Este, me da un 3.
Ella empezo a reir. Cuanto me gustaba su risa, pense.
La risa es importante porque no se puede fingir. Para comprender si uno es autentico o es falso el unico sistema seguro es mirar -y escuchar- su risa. Las personas que de verdad merecen la pena son las que saben reir.
Me sacudio tocandome el brazo.
– Dime tus tres peliculas preferidas.
–
– Eres el primero que contestas asi… rapidamente. Sin pensar.
– Esta de las peliculas preferidas es una pregunta que yo hago siempre. Se puede decir, pues, que estaba preparado. ?Las tuyas?
– La primera es
– «He visto cosas que vosotros, humanos, no podriais imaginar. Naves de guerra en llamas ante los baluartes inexpugnables de Orion. Y he visto los rayos beta relampaguear en el vacio cerca de las puertas de
– Bravo. La pronuncia exactamente asi. Es-tiempo-de-morir. Separando las palabras. Y despues deja volar a la paloma.
Asenti y ella continuo hablando.
– Te digo otras peliculas.
– ?Por que hoy son estas?
– No lo se. Va, ?seguimos jugando?
– De acuerdo. Juguemos este otro juego. Llega un extraterrestre a nuestro planeta y tu debes ofrecerle un ejemplo de lo mejor que hay en la tierra, para convencerle de quedarse. Tienes que darle un objeto, un libro, una cancion, una frase y, bueno, habia tambien una pelicula pero ya la hemos dicho.
– Me gusta. La frase ya la conozco. Es de Malraux: «La patria de una persona que puede escoger es alla donde llegan las nubes mas vastas».
Permanecimos un instante en silencio. Cuando ella estaba a punto de seguir la interrumpi.
– Tienes que hacerme un favor. ?Quieres?
– Si. ?Que favor?
– Si te enamoras perdidamente de mi, querria que lo dijeras enseguida. No te fies de mi intuicion. Por favor. ?De acuerdo?
– De acuerdo. ?Vale tambien para mi?
– Si. Ahora dime las demas cosas para el marciano.
– El libro es
– ?El objeto?
– La bicicleta. Ahora dime los tuyos.
– La frase en realidad es un intercambio de sentencias. De
– El libro.
– Posiblemente no lo conozcas.
– Lo he leido. Es aquel del chico frances que va a estudiar a una universidad en Estados Unidos, en la decada de 1950.
– No lo conoce nadie, ese libro. Tu eres la primera. Que extrano.
Sus ojos relampaguearon un instante en la oscuridad del coche, como hojas de cuchillos.
Estabamos aparcados en el arrecife, casi al borde del mar de Polignano. Fuera era febrero y hacia mucho frio.
Dentro del coche no. Dentro del coche, aquella noche, parecia estar al resguardo de todo.
– Estoy contenta de haber salido contigo, esta noche. Queria llamarte para decirte que no tenia ganas. Despues pense que ya debias de haber salido de casa y que de todas formas me comportaba como una maleducada. Entonces me dije: vamos al cine y luego le pido que me acompane a casa y voy pronto a la cama.
– ?Por que ya no querias salir?
– Ahora no tengo ganas de hablar. Solo queria decirte que estoy contenta de haber salido. Y estoy contenta de no haberte pedido que me acompanaras a casa al salir del cine. Ahora juguemos. Me gusta. Dime la cancion y el objeto.
– El objeto es la pluma estilografica. La cancion es
– ?Puedo decir una cosa sobre el libro?
– ?Si?
– No estoy ya segura de
– ?Quieres cambiar?
– Quiza si.
– «Los campos de trigo no me recuerdan nada. Y esto es triste. Pero tu tienes los cabellos color de oro. Entonces sera maravilloso cuando me hayas amaestrado. El trigo, que es dorado, me hara pensar en ti. Y amare el ruido del viento en el trigo.»
Ella me miro. En sus ojos habia estupor infantil. Era muy hermosa.
– ?Como logras sabertelo todo de memoria?
– No lo se. Siempre ha sido asi. Si una cosa me gusta, con leerla u oirla una sola vez ya tengo bastante y me acuerdo.
– En tu opinion, ?cual es la cualidad mas importante en una persona?
– El sentido del humor. Si tienes sentido del humor -no la ironia, o el sarcasmo, que son otra cosa-, no te tomas en serio. Y entonces no puedes ser malo, no puedes ser estupido y no puedes ser vulgar. Si lo piensas, lo comprendes casi todo. ?Conoces a personas con sentido del humor?
– Pocas. En cambio he encontrado a muchas -hombres especialmente- que se tomaban muy en serio.
Tuvo un momento de duda, pero luego prosiguio.
– Mi novio es uno de esos.
– ?Que hace tu novio?
– Es ingeniero.
– ?Una persona seria?
– No. El es capaz de hacerte reir, es simpatico. Quiero decir: es inteligente, suelta frases divertidas, y cosas por el estilo. Pero solo es capaz de bromear sobre los demas. Sobre si mismo es tremendamente serio. No, no tiene sentido del humor.
Se detuvo y a continuacion prosiguio.
– Me gustaria que tu tuvieras sentido del humor.
– Tambien a mi me gustaria poder tenerlo. Para decir la verdad, teniendo en cuenta lo que has dicho, para tenerlo venderia a mi madre y a mi padre a los canibales. Siempre sin tomarme en serio, por supuesto.
Ella rio de nuevo y luego seguimos hablando asi, en el coche, que nos protegia del viento y del exterior. Durante horas.
Ya habian pasado las cuatro de la madrugada cuando nos dimos cuenta de que teniamos que regresar.