Tommy Kafesjian, Richie (?un viejo amigo de Tommy?). Tilly Hopewell, consorte; Tommy y el difunto Wardell Knox. Mi comodin: Johnny Duhamel, policia ex boxeador.
Nombres mencionados a:
Chicas de bar, drogadictos, vagos, amigos de la botella, camareros. Sus respuestas: Richie, caras inexpresivas. Mirones blancos, nada. Wardel Knox, «esta muerto y no se quien lo hizo». Johnny, «el Escolar», solo conocido por el boxeo.
El retrato robot del miron: cero identificaciones.
Anochecer: mas clubes abiertos. Mas nombres; nulos resultados. Eche un vistazo al trafico de maquinas tragaperras por puro reflejo. En el Rick Rack, un grupo de recaudadores -blancos/hispanos-; al otro lado de la calle, federales con la camara preparada. Los hombres de las maquinas de Mickey recogidos en pelicula. Mickey, suicida.
Un monton de Plymouth policiales: federales, del LAPD. Accesos intermitentes de desasosiego: ?me habria seguido alguien ANOCHE? Me detuve junto a una cabina. Estaba sin monedas; use fichas falsas. Glenda -en mi casa, en la suya-, sin respuesta. Jack Woods, sin respuesta.
Me acerque por el Bido Lito's. Deje caer nombres; deje caer mierda: no consegui mas que risas burlonas.
Dos copas, minimo. Ocupe un taburete y pedi dos whiskys. Ojos de vudu: negros de pared a pared.
Apure la bebida enseguida: dos copas, no mas. Calentado por el licor, una idea: esperar a Tommy K. y llevarlo fuera a empujones. ?Te follas a tu hermana/se la folla tu padre? Zurrarle con el puno americano en los nudillos hasta que escupiera la mierda de la familia.
El encargado de la barra dijo que tenia la tercera copa preparada; le dije que no. Un combo preparandose; hice una sena al saxo para que se acercara. Llegamos a un acuerdo: veinte dolares por un pupurri de Champ Dineen.
Las luces, amortiguadas. Vibrafono/bateria/saxo/trompeta. ?Ya…!
Temas: sonoros/rapidos, suaves/lentos. En voz baja, el barman me hablo del mitico Champ Dineen.
La historia:
Salio de ninguna parte. Parecia blanco, pero el rumor convirtio su sangre en mestiza. Tocaba el piano y el saxo bajo, componia jazz y grabo algunos discos. Un tio guapo, muy colgado: follaba en las cabinas para mirones y nunca se dejaba tomar fotos. Champ enamorado: de tres hermanas, ninas ricas, y su madre. Cuatro mujeres, nacieron cuatro hijos. El papa rico y cornudo se cargo a Champ a tiros.
Una copa sobre la barra. La engulli de un trago. Mi legendario miron: encajarlo en aquella historia.
Solo tal vez: las cabinas para mirones encajaban con
Sali a la carrera. Cruce la calle hasta una cabina telefonica. El numero de Jack Wood, tres llamadas…
– ?Diga?
– Soy yo.
– Dave, no preguntes. Todavia estoy buscandole.
– Esta bien, no se trata de eso.
– ?Entonces…?
– Hay dos billetes mas para ti, si quieres. ?Conoces la oficina de Correos del centro, la que esta abierta toda la noche?
– Claro.
– Apartado 5841. Fuerzalo y traeme el contenido. Espera hasta las tres, mas o menos, y no te vera nadie.
Jack solto un silbido.
– Estas metido en problemas con los federales, ?verdad? Seria inutil pedir una orden de registro, asi que…
– ?Si o no?
– Si. Me gusta verte en problemas: eres generoso. Llamame manana, ?de acuerdo?
Colgue. Me asalto un recuerdo: numeros de matricula. Los coches de los tipos exprimidos por Junior que Jack habia visto durante su vigilancia. Saque el bloc de notas y llame a Trafico.
Lento: cantar los numeros, esperar. El aire frio absorbio mi sofoco del alcohol y me aclaro la cabeza: traficantes exprimidos, posibles soplones de Junior/de Tommy.
Resultado:
Patrick Dennis Orchard, varon caucasiano, S. High Point, 1704 1/2; Leroy George Carpenter, varon negro, calle Setenta y uno W., 819, # 114; Stephen NC Wenzel, varon caucasiano, S. St. Andrews, 1811, # B.
Dos blancos; sorprendente. Pienso: Lester Lake me dio la direccion de Tilly Hopewell. Aqui esta: South Trinity, 8491, # 406.
No esta lejos; llego enseguida. Un edificio de cuatro pisos. Aparco junto al bordillo.
No hay ascensor. Subo al ultimo piso a pie. 406: llamo al timbre.
Chasquidos en la mirilla.
– ?Quien es?
– Policia.
Ruido de cadena, la puerta se abre. Tilly, una treintanera, negra clara; quiza medio blanca.
– ?Senorita Hopewell?
– Si. -Ningun acento negro.
– Solo unas preguntas.
Ella se hizo a un lado, muerta de miedo. El saloncito, misero, limpio.
– ?Es usted de Libertad Provisional?
Cerre la puerta.
– No. LAPD.
– ?Narcoticos? -Piel de gallina.
– Subdireccion Administrativa.
Ella agarro unos papeles de encima del televisor.
– Estoy limpia. Acabo de pasar el test de nalorfina hoy mismo, vea.
– No me interesa.
– ?Entonces…?
– Empecemos por Tommy Kafesjian.
Tilly retrocedio, rozo una silla y se derrumbo en ella:
– ?Que es esto, senorito policia?
– Dejate de «senoritos». Tu no eres de esa clase de negras. Tommy Kafesjian.
– Conozco a Tommy.
– Y has intimado con el.
– Si.
– Y tambien has intimado con Wardell Knox y con Lester Lake.
– Es verdad, pero no soy de esa clase de negras que consideran eso un gran pecado.
– Wardell esta muerto.
– Ya lo se.
– Tommy le mato.
– Tommy es malo, pero yo no digo que matara a Wardell. Y, si lo hizo, es un protegido del LAPD, de modo que no conseguira de mi nada que no sepa ya.
– Eres una chica lista, Tilly.
– ?Quiere decir «lista, para ser negra»?
– Ser lista es ser lista. Ahora, dame un motivo para que Tommy matara a Wardell. ?Fue por mala sangre respecto a ti?
Sentada muy modosa; una maestra de escuela drogadicta.
– Tommy y Wardell no se cegarian nunca hasta ese punto por una mujer. No digo que Tommy le matara pero, si lo hizo, seria porque Wardell se retraso en el pago de alguna partida de drogas. Lo cual no tiene ninguna importancia para ustedes, teniendo en cuenta las cestas de Navidad que envia el senor Kafesjian a la central.