y llevo la soga hasta la otra ventana que le permitiria bajar por el lado opuesto de la casa, fuera de la vista de la carretera. Abrio la ventana poco a poco mientras rogaba que no chirriara. La plegaria fue atendida.

Bajo la soga y la observo serpentear contra la pared de ladrillo.

Gloria Russell contemplo la fachada de la mansion. Alli habia dinero de verdad. Un dinero y una posicion que Christine Sullivan no se merecia. Los habia ganado exhibiendo las tetas y el culo y con su boca sucia que vaya a saber por que habian inspirado al viejo Walter Sullivan, despertando alguna emocion enterrada en lo mas profundo de su ser. Dentro de seis meses ya ni la recordaria. Su mundo de riqueza y poder seguiria adelante.

Entonces se dio cuenta.

Russell ya estaba con medio cuerpo fuera de la limusina cuando Collin le cogio del brazo. Le mostro el bolso de cuero que ella habia comprado en Georgetown por cien dolares y que ahora valia una fortuna. Se acomodo otra vez en el asiento, y respiro tranquila. Le sonrio a Collin, casi con verguenza.

El presidente, acurrucado en un estado semicatatonico, no advirtio el intercambio.

Entonces Russell espio el interior del bolso, solo para estar segura. Abrio la boca asombrada mientras rebuscaba frenetica entre las pocas cosas que contenia el bolso. A duras penas consiguio no gritar, al tiempo que miraba horrorizada al joven agente. El abrecartas habia desaparecido. Se lo habian dejado en la casa.

Collin corrio hacia las escaleras seguido por Burton, que no entendia nada.

Luther estaba en la mitad del descenso cuando les oyo venir.

Tres metros mas.

Entraron en el dormitorio.

Dos metros.

Atonitos, los dos hombres del servicio secreto vieron la soga. Burton fue a por ella.

Sesenta centimetros. Luther se solto, toco el suelo y echo a correr.

Burton corrio hacia la ventana. Collin aparto la mesa de noche; nada. Se unio a Burton en la ventana. Luther ya habia dado la vuelta a la casa. Burton se dispuso a bajar por la soga. Collin le detuvo. Bajarian antes por las escaleras.

Echaron a correr hacia la puerta.

Luther atraveso el campo de maiz a toda marcha, sin preocuparse por el rastro que dejaba, ahora solo le preocupaba salvar el pellejo. La bolsa le demoraba un poco, pero habia trabajado mucho durante los ultimos meses como para marcharse con las manos vacias.

Salio de la proteccion de las plantas y se encontro en el punto mas peligroso de la ruta de escape: noventa metros de campo abierto. Unos nubarrones muy gruesos ocultaban la luna y en el campo no habia farolas; vestido de negro resultaba casi invisible. Pero en la oscuridad el ojo humano detectaba mejor el movimiento, y el corria con todas sus fuerzas.

Los dos agentes del servicio secreto se detuvieron por un momento junto a la furgoneta. Se les unio el agente Varney y el grupo corrio a traves del campo.

Russell bajo el cristal de la ventanilla y les observo boquiabierta. Incluso el presidente se desperto por un instante, pero ella se apresuro a tranquilizarle y Richmond volvio a hundirse en el sopor.

Collin y Burton se colocaron las gafas de vision nocturna y su vision se transformo en el acto en lo que parecia un videojuego primitivo. Las imagenes termicas aparecian en rojo, todo lo demas era verde oscuro.

El agente Travis Varney, alto y delgado, que no sabia que pasaba, corria delante de ellos. Corria con los movimientos graciles del fondista que habia sido en la universidad.

Varney, que llevaba tres anos en el servicio, era soltero, solo vivia para su profesion, y habia elegido a Burton como la figura paterna que reemplazaba al padre muerto en Vietnam. Buscaban a alguien que habia hecho algo en la casa. Algo que involucraba al presidente y, en consecuencia, le involucraba a el. Varney sintio pena por lo que le sucederia al fugitivo si daba con el.

Luther oyo los ruidos de los hombres que le perseguian. Habian reaccionado mas rapido de lo que pensaba. Su ventaja se habia reducido pero seguia siendo suficiente. Habian cometido un error cuando no se montaron en la furgoneta para ir tras el. Tenian que haber sabido que disponia de un coche, que no habia llegado en helicoptero. Pero agradecio que no fueran tan listos. Si lo hubieran sido el no viviria para ver salir el sol.

Tomo un atajo a traves del bosque; lo habia descubierto durante el ultimo recorrido y le permitio ganar casi un minuto. El sonido de los jadeos sonaba como los disparos de una ametralladora. Le pesaba la ropa; como en una pesadilla infantil las piernas parecian moverse en camara lenta.

Por fin salio de los arboles, vio el coche y una vez mas se congratulo por haberlo colocado en posicion para salir.

Noventa metros mas atras, una silueta termica que no era la de Varney aparecio en las pantallas de Burton y Collin. Un hombre corriendo a gran velocidad. Sus manos volaron hacia las cartucheras. Ninguna de sus pistolas eran efectivas a esta distancia, pero no era el momento de preocuparse por el detalle.

Entonces arranco un motor y Burton y Collin corrieron como si les persiguiera una fiera hambrienta.

Varney seguia delante de ellos por la izquierda. Disponia de mejor linea de tiro, pero ?dispararia? Algo les decia que no; no era parte de su entrenamiento disparar contra alguien que ya no era un peligro para la persona que habian jurado proteger. Sin embargo, Varney no sabia lo que estaba en juego. Habia toda una institucion que no volveria a ser la misma, ademas de dos agentes del servicio secreto que estaban seguros de no haber hecho nada malo, pero lo bastante inteligentes como para saber que acabarian cargando con el muerto.

Burton nunca habia sido buen corredor, pero acelero el paso mientras pensaba en todo esto, y el joven Collin tuvo que hacer un esfuerzo para seguirle. De todos modos, Burton sabia que era demasiado tarde. Aflojo el ritmo al ver que el coche se ponia en marcha y se alejaba. En un par de segundos les saco doscientos metros de ventaja.

Burton dejo de correr, hinco la rodilla en tierra, apunto el arma pero lo unico que vio fue la nube de polvo por el vehiculo que huia. Entonces se apagaron las luces traseras y perdio de vista el objetivo.

Al volverse vio que Collin le miraba con una expresion cada vez mas grave a medida que tomaba conciencia de lo que se les venia encima. Burton se levanto despacio y guardo el arma. Se quito las gafas; Collin le imito.

Intercambiaron una mirada.

Burton inspiro con fuerza; le temblaban las piernas. Por fin el cuerpo reaccionaba al esfuerzo realizado ahora que no habia mas descargas de adrenalina. Se habia acabado, ?no?

Entonces aparecio Varney al trote. Burton observo solo con un poco de envidia y bastante orgullo que el joven ni siquiera parecia agitado. El se ocuparia de que Varney y Johnson no sufrieran con ellos. No se lo merecian.

El y Collin caerian, pero eso seria todo. Lo lamentaba por Collin; sin embargo, no podia hacer nada al respecto. Pero cuando Varney hablo, en la oscuridad del futuro aparecio una pequena luz de esperanza.

– Tengo el numero de la matricula.

– ?Donde diablos estaba? -Russell contemplo incredula el dormitorio-. ?Que? ?Estaba debajo de la maldita cama?

Intento que Burton bajara la mirada. El tipo no habia estado debajo de la cama, ni metido en ninguno de los armarios. Burton habia mirado todos esos espacios mientras limpiaba la habitacion. Se lo dijo bien claro.

Burton miro la soga y despues la ventana abierta.

– Joder, es como si el tipo nos hubiera estado mirando todo el tiempo; supo exactamente cuando salimos de la casa. -Burton echo un vistazo a su alrededor como si pudiera haber alguien mas escondido. Se fijo por un momento en el espejo, miro otra cosa, se detuvo y volvio a concentrarse en el espejo.

Miro la alfombra delante del espejo.

Habia pasado la aspiradora varias veces en aquel trozo hasta dejarlo liso; el pelo de la alfombra, ya bastante espeso, se habia esponjado casi un centimetro cuando acabo. Ninguno de ellos habia pisado el trozo desde que habian vuelto a la habitacion.

Вы читаете Poder Absoluto
Добавить отзыв
ВСЕ ОТЗЫВЫ О КНИГЕ В ИЗБРАННОЕ

0

Вы можете отметить интересные вам фрагменты текста, которые будут доступны по уникальной ссылке в адресной строке браузера.

Отметить Добавить цитату