Ragnhild eructo. Yngvar se la puso al hombro. Acariciaba la pequena espaldita.

– Ahora entiendo bien poco -dijo Yngvar.

– Yo tambien -dijo Inger Johanne-. Hasta cierto punto.

Se alargo hacia los papeles que le habia dado Yngvar cuando llego a casa empapada y malhumorada. La ultima hoja todavia estaba reblandecida por la humedad.

– En el informe medico acerca del embarazo y del parto de Fiona, se dice siempre que es su primer parto. Y te aseguro que… -Lanzo los papeles sobre la mesa y se acomodo mejor-. A un medico o a una comadrona les cuesta muy poco determinar si una mujer ya ha parido antes. Pura rutina. Pero no aparece nada de eso en los papeles. Fiorella nacio con cesarea, estaba planificado asi. Por lo que entiendo del informe, sufria de algun tipo de panico al parto, algo que al parecer se tomaron en serio. Decidieron una fecha para la cesarea, sin que sea capaz de ver que hubiera mas motivos que los psicologicos.

– Pero… -Yngvar habia dejado a Ragnhild en la cuna, que estaba de nuevo en el salon. Pisaba suavemente los patines-. Esto no lo entiendo -dijo.

– No me extrana. Parece que todo el mundo piensa que Fiorella era el unico hijo de Fiona. Tambien los medicos, aunque tienen que haber sabido que no era asi.

– Pero oye -dijo Yngvar con el ceno fruncido y esceptico-. Asi que tu sabes algo que no sabe nadie.

– Yo no. El patologo.

Salio a la cocina y volvio con una tetera en una mano y el informe de la autopsia en la otra.

– ?El patologo?

– «Rotura perianal» -leyo

– ?Que significa…?

– Piensa.

– Estoy pensando. ?Que significa?

– Escucha la palabra -dijo ella con impaciencia, y se sirvio mas te y mas miel-. Me estoy constipando. Empieza por anal.

– Corta el rollo -dijo Yngvar-. ?No se pare a los ninos por el culo! ?Explicame lo que es! ?Como puedes…?

– Perineum -lo interrumpio ella- es la palabra medica para la zona entre la vagina y el ano. La rotura perianal es algo que puede ocurrir durante el parto, un desgarro de…

– Para -dijo el haciendo una mueca-. Entiendo. Pero ?por que no lo hemos visto nosotros? Si lo pone ahi tan…

Airado, se inclino sobre la mesa del salon, cogio el informe de la autopsia y empezo a hojearlo.

– Simplemente no lo habeis entendido -dijo Inger Johanne-. Se os ha pasado, y ya esta. Habeis mirado hasta la ceguera el hecho de que no hubiera agresion sexual y se os…

– Se nos ha pasado -exclamo Yngvar-. ?Se nos ha pasado eso?

– No sois los unicos. Ha salido a la luz que la policia sueca archivo el caso Knutby, un posible caso de asesinato, porque no sabian lo que significaba «una dosis toxica». ?No lees los periodicos?

– Prefiero no hacerlo -murmuro el, hojeando febrilmente sin encontrar lo que estaba buscando-. Pero estos nuevos… ?Y este informe que?

Golpeaba con el dedo indice los papeles.

– ?Por que iban a mentir los medicos? ?Es falsa la carpeta?

– No creo. He llamado a Even. Mi primo. El medico que conociste…

– Recuerdo a Even. ?Que ha dicho? -pregunto Yngvar mientras se sentaba en el sofa, justo frente a ella.

– Solo puede haber una razon para que el informe medico no contenga datos que son a la vez relevantes y faciles de comprobar para medicos y matronas -dijo Inger Johanne.

– ?Que es…?

– Que el que los datos aparecieran pudiera causar danos esenciales en el paciente. Danos esenciales, ha dicho Even. Y para eso tiene que ser algo bastante serio, por lo que he podido entender.

Se quedaron sentados en silencio. Yngvar se rascaba la nuca. Le habian vuelto las ganas de fumar un puro. Trago saliva, se quedo mirando abstraidamente por la ventana del salon. La lluvia golpeaba el cristal. Un coche se habia detenido. Jovenes, penso; el motor resonaba una y otra vez. Unos gritaban, otros reian. Sono un portazo y el coche siguio su camino y desaparecio.

