vaya a Los Angeles a por ti. Mientras tanto, tienes al FBI y al departamento de policia vigilando y listo para saltar y atrapar al monstruo en el ultimo momento. ?Es eso, Jack?
– Si eso es lo que piensas…
– No ira de esa manera. Soy un hombre paciente, Jack. El tiempo pasara, tal vez incluso pasaran anos, pero te prometo que nos veremos de nuevo cara a cara. Sin disfraz. Entonces te devolvere tu pistola.
Broto otra vez esa risa grave y me dio la impresion de que de donde quiera que estuviera llamando, estaba tratando de hablar en voz baja y de no reir muy fuerte para no llamar la atencion. Yo no sabia si se trataba de una oficina o un espacio publico, pero se estaba conteniendo. No me cabia duda.
– Hablando de la pistola, ?como iba a explicarse eso? Fui a Las Vegas en avion, como sabes, pero de alguna manera llevaba mi arma para suicidarme con ella. Parece un fallo en el plan, ?no?
Esta vez se echo a reir abiertamente.
– Jack, aun no conoces todos los hechos, ?verdad? Cuando lo sepas todo, entenderas que el plan era impecable. Mi unico error fue la chica de la habitacion. Eso no lo vi venir.
Yo tampoco, pero no iba a decirselo.
– Entonces supongo que no era tan perfecto, ?no?
– Puedo arreglarlo.
– Mira, tengo mucho trabajo por aqui hoy. ?Por que me llamas?
– Te lo he dicho, para ver como estas. Para presentarme. Ahora estaremos relacionados para siempre, ?no?
– Bueno, ya que te tengo en la linea, ?puedo hacerte algunas preguntas para el articulo que estamos preparando?
– No lo creo, Jack. Esto es entre tu y yo, no con los lectores.
– Esta vez tienes razon. La verdad es que no te dare el espacio. ?Crees que voy a dejar que intentes explicar tu mundo enfermo y repugnante en mi periodico?
Se hizo un silencio sombrio.
– Deberias respetarme -dijo por fin con voz tensa de ira.
Esta vez me rei yo.
– ?Respetarte? Cabron, has matado a una chica que solo tenia…
El me interrumpio haciendo un ruido como una tos ahogada.
– ?Has oido eso, Jack? ?Sabes lo que era?
No respondi y el repitio el sonido. Sordo, una silaba, rapido. Luego lo hizo una tercera vez.
– Esta bien, me rindo -dije.
– Era ella diciendo tu nombre a traves del plastico cuando ya no quedaba aire.
Se echo a reir. Yo no dije nada.
– ?Sabes lo que les digo, Jack? Les digo: «Respira hondo y todo terminara mucho mas deprisa».
Se rio de nuevo, una risa larga y enervante, y se aseguro de que la oia bien antes de colgar bruscamente. Me quede alli un buen rato, con el telefono pegado a la oreja.
– Chist.
Levante la cabeza. Era Larry Bernard mirando por encima de la mampara de mi cubiculo. Creyo que todavia estaba hablando.
– ?Te falta mucho? -susurro.
Me aparte el telefono de la oreja y tape el auricular con la mano.
– Unos minutos mas. Enseguida vuelvo a entrar.
– Muy bien. Voy a echar un meo.
En cuanto Larry se fue, llame a Rachel. Contesto despues de cuatro tonos.
– Jack, no puedo hablar -dijo a modo de saludo.
– Habrias ganado la apuesta.
– ?Que apuesta?
– Me acaba de llamar. El Sudes. Tiene el movil de Angela.
– ?Que ha dicho?
– No mucho. Creo que estaba tratando de averiguar quien eres.
– ?Que quieres decir? ?Como iba a saber de mi?
– No lo sabe. Estaba tratando de averiguar quien es la mujer que estaba en la habitacion de Ely. Lo estropeaste todo al estar ahi y tiene curiosidad.
– Mira, Jack, haya dicho lo que haya dicho, no puedes citarlo en el periodico. Este tipo de cosas aviva el fuego. Si se engancha con los titulares, va a acelerar su ciclo. Podria empezar a matar por los titulares.
– No te preocupes. Aqui nadie sabe que me ha llamado y yo no voy a escribir el articulo, asi que el no saldra. Lo guardare para cuando escriba mi historia. Lo guardare para el libro.
Era la primera vez que mencionaba la posibilidad de escribir un libro sobre el caso, pero me parecio completamente plausible. De una forma u otra, iba a escribir esa historia.
– ?Lo has grabado? -pregunto Rachel.
– No, porque no lo esperaba.
– Tenemos que conseguir tu telefono. Podremos rastrear la llamada a la torre de origen. Eso nos llevara cerca de donde el esta, o por lo menos cerca de donde estaba cuando hizo la llamada.
– Sonaba como si estuviera en algun lugar donde tenia que hablar en voz baja para no llamar la atencion, en una oficina o algo asi. Tambien dio un traspie.
– ?Cual?
– Trate de provocarlo para ponerlo furioso y…
– Jack, ?estas loco? ?Que haces?
– No queria que me intimidara. Asi que fui a por el, pero penso que yo estaba trabajando con un guion que me habiais dado. Creyo que le estaba provocando a proposito para que viniera a por mi. Fue entonces cuando patino: dijo que lo pinchaba para que fuera a Los Angeles. Asi lo dijo: ir a Los Angeles. Asi que esta en algun lugar fuera de aqui.
– Eso esta bien, Jack. Pero podria haberte enganado, decirte eso intencionadamente porque en realidad esta en Los Angeles. Por eso me gustaria tener esto grabado, asi podriamos mandarlo a analizar.
Yo no habia pensado en el engano inverso.
– Bueno, lo siento, no hay ninguna cinta. Pero hay algo mas.
– ?Que es?
Rachel hablaba de un modo muy escueto, al grano; me pregunte si la conversacion estaba siendo escuchada.
– O todavia esta dentro del sistema informatico o ha dejado algun tipo de programa espia en el.
– ?En el
– Conocia el plan de publicacion de manana. Sabia que yo no iba a escribir ninguno de los articulos.
– Eso suena bien, tal vez lo podamos rastrear -dijo con entusiasmo.
– Si, bueno, suerte con conseguir la cooperacion del
– Aun asi vale la pena intentarlo. Voy a mandar a alguien de nuestra oficina de prensa a contactar con el
Asenti con la cabeza.
– Nunca se sabe. Podria marcar el comienzo de una nueva era de cooperacion entre los medios y las fuerzas de seguridad. Algo asi como tu y yo, Rachel, pero mas grande.
Sonrei y tuve la esperanza de que tambien ella estuviera sonriendo.
– Eres un optimista, Jack. Hablando de cooperacion, ?puedo enviar a alguien a por tu movil ahora?
– Si, ?que te parece si te mandas a ti misma?
– No puedo. Estoy ocupada aqui. Te lo he dicho.
No sabia como interpretarlo.
– ?Tienes problemas, Rachel?
– Todavia no lo se, pero he de colgar.
– Pero ?estas en el operativo? ?Van a dejarte trabajar en el caso?