Tiene que haber pensado que no era peligroso, o no habria acudido solo.
Anoraba a Nick. Ojala le hubiera dicho que lamentaba que las cosas no hubieran funcionado entre ellos. Ella nunca deseo hacerle dano. El se porto muy bien con ella. Le dio todo el espacio que necesitaba, la dejo seguir con su trabajo y la apoyo en todo lo que hacia. El problema era que ella no lo habia amado como el a ella.
Como ella amaba a Quinn.
Sintio una especie de calorcillo al recordar como la tocaba. Con ternura. Lentamente. No habia olvidado donde le gustaba que la tocara. Tampoco habia olvidado lo sensible que era ella con las cicatrices de sus pechos, como le gustaba ponerse encima, todos esos pequenos detalles que se habian ido forjando desde el terror que le infundiera aquel desequilibrado. Un terror que habia durado una semana.
Con Quinn se relajaba y se entregaba tal cual era, de buena gana y con alegria. Cuando hacian el amor, eran companeros.
Habia estado a punto de decirle que lo amaba. Tenia toda la intencion. Pero no le salian las palabras. Una parte de ella se resistia y Miranda no sabia por que.
Quinn decia que la conocia. ?Como era posible que la conociera tan bien si ella todavia luchaba por conocerse a si misma? Asi que se mordio la lengua y guardo silencio, aunque sus palabras fueran sinceras y aunque quisiera pedirle a Quinn que nunca volviera a marcharse.
Quizas, al final, ese fuera su mayor temor, que el volviera a dejarla. No era nada facil convivir con ella, eso lo sabia, y a veces se mostraba deliberadamente conflictiva para que la gente no se le acercara demasiado. Era mas facil mantener a las personas a cierta distancia que mostrar la propia vulnerabilidad.
La gente perecia de muertes violentas. La lucha de su madre contra el cancer. El asesinato de Sharon. Y, ahora, la probable desaparicion de Nick. Todos muertos.
?Que haria ella si algo le pasaba a Quinn?
Quinn llamo a su despacho en Seattle para hablar con Bonnie Blair, una especialista en investigacion de antecedentes. Si habia algo que descubrir sobre David Larsen, Bonnie lo encontraria.
– Hola, Bonnie. He recibido tu informe. No hay gran cosa. ?Que te parece si echas mano de tus procedimientos magicos para encontrar alguna otra cosa?
Siguio un largo silencio.
– ?Que mas quieres? -Bonnie sonaba un poco irritada.
– Bueno, para empezar quisiera saber el nombre de los padres, su hermana, donde nacio…
Bonnie lo interrumpio.
– Todo eso estaba en mi informe. Te he mandado dieciseis paginas.
– ?Dieciseis? Yo recibi una. – Sam Harris. Tenia que haberlas cogido el. Pero ?por que?
?Habria algo en esas paginas de fax que Harris quisiera ocultar? ?O queria proteger a alguien?
– Lo siento, Bonnie. ?Te importaria mandarmelo de nuevo? Me quedare aqui, esperando junto al fax.
– Lo hare por ti. Pero que sepas que aqui estare, esperando una caja de bombones en mi mesa cuando vuelvas.
– Vale.
Abrio la puerta y le hizo senas al sargento de guardia para que viniera al despacho de Nick.
– Sargento, por favor, localice a Sam Harris y digale que vuelva a la comisaria,
El sargento fruncio el ceno pero no dijo nada. Fue hasta la mesa principal y cogio el telefono.
Quinn ya estaba de vuelta en el despacho de Nick cuando empezo a llegar la primera pagina del fax. Era la pagina que el ya tenia.
Siguieron otras quince. A medida que fueron saliendo del fax, Quinn vio como se configuraba ante el la vida de un asesino en serie.
Nacido y crecido en Portland, Oregon. El padre, Kyle Larsen, abandono a la familia cuando David tenia tres anos y, al parecer, dejo de tener contacto con ellos. Murio nueve anos mas tarde en una trifulca por drogas que acabo mal.
