—?Y ella no te dijo que el otro hombre era Johnny?
—No, no me lo dijo, pero lo temi. Sabia que el andaba detras de ti y eso me hizo decidir que averiguaria quien era ese hombre. Le dije: '?No temes que alguien los vea encontrarse, y que Saul o tu padre se enteren?' Me contesto que no, que ellos siempre se encontraban en el prado junto a las Virgenes y la vieja mina, y que ese lugar era muy seguro, pues a la gente no le gustaba ir alli despues de oscurecer. Te lo digo, yo estaba preocupada. Queria saber si era Johnny, tenia que saberlo por ti.
—Y era el, abuelita, por supuesto. Siempre supe que ella le gustaba.
—Todo ese dia estuve inquieta, y me decia: 'Kerensa desentranara su destino, igual que tu.' Y pensaba en como yo habia ido en busca de Sir Justin, enganando a mi Pedro, y como ahora me decia que todo habia sido para mejor. Y pensando en Pedro me arregle el cabello con la peineta y la mantilla, y me quede sentada preguntandome que haria cuando averiguase que Johnny era el padre del hijo de Hetty. Primero debia estar segura, de modo que esa noche fui al parque y alli aguarde. Me oculte tras la Virgen mas grande y los vi encontrarse. Habia cuarto de luna y las estrellas brillaban, me basto para ver. Hetty lloraba y el le imploraba. No pude oir lo que se decia, pues ellos no se acercaron a las piedras lo suficiente. Creo que ella les tenia miedo. Tal vez pensaba que, igual que una de esas virgenes, seria convertida en piedra. Estaban cerca del pozo de la mina; creo que ella amenazaba con arrojarse alli si el no se casaba con ella. Se que ella no iba a hacerlo, solamente amenazaba. Pero el estaba asustado. Colegi que procuraba convencerla de que se fuera de Saint Larston. Me aparte de las piedras para tratar de oir lo que decian, y la oi decir: 'Me matare, Johnny. Me arrojare alli abajo.' Y el le contesto: 'No seas tonta. No harias tal cosa. No me enganaras. Vete con tu padre y diselo. El te hara casar a tiempo.' Entonces ella se enfurecio de veras; se detuvo un momento en suspenso alli en el borde. Tuve ganas de gritarle a el: 'Dejala tranquila. ?Ella no lo hara!' Pero no la dejo tranquila. La tomo por el brazo… de pronto la oi gritar y luego… el quedo alli solo.
—? El la mato, abuelita!
—No podria decirlo con certeza. No pude ver con la claridad suficiente… y aunque asi hubiese sido, no podria estar segura. Un segundo ella estuvo alli, suspensa en el borde, amenazando con arrojarse; al siguiente ya no estaba.
Los acontecimientos ocupaban ordenadamente su sitio; lo extrano de la conducta de Johnny, su deseo de marcharse, su temor de que la mina fuese reabierta. Entonces mire con fijeza a abuelita, recordando que el debia de haber vuelto directamente a pedirme que me casara con el. Abuelita continuo con lentitud:
—Durante un segundo o dos el permanecio inmovil, como una de las doncellas que fueron convertidas en piedra. Despues miro desesperado a su alrededor y me vio alli de pie, a la luz de ese cuarto de luna, con el cabello oscuro peinado en alto, mi mantilla, mi peineta. Y dijo: 'Kerensa'. Con voz queda… casi un susurro, pero me llego en el silencio de la noche. Luego volvio a mirar la mina y abajo, la oscuridad; y yo eche a correr, eche a correr lo mas velozmente que podia, cruzando el circulo de piedras y el prado. Habia llegado al camino cuando le oi llamar de nuevo. 'Kerensa. ?Kerensa, ven aqui!'
—Abuelita —dije—, el creyo que era yo quien estaba alli de pie. Creyo que fui yo quien vio lo sucedido.
Ella asintio con un movimiento de cabeza.
—Regrese a mi cabana y me pase la noche sentada, pensando que debia hacer. Y luego, por la manana, Mellyora me trajo tu carta. Habias huido a Plymouth para casarte con Johnny Saint Larston.
—Entiendo —dije con lentitud— Me propuso matrimonio como soborno, para que no dijera nada. Y yo crei que era porque no podia vivir sin mi. ?Que clase de matrimonio fue?
—Por su parte, para proteccion, para evitar que se le acusara de asesinato; por la tuya, una mansion de la que siempre ansiaste ser el ama. Tuviste un gran sueno, Kerensa, y por el pagaste caro.
Al saber esto me senti aturdida. Mi vida parecia tener otro sentido. El azar la habia moldeado tanto como mis propios tejemanejes, y Hetty Pengaster, a quien yo siempre habia menospreciado, habia cumplido un papel tan importante como yo. Y Johnny no me habia deseado con tanta desesperacion a mi: solo mi silencio.
—Jamas me dijiste nada, abuelita —dije, casi en tono de reproche.
