confesase nada mas. De momento deberian interrumpir el interrogatorio para retomarlo mas tarde, y tendrian que hablar con algun familiar para pedirle que enviase a alguien que hiciera compania a la mujer. Erlendur le contesto que Katrin no estaba arrestada, que no era sospechosa de nada y que eso no era un interrogatorio formal sino solo unas cuantas preguntas para obtener informacion. Que Katrin estaba muy dispuesta a colaborar en ese momento y que por lo tanto deberian continuar.

Elinborg sacudio negativamente la cabeza.

– Hay que martillear el hierro mientras esta ardiendo -dijo Erlendur.

– ?Pero que dices! -susurro Elinborg.

Katrin aparecio en la puerta preguntando si no iban a seguir hablando. Estaba dispuesta a decirles la verdad y a no esconder nada.

– Quiero que todo esto termine de una vez -dijo.

Elinborg le pregunto si queria llamar a un abogado, pero Katrin declino la oferta.

Dijo no conocer a ninguno, que nunca habia necesitado un abogado y que no sabria como encontrar uno ahora.

Erlendur le dijo a Katrin que, si le parecia bien, continuarian ahora. Elinborg le dirigio una mirada asesina. Cuando todos se hubieron sentado, Katrin se froto las manos y empezo a hablar.

Albert se fue de viaje por la manana. Se habian levantado muy temprano. Ella preparo el cafe. Una vez mas hablaron de que deberian vender la casa y comprarse una vivienda mas pequena. Lo habian hablado muchas veces, pero hasta ahora no habian hecho nada al respecto. Quiza porque era un paso importante y quiza tambien porque eso les hacia recordar que ya se iban haciendo mayores. No se sentian viejos pero les parecia prudente mudarse a una vivienda mas pequena. Albert dijo que hablaria con una inmobiliaria cuando volviese de su viaje. Luego se marcho en su jeep.

Ella volvio a echarse en la cama. Le quedaban dos horas para ir a trabajar, pero no pudo dormir. Dio vueltas en la cama hasta que dieron las ocho y tuvo que levantarse. Estaba en la cocina cuando oyo que Einar entraba en la casa. Tenia llaves.

Enseguida noto que estaba algo trastornado, pero no sabia por que. El le dijo que no habia dormido en toda la noche. Habia estado paseando arriba y abajo por la casa sin sentarse ni un momento para tomarse un respiro.

– Sabia que algo no cuadraba -dijo el mirando con enfado a su madre- ?Siempre lo he sabido!

Ella no comprendia el motivo de su enfado.

– Sabia que habia algo en este maldito asunto que no encajaba -repuso Einar, casi gritando.

– ?De que hablas, carino? -Katrin no sabia todavia por que estaba tan alterado-. ?Que es lo que no cuadra?

– Abri el codigo -dijo Einar-. Me salte las normas y abri el codigo. Queria ver si la enfermedad es hereditaria y, efectivamente, es hereditaria, para que lo sepas. Esta presente en algunas familias, pero no en la nuestra. No esta en la familia de papa ni en la tuya. Por eso habia algo que no cuadraba. ?Entiendes? ?Entiendes lo que te digo?

El movil de Erlendur sono impaciente en el bolsillo de su abrigo. Le pidio a Katrin que lo disculpara. Se fue a la cocina y contesto. Era Sigurdur Oli.

– La vieja de Keflavik te anda buscando -le dijo sin preambulos.

– ?La vieja? ?Te refieres a Elin?

– Si, a Elin.

– ?Has hablado con ella?

– Si -contesto Sigurdur Oli-. Dijo que necesitaba hablar contigo sin demora.

– ?Sabes que quiere?

– No me lo quiso decir. ?Como os va?

– ?Le diste el numero de mi movil?

– No.

– Si vuelve a llamar, dale mi numero -dijo Erlendur, y colgo. Katrin y Elinborg le esperaban en el salon-. Disculpa -le dijo a Katrin.

Ella siguio con su relato.

