo hicieras. —Drake intento abrazarla, pero Ana se aparto.

—No. Deberia haber sabido que ocurriria esto. Deja que intente explicartelo. —Se irguio y floto lejos de sus brazos—. Crees que me conoces bien, y mas que bien. Pero en realidad no me conoces en absoluto; y yo tampoco te conozco a ti. Aunque he contemplado tu imagen y escuchado tu voz un millar de veces, eres un desconocido para mi. La primera vez que cobre consciencia tu ya estabas en las criomatrices. Al hacerme mayor aprendi cuanto pude sobre ti y tu vida. Lo que hiciste… lo que intentabas hacer… me parecia la cosa mas noble y valiente de todo el universo. No tengo palabras para expresar cuanto anhelaba verte, hablar contigo, agradecerte que me dieras la vida. Pero a pesar de ese anhelo, durante todos estos anos he respetado lo que querias. Y sabia que no me querias a mi.

—Nunca he querido a nadie mas que a ti.

—No. Quieres a Ana… tu Ana. Yo soy Ana, si, pero soy una persona distinta. Tengo mis propios recuerdos, mis propias alegrias y pesares, mis propios temores. Tu no los compartes. —Suspiro—. En cualquier caso, hace unos meses decidi hacer algo que llevaban mucho tiempo pidiendome que hiciera: ir con mis amigos de viaje. Volaremos a la colonia humana de Rigel Calorans. Espero pasar muchos miles de anos terrestres lejos de aqui. Cuando tome la decision de abandonar el sistema solar durante tanto tiempo, me pregunte: ?A mi regreso, quien sabe donde podria estar Drake Merlin? No podia soportar la idea de no verte, de no conocerte nunca jamas. De modo que solicite tu resurreccion. —Miro a Drake con esos ojos gris claro que el conocia desde siempre—. No pense en lo que ocurriria despues de eso. No me plantee el dolor que podria causarte. Ahora comprendo que lo que hice fue un gesto egoista e imperdonable.

—Te equivocas. Ya te he perdonado.

—Quiza tu si, pero es imperdonable de todos modos. Pensaba abandonar Pluton despues de hablar contigo, y dirigirme al borde de la Nube de Oort donde se reuniran los miembros de la expedicion a Rigel Calorans. Ya no puedo hacerlo, al menos no en este momento. Debo respetar tus sentimientos. ?Como puedo compensarte por haberte despertado contra tu voluntad?

—Quedate conmigo. —Drake no lo dijo, pero su mente anadio las palabras para siempre.

—Te lo debo, eso es cierto. —Ana sonrio, con esa caida triste y familiar de una comisura del labio—. Y ahora, como la despreciable egoista que soy, intentare justificarme por haberte resucitado. Hay un nivel de conmocion temporal tras toda hibernacion, aunque esta no haya durado mas de unos pocos cientos de anos. La he experimentado muchas veces; una reaccion a los cambios del mundo, en areas donde no se imaginaba ni anticipaba cambio alguno. En tu caso han sido casi treinta milenios, y no estabas tan preparado para ello como nosotros. Asi que me ocupare de amortiguar el golpe de esos veintinueve mil anos perdidos. —Le tendio la mano y su roce le hizo estremecer—. Vamos, Drake Merlin. Tu paciente Servidor aguarda afuera. Esta sumamente contrariado por que una mera humana irracional haya anulado tus explicitas instrucciones. Acompaname, y acepta mis mas sinceras disculpas.

12

«Nunca fueron estos los ojos de tu verdadero amor, ?por que finges que los adoras?»

Al principio, la conmocion temporal que le habia advertido Ana le parecio una enorme exageracion. La evidencia de presencia humana en Pluton se limitaba principalmente a las criomatrices. Drake pudo apreciar pocos cambios en las matrices o el planeta desde su desenfrenada huida de alli, hacia veintinueve mil anos.

—Cierto. —Ana hacia gala de toda su antigua calma y sentido comun—. Por otra parte, estamos en Pluton. No se puede hacer gran cosa sin aumentar la temperatura y perturbar las criomatrices, lo que nadie quiere. Casi todo el mundo tiene algun antepasado almacenado aqui, aunque no sepan muy bien quienes son.

—?Cuantos han sido resucitados?

Ana hizo una mueca.

—Sabia que me lo preguntarias. Las criomatrices guardan todavia cerca de quince mil personas. Menos de quinientas de ellas han sido revividas. Solo tu has sido resucitado en los ultimos veinticinco mil anos. Tu y Melissa Bierly sois las unicas personas que habeis entrado dos veces en las criomatrices, y por dos veces habeis sido resucitadas.

—Melissa. ?Que ha sido de Melissa? —Drake vio de nuevo aquellos ojos de zafiro, encendidos de locura.

—Fue resucitada.

—?Estaba loca?

—Antes, si. Pero ya esta curada.

—?Esta viva?

—Vivita y coleando. Sigue siendo sobrehumanamente astuta, saludable e inteligente, solo que ahora es feliz y ya no piensa en suicidarse.

—?Conoces a Melissa?

—Claro. —Ana sonrio a Drake, con una expresion que el interpreto como totalmente adorable—. Tu tienes tus obsesiones, Drake, debes comprender las mias. Si busque a Melissa al principio fue solo porque ella te conocia. Hemos hablado de ti, muchas veces. Forma parte de la expedicion a Rigel Calorans. Aparte de eso…

Drake la interrumpio:

—Pero pensaba que la resurreccion se habia convertido en algo trivial, para cualquiera que estuviera debidamente congelado. ?Por que han revivido a tan pocos?

—La resurreccion es trivial. El problema no es tecnologico; es emocional y etico. Si yo revivo un criocadaver, ?que responsabilidad tengo con esa persona? ?Cuales son mis compromisos emocionales? Aunque todo el mundo reconoce que sus ancestros estan aqui, se trata de ancestros remotos. Piensa en tu epoca. Si pudieras, ?habrias resucitado a Hammurabi, o a Cesar Augusto…, aunque fueras uno de sus descendientes lejanos? Se habrian sentido perdidos en tu mundo de telefonos, automoviles y ordenadores. Sin embargo eran personas excepcionales, no como la mayoria de criocadaveres. ?Sabes cual es el criterio fundamental que determinaba quien era preservado en las criomatrices?

Drake asintio con gesto serio.

—Puedo imaginarmelo, por lo que me dijeron los de Segunda Oportunidad. El dinero.

—Exacto. Hacia falta dinero para que te congelaran, y mucho mas para mantener ese estado a traves de los siglos. Eres una anomalia, Drake. Lei todo lo que pude encontrar acerca de ti y se que el dinero no te interesaba. Amasaste mucho, pero solo para poder ser congelado. Lo que hiciste fue muy astuto. Aprendiste cosas que la gente del futuro querria saber. Lo que tenias en la cabeza era un autentico tesoro. Pero la riqueza como tu

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