coraje y determinacion».3

Jack no dudo.

– Quiero ir contigo,4 -le dijo.

Nina, que estaba presente en estas conversaciones, no puso objecion. Por una parte, confiaba en que los poderes aparentemente sobrehumanos de Fawcett protegerian a su hijo y, por otra, creia que Jack, heredero natural de su padre, poseeria capacidades similares. No obstante, parece ser que sus motivaciones eran mas profundas: dudar de su esposo tras tantos anos de sacrificio equivalia a dudar del sentido de su propia vida. De hecho, necesitaba Z tanto como el. Y aunque Jack no tuviera experiencia como explorador y ello suponia un peligro extraordinario, nunca considero, como tiempo despues comento a un periodista, la posibilidad de «retener» con ella a su hijo.

Obviamente, Raleigh tambien tendria que ir. Jack dijo que no podia llevar a cabo la experiencia mas importante de su vida sin el.

La madre de Raleigh, Elsie, se mostro reticente a permitir que su hijo pequeno -su «chico», como le llamaba -participara en una empresa tan peligrosa. Pero Raleigh insistio. Sus aspiraciones en el cine habian fracasado, y se estaba dejando la piel en la industria maderera. Tal como dijo a su hermano mayor, Roger, se sentia «insatisfecho e inestable».5 Aquella era una oportunidad no solo de ganar un «monton de pasta», sino tambien de hacer algo bueno con su vida.

Fawcett informo a la RGS y a los demas que contaba con dos acompanantes idoneos («ambos fuertes como caballos y entusiastas»),6 e intento una vez mas conseguir financiacion. «Solo puedo decir que se me ha otorgado la medalla del Fundador […] y que, por tanto, merezco confianza»,7 sostuvo. Aun asi, el fracaso de su expedicion anterior -aunque fuera la primera y unica de una brillante trayectoria- habia proporcionado mas municion a sus detractores. Ademas, sin patrocinadores, y tras haber agotado en su ultimo viaje los pocos ahorros que tenia, ya no pudo seguir costeandose la vida en California y se vio obligado a desarraigar una vez mas a su familia para regresar a Stoke Canon, Inglaterra, donde alquilo una casa vieja y destartalada, sin agua corriente ni electricidad. «Hay que bombear el agua y serrar en pedazos troncos inmensos, lo que supone mucho mas trabajo»,8 escribio Nina a Large. El esfuerzo era extenuante. «Al final me derrumbe hace cinco semanas y enferme seriamente», dijo Nina. Una parte de ella deseaba huir de todos aquellos sacrificios y responsabilidades, pero, como ella misma comento, «la familia me necesitaba».

«La situacion es dificil -admitio Fawcett a Large-. Uno aprende poco de la vida comoda, pero no me gusta arrastrar a otros a las dificultades que me han perseguido con tanta persistencia […]. No es que desee lujos. Me importan poco esas cosas, pero detesto la inactividad.»9

No podia permitirse enviar a Jack a la universidad, y Brian y Joan dejaron la escuela para ayudar en las tareas domesticas y trabajar ocasionalmente para ganar dinero. Se desprendieron de fotografias y cuadros mientras Fawcett vendia las pertenencias y las reliquias de la familia. «Hace unos dias mi hombre llego a sugerir que seria conveniente vender esas sillas espanolas antiguas si […] alcanzaban un buen precio»,10 escribio Nina a Large. En 1923, Fawcett disponia de tan poco dinero que ya no podia pagar la cuota de socio de la RGB de tres libras anuales. «Le agradeceria que me concediera el beneficio de su consejo sobre si podria renunciar […] sin provocar algun tipo de escandalo tratandose de un miembro galardonado con la medalla del Fundador - escribio Fawcett a Keltie-. El hecho es que la inercia forzada y […] el traslado de la familia a California me han dejado sin blanca. Habia confiado en sobrellevar la situacion, pero tales esperanzas parecen marchitarse, y no creo que pueda aguantar. -Y anadia-: Es como haber caido de un sueno.»11

Aunque consiguio dinero suficiente para pagar otro ano de alquiler, Nina estaba preocupada por su marido. «P. H. F. se encuentra en el abismo de la desesperacion»,12 confeso a Large.

«La impaciencia de mi padre por partir en su ultimo viaje cada vez le consumia mas -recordo Brian tiempo despues-. De caracter habitualmente reservado, se convirtio en un ser hosco.»13

Fawcett empezo a arremeter contra la elite cientifica; consideraba que le habia dado la espalda. Dijo a un amigo: «Las ciencias arqueologica y etnologica se fundamentan en las arenas de la especulacion, y sabemos lo que puede ocurrirles a las casas asi construidas».14 Denunciaba a sus enemigos de la RGS y, por todas partes, sospechaba de «traicion». Se quejaba del «dinero desperdiciado en esas inutiles expediciones a la Antartida»,15 de los «hombres de ciencia», que habian «desdenado en su dia la existencia de las Americas, y, despues, las ideas sobre Herculano, Pompeya y Troya».16 Afirmaba que «todo el escepticismo propio de la cristiandad no me hara cambiar ni un apice de opinion»17 en la creencia en Z, y que lo «conseguire de un modo u otro aunque tenga que esperar otra decada».18

Empezo a rodearse de espiritualistas que no solo confirmaban su vision de Z sino que la embellecian aun mas. Un vidente le dijo: «El valle y la ciudad estan repletos de joyas, joyas espirituales, pero tambien de una inmensa abundancia de joyas autenticas».19 Fawcett publico articulos en revistas, como la Occult Review, en los que hablaba de su empresa espiritual y de «los tesoros del Mundo invisible».20

Otro explorador sudamericano y miembro de la RGS dijo que mucha gente creia que Fawcett se habia vuelto «algo desequilibrado».21 Algunos lo llamaban «maniaco cientifico».22

En la revista espiritualista Light, Fawcett publico un articulo titulado «Obsesion». Sin mencionar su propia idee fixe, describia como las «tormentas mentales»' podian consumir a una persona en una «espantosa tortura». «Sin duda, la obsesion es el diagnostico de muchos casos de locura», concluia.

Rumiando dia y noche, Fawcett se planteaba diferentes posibilidades -explotar nitrato en Brasil, prospectar petroleo en California- con el fin de conseguir dinero para la expedicion. «El Mining Syndicate [«Sindicato Minero»] ha fracasado» porque era un «nido de desvergonzados»,24 escribio Fawcett a Large en octubre de 1923.

Jack dijo a otro amigo de la familia: «Era como si algun geniecillo malvado estuviera tratando de poner todos los obstaculos posibles en nuestro camino».25

Pese a ello, Jack seguia un entrenamiento fisico en caso de que el dinero acabara llegando. Sin la alegre influencia de Raleigh, adopto el ascetismo de su padre y renuncio a ingerir carne y alcohol. «Hace poco tiempo tuve la idea de que debia someterme a una prueba extremadamente dificil que exigiera un tremendo esfuerzo - escribio a Esther Windust, una amiga de la familia que era teosofa-. Con grandes esfuerzos lo he conseguido y ya he notado los beneficios. -Y anadia-: Disfruto inmensamente de la vida y de las doctrinas de Buda [que] llegaron hasta mi, produciendome una gran sorpresa por su absoluta afinidad con mis propias ideas. Uno percibe su rechazo a los credos y al dogma.»26 Una persona, durante una visita a la familia, quedo impresionada con la presencia de Jack: «Su capacidad de amar y su leve moderacion ascetica en cierto modo hacen pensar en los caballeros del Grial».27

Fawcett, mientras tanto, intentaba conservar la fe en que tarde o temprano «los dioses me aceptaran a su servicio».28 En cierto momento, su amigo Rider Haggard le dijo que tenia algo importante que darle: era un idolo de piedra, de unos veinticinco centimetros de alto, con ojos almendrados y jeroglificos tallados en el pecho. Haggard, que lo conservaba sobre su escritorio mientras escribia en 1919 el libro Cuando el mundo se estremecio, le dijo que se lo habia dado en Brasil alguien que creia que procedia de los indigenas del interior.

Fawcett se llevo el idolo y pidio a varios expertos museisticos que lo examinaran. La mayoria dictamino que era falso, pero Fawcett, en su desesperacion, se lo mostro incluso a un adivino, y concluyo que podia ser una reliquia de Z.

En la primavera de 1924, Fawcett supo que el doctor Rice, tras recurrir a su inagotable cuenta bancaria, estaba organizando una de las expediciones mas extraordinarias jamas llevadas a cabo. Habia reunido a un equipo que reflejaba la nueva necesidad de contar con especialistas en todos los ambitos: expertos en botanica, zoologia, topografia, astronomia, geografia y medicina, asi como uno de los antropologos mas prestigiosos del mundo, el doctor Theodor Koch-Grunberg, y Silvino Santos, considerado el primer cinematografo del Amazonas. Mas asombroso aun era el arsenal que constituia el equipamiento de la expedicion: el Eleanor II, junto con otra elegante embarcacion, y un nuevo sistema de radio, en esta ocasion no solo capaz de recibir senales sino tambien de transmitirlas. Sin embargo, no fue esta nueva tecnologia la que provoco el gran revuelo que se habia formado en torno a la expedicion. Segun informo el The New York Times, Rice llevaria consigo un hidroavion de ciento sesenta caballos, seis cilindros, helices de roble y capacidad para tres personas, al que se habia acoplado un sistema de camaras

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