Einar paseaba inquieto por el salon. Katrin intento tranquilizarle y entender por que estaba tan excitado. Se sento y le pidio que tomara asiento a su lado, pero el no la escucho. Seguia paseando sin parar, pasando una y otra vez por delante de ella. Katrin sabia que ultimamente Einar habia atravesado una temporada dificil, sobre todo a causa de su divorcio. Su mujer lo habia dejado, decia que queria empezar una nueva vida.

– Dime que es lo que te pasa -dijo ella.

– Muchas cosas, mama, muchas cosas.

Luego vino la pregunta que ella habia temido tantos anos.

– ?Quien es mi padre? -pregunto su hijo, deteniendose delante de ella-. ?Quien es mi verdadero padre?

Ella le miro fijamente.

– No mas secretos, mama -le dijo.

– ?Que has descubierto? -pregunto ella-. ?Que has estado haciendo?

– Se quien no es mi padre -contesto el. Solto una carcajada-. ?Me escuchas? ?Mi padre no es mi padre! Y si el no es mi padre, entonces ?quien soy yo? ?De donde vengo? Mis hermanos de repente son hermanastros. ?Por que nunca me has contado nada? ?Por que me has mentido todo este tiempo? ?Por que?

Katrin le miro fijamente con lagrimas en los ojos.

– ?Enganaste a papa? -pregunto el-. Me lo puedes decir. No se lo dire a nadie. ?Tuviste una aventura? Quedara entre nosotros dos, pero necesito oir la verdad. Tienes que decirmelo. ?De donde vengo?

Se quedo callado.

– ?Soy un hijo adoptivo? ?Un huerfano? ?Quien soy? ?Mama?

Katrin comenzo a llorar, sollozando hondamente. Einar se quedo mirando como lloraba y de repente se dio cuenta de lo que habia hecho. Algo mas tranquilo, se sento a su lado y la abrazo. Se quedaron asi un rato, en silencio, hasta que ella empezo a contarle lo de la fatidica noche en Husavik, cuando su padre estaba de viaje y ella salio con sus amigas. Le conto lo de esos hombres que conocieron y que uno de ellos, Holberg, habia entrado a la fuerza en su casa.

Einar la escucho sin decir palabra.

Le conto como Holberg la habia violado, como la habia amenazado y como ella tomo la decision de tener al hijo sin que nadie se enterara de lo que habia pasado. Habia decidido no decirles nada ni a el ni a su padre. Y no habia habido ningun problema. Habian vivido felices. No habia dejado que Holberg le robara la felicidad. No habia dejado que Holberg destruyera a su familia.

Le conto que ella siempre habia sabido que el era hijo del hombre que, hacia ya bastante tiempo, la habia violado. Sin embargo, eso nunca habia influido en el amor que sentia por el y al mismo tiempo le confortaba saber que Albert sentia algo especial por el. Por lo tanto, Einar nunca habia tenido que sufrir por lo que Holberg le habia hecho a ella. Nunca.

Pasaron unos minutos mientras el digeria lo que ella acababa de decirle.

– Perdona -dijo por fin-. No era mi intencion enfadarme contigo. Es que pensaba que habrias tenido un amante y que yo era el fruto de esa relacion. No se me ocurrio pensar que te habian violado.

– Claro que no se te ocurrio. ?Como ibas a pensar en eso? No se lo habia contado a nadie hasta ahora.

– Tambien tendria que haber pensado en esa posibilidad -dijo el-. Pero no lo pense. Perdoname. Seguro que has sufrido terriblemente todos estos anos.

– No debes pensar en ello -repuso ella-. Tu no tienes por que sufrir por lo que hizo Holberg.

– Ya he sufrido, mama -dijo el-. He sufrido un dolor insoportable. Y no solo yo. ?Por que no abortaste? ?Que te detuvo?

– Dios mio, no digas eso, Einar. No hables asi.

Katrin dejo de hablar.

– ?Nunca pensaste en abortar? -pregunto Elinborg.

– Todo el tiempo. Siempre. Hasta que ya fue demasiado tarde. Lo pense todos los dias desde que supe que estaba embarazada. Incluso llegue a hablar con un medico, que me hizo una revision y luego me aconsejo que no abortara. Tambien cabia la posibilidad de que Albert fuera el padre. Supongo que esa fue la razon por la cual

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