—Despues de que te casaste, no… ?De que habria servido? Y cuando anunciaste que tendrias un hijo, supe que habia hecho bien al guardar silencio.
—Fue horrible —me estremeci—. Johnny creyo que yo exigia el matrimonio a cambio de mi silencio… De haberlo sabido, nunca me habria casado con el.
—?Ni siquiera por el nombre de Saint Larston, preciosa?
Nos miramos y respondi sinceramente, como siempre lo hacia con abuelita.
—En esa epoca yo habria hecho cualquier cosa por el nombre de Saint Larston.
—Fue una leccion que debias aprender, nieta mia. Tal vez ya la hayas aprendido. Tal vez sepas que se puede hallar tanta felicidad dentro de cuatro paredes de barro como en una mansion. Si lo aprendiste, no importa mucho lo que hayas tenido que pagar por la leccion. Y ahora puedes empezar de nuevo.
—?Sera posible?
Ella asintio con un movimiento de cabeza.
—Si, escucha… Johnny no queria abrir la mina, y Saul Cundy estaba decidido a que lo hiciera. Saul queria averiguar si habia estano en la mina. Iba a bajar para averiguarlo, y asi lo hizo. Pero encontro tambien a Hetty. Habra sabido por que estaba ella alli abajo, y habra sabido tambien que Johnny era el culpable, pues habria oido murmuraciones. Y Johnny que se marcho y se caso contigo el dia en que ella desaparecio… bueno, es algo que habla por si mismo.
Contuve el aliento.
—?Crees que Saul asesino a Johnny debido a lo que encontro en la mina?
—Eso no puedo saberlo, pues no lo vi. Pero Saul no dijo nada de haber encontrado a Hetty, y yo se que ella estaba alli abajo. ?Por que Saul no dijo que la habia encontrado alli? Porque era un hombre que nacio odiando a la gente acomodada y estaba resuelto a que Johnny pagara su culpa. Johnny podia negar a los trabajadores el derecho a ganarse la vida; Johnny podia despojar a un hombre de su novia. Saul no confiaba en la ley, pues con suma frecuencia decia que habia una para los ricos y otra para los pobres.
Entonces tomo la ley en su propia mano. Colijo que acecho a Johnny cuando volvia de jugar y lo mato; y ?donde es mas probable que lo haya ocultado sino en el pozo de la mina? ?Para hacer compania a Hetty! Luego se fue… se marcho a Saint Agnes… lejos de Saint Larston.
—Es una terrible historia, abuelita.
—Fue una amarga leccion, pero siempre tuviste que aprender tu misma las lecciones. De nada servia que yo tratase de ensenarte. Encuentra a tu hombre, Kerensa; amalo como yo ame a mi Pedro, dale hijos… y no te importe si vives en una mansion o en una cabana con paredes de arcilla y paja. La felicidad no pregunta quien eres antes de sentarse a tu mesa. Viene y se sienta con quienes saben darle la bienvenida y tenerla como huesped gustoso. Esto ha terminado, carino mio, y ahora me voy contenta. Todo se presenta bien para ti. He visto en tus ojos amor por un hombre, Kerensa. He visto amor por mi, amor por Joe, amor por Carlyon, y ahora por un hombre. Es mucho amor para darlo una persona, preciosa. Pero Joe tiene su propia vida por construir, y lo mismo la tendra Carlyon algun dia; y yo no puedo estar contigo eternamente. Por eso me alegro de que haya un hombre a quien ames, y ahora me ire contenta…
—No hables de irte, abuelita. No debes morir. ?Crees acaso que alguna vez podre prescindir de ti?
—Es bueno oirlo, mi dulce nietita, pero si creyera que es cierto me entristeceria. Prescindiras de mi, porque el hombre a quien amas estara a tu lado y creceras en amor y sabiduria. Paz y amor… eso significa nuestro nombre, muchacha; tambien es el significado de la buena vida. Has madurado, hija mia. No buscas lo que no te conviene. Ama y se feliz… es tiempo de que llegues a eso. La mujer que hoy eres no es la misma que eras ayer. Conviene que lo recuerdes. Nunca llores el pasado. Nunca digas que fue una tragedia. Di que fue experiencia. Gracias a eso soy lo que soy ahora… y tanto mejor, porque pase a traves del fuego.
—Haz abrir la mina, nina. Alli lo encontraras. De eso estoy segura. A el y a Hetty. Se reavivara el viejo escandalo, pero eso es mejor que estar atada toda tu vida a un hombre desaparecido.
—Lo hare abuelita —respondi. Pero en ese momento se me ocurrio algo que me hizo contener el aliento de horror. Abuelita me miraba esperando; exclame:
—No puedo hacerlo. Esta Carlyon…
—?Que pasa con Carlyon?
—?No te das cuenta? Dirian que es el hijo de un asesino.
Abuelita guardo silencio un rato. Despues dijo: