dijo:
– No he hecho algo asi desde que iba al colegio, e incluso entonces consideraba cualquier forma de violencia fisica indecorosa y poco civilizada. Era una manera aceptada de salir adelante en la vida -obtener algo de alguien a base de palizas- y yo hice la eleccion intencionada de vivir la mia de manera distinta. Se me tildo de afeminado, por supuesto -anadio, dejando entrever su familiar y encantadora sonrisa-, pero podia vivir con ello. Con lo que no podia vivir era la idea de abandonar mis principios.
»Cuando me di cuenta de que estaba metido en una ridicula pelea de patio de colegio con Connor, simplemente pare y me fui.
– ?Y el lo dejo irse?
Tommy asintio.
– Creo que para entonces ya habia perdido impetu.
– ?Aparco su coche en la grava, junto al rio?
– No. Encontre un sitio en la calle, una o dos manzanas mas arriba del rio. Alguien lo habra visto -anadio esperanzado-. Es un Jaguar clasico, rojo, inconfundible.
– ?Y luego, cuando volvio al coche?
– Regrese a Londres. Despues de haber visto a Con sabiendo que era una equivocacion, la noche se habia estropeado y sentia que habia hecho el ridiculo. Pense que lo mejor era rescatar lo que pudiera de mi plan original.
– ?Por cinco minutos? -pregunto Gemma, esceptica.
Sonrio.
– Hice lo que pude.
– ?Y no se fue al camerino de Sir Gerald para establecer una coartada?
Tommy contesto con paciencia:
– Como ya le dije, sargento, queria felicitarlo.
– ?A pesar de no haber visto la representacion?
– Pude ver por la reaccion del publico que habia ido especialmente bien.
Estudio su cara y el le devolvio la mirada sin apartar los ojos.
– Tiene razon, ?sabe? -le dijo al final-. Es usted un terrible mentiroso. ?Supongo que se fue directamente a casa desde el teatro?
– Pues si, lo hice.
– ?Hay alguien que pueda responder por usted?
– No, querida. Me temo que no. Y aparque en la parte trasera de mi edificio y subi con el montacargas, asi que no vi a nadie. Lo siento -anadio, como si le afligiera defraudarla.
– Yo tambien lo siento, Tommy. -Gemma suspiro. De repente se sintio cansada y dijo-: Usted pudo poner el cuerpo de Connor en el maletero de su coche, conducir de nuevo a Hambleden despues de la representacion y tirarlo a la esclusa.
– ?De verdad? Que idea tan extraordinariamente imaginativa. -Tommy parecia divertido.
Gemma dijo, exasperada:
– ?Se da cuenta de que tendremos que incautar su vehiculo para que el equipo de forenses lo examine? ?Y que tendremos que registrar su piso en busca de pruebas? Ahora tendra que venir conmigo a Scotland Yard y hacer una declaracion formal.
Levanto la delicada tetera de porcelana y sonrio a Gemma.
– Entonces sera mejor que termine su te, querida.
12
El almuerzo con Jack Makepeace mejoro considerablemente la actitud de Kincaid ante la vida. Se habian hinchado de queso, encurtidos y cerveza Green King y salieron a la calle guinando los ojos. Habian pasado todo el almuerzo en un pub poco iluminado cerca de la comisaria de High Wycombe.
– ?Vaya sorpresa! -dijo Makepeace volviendo la cara hacia el sol-. Dudo que dure demasiado. La prevision es que llovera a cantaros.
El perfecto antidoto para una manana pasada sin ir a ninguna parte, dando vueltas sobre si mismo, era un paseo, penso Kincaid mientras disfrutaba del leve calor del sol en su cara.
– Creo que voy a aprovechar el buen tiempo -le dijo a Makepeace cuando llegaron a la comisaria-. Ya sabe donde localizarme si surge algo.
– Los hay que tienen suerte -contesto Makepeace afablemente-. A los currantes nos toca volver al tajo. -Saludo con la mano y desaparecio tras las puertas de cristal.
Kincaid condujo el corto trayecto de High Wycombe a Fingest y al llegar al pueblo vacilo un momento antes de girar en direccion al aparcamiento del pub. Si bien la vicaria tenia un aspecto apacible y atractivo a la luz del atardecer, y el vicario era realmente una autoridad en paseos locales, penso que probablemente acabaria pasando el resto de la tarde comodamente agasajado en el estudio del vicario.
Al final Tony demostro ser igual de valioso y complaciente en el tema de los paseos que en todo lo demas.
– Tengo justo lo que busca -saco un libro de uno de los misteriosos huecos de debajo de la barra-. Paseos a pubs locales. ?Son tres millas y media demasiadas para usted? -Miro a Kincaid evaluandolo.
– Creo que puedo lograrlo -dijo Kincaid con una sonrisa.
– Fingest, Skirmett, Turville y vuelta a Fingest. Los tres pueblos estan cada uno en su propio valle, pero este paseo en concreto evita la colina mas pronunciada. Aunque puede que acabe hecho un asco.
– Gracias, Tony. Prometo no dejar pisadas en sus alfombras. Me voy a cambiar de ropa.
– Tenga mi brujula -dijo Tony cuando Kincaid ya se daba la vuelta para irse. La brujula aparecio en la palma de su mano como por arte de magia-. Le vendra bien.
Al final del primer ascenso largo, algun ciudadano considerado habia colocado un banco sobre el cual el paseante sin resuello podia sentarse y disfrutar de la vista. Kincaid aprovecho el descanso, luego siguio avanzando por bosques y campos, y por encima de cercas. Al principio, recordo la breve historia que le explico el vicario y mientras caminaba imagino la sucesion de celtas, romanos, sajones y normandos estableciendose en estas colinas, todos dejando su impronta en estas tierras.
Despues de un rato la combinacion de aire fresco, ejercicio y soledad lograron tener un efecto positivo en el. Su mente regreso por si misma a la cuestion de la muerte de Connor Swann y clasifico los hechos y las impresiones que habia recopilado hasta entonces. Las pruebas del patologo hacian que fuera bastante improbable que Tommy Godwin hubiera matado a Connor fuera del Red Lion en Wargrave. Es posible, por supuesto, que hubiera dejado a Connor inconsciente y lo hubiera matado horas mas tarde, despues de regresar de Londres. Pero al igual que Gemma, a Kincaid no se le ocurrio un escenario logico para el traslado posterior del cuerpo desde el coche a la esclusa.
El informe del doctor Winstead tambien significaba que Julia no podia haber matado a Con durante su breve ausencia de la galeria. La declaracion de David en la que situaba a Connor en Wargrave hasta las diez de la noche hacia imposible que ella lo hubiera visto en River Terrace y hubieran quedado para mas tarde. Kincaid rehuyo la sensacion de alivio que esta conclusion le trajo, y se forzo a considerar la siguiente posibilidad: que hubiera visto a Connor mucho mas tarde y que Trevor Simons hubiera mentido para protegerla.
Estaba tan absorto en sus cavilaciones que no vio la boniga hasta que hubo