Ragnhild dormia profundamente. Jack llego caminando procedente de la entrada. Se quedo quieto un momento, ladeando la cabeza con las orejas erguidas, como si no se acabara de creer el silencio que habia. El animal poso el hocico en el regazo de Yngvar. Con la pezuna le aranaba el muslo.

– En el sofa no -murmuro Yngvar-. Tumbate en el suelo. Suelo.

Dio la impresion de que el perro se encogia de hombros. Despues paso agilmente bajo la mesa y de un salto se subio al otro sofa, al lado de Inger Johanne.

– ?Puede ese tipo de dano ser producido por una violacion? -pregunto por fin Yngvar, sin comentar la indulgente educacion de la bestia de color amarillo sucio.

– Pero bueno, Yngvar.

– Pero…

– Imaginate un parto. La cabeza de un bebe. ?Por que crees tu que se raja a las mujeres?

– No… -Yngvar se metio los dedos en los oidos.

– La respuesta es no -dijo Inger Johanne-. Violacion no.

– Pero… -Yngvar trago saliva y lo volvio a intentar-. Pero ?un hombre no…? Pero ?Bernt no habria descubierto que…?

– No tiene por que -dijo Inger Johanne-. Eso dijo Even, al menos. No necesariamente. Ni durante el coito ni… en otro tipo de juegos.

El sonrio.

– Que raro.

Ella le sonrio de vuelta.

– Pero asi es -dijo no sin picardia.

Jack gruno en suenos.

– Summa summarum -dijo Yngvar volviendose a levantar, se acaricio la barbilla con el pulgar y el indice-. Asi que podemos constatar lo siguiente: Fiona Helle ha estado embarazada dos veces. El primer nino nacio bajo circunstancias que hicieron que se desgarrara malamente. Debe de hacer muchisimo tiempo, porque nada indica que Bernt Helle supiera nada de esta criatura. Ni tampoco nadie mas. Fiona ha hecho declaraciones publicas y sin pudor sobre la felicidad que conlleva parir tarde a tu primer hijo. No se hubiera atrevido a hacer algo asi si hubiera alguien ahi fuera que supiera… -Se acerco a la ventana. La corriente se podia sentir. Con el indice paso el dedo por el marco de la ventana-. El aire traspasa directamente la pared -murmuro-. Esto lo tenemos que arreglar pronto. No puede ser bueno para las ninas.

– Un poco de corriente refresca el aire de dentro, lo hace mas sano -dijo Inger Johanne agitando la mano-. Continua.

Le costaba decirlo y se puso a hurgar la obsoleta masilla de la ventana, que estaba a punto de desprenderse.

– No consigo imaginarme a Bernt mintiendo -dijo lentamente, y se volvio a girar hacia ella-. El comportamiento del tipo ha sido el adecuado durante toda la investigacion. A pesar de que seguro que esta hasta las narices de toda la lata que le damos y que no parece llevar a ningun resultado. Responde y colabora. Coge el telefono. Acude cuando se lo pedimos. Parece completamente en activo, simple y llanamente bastante despierto. Se hubiera dado cuenta de que un dato asi era importante para nosotros. ?No crees?

Inger Johanne fruncio la nariz.

– Si -dijo-. Quiza se hubiera dado cuenta. En todo caso creo que podemos asumir que este nino nacio antes de que se hicieran novios. En los sitios pequenos se sabe todo. Ademas se casaron muy pronto, y no consigo imaginarme a una pareja adaptada, aunque considerablemente joven, llevando un embarazo en secreto. En realidad, creo que la respuesta a este enigma es obvia. Tiene que haber sido un embarazo muy poco deseado y a una edad muy temprana.

– No me vengas ahora con un incesto -le advirtio el-. Un incesto es precisamente lo que no necesita este caso.

– No puede haber sido el padre de Fiona, en todo caso. Murio cuando ella tenia nueve anos. Creo que con esa

Вы читаете Crepusculo En Oslo
Добавить отзыв
ВСЕ ОТЗЫВЫ О КНИГЕ В ИЗБРАННОЕ

0

Вы можете отметить интересные вам фрагменты текста, которые будут доступны по уникальной ссылке в адресной строке браузера.

Отметить Добавить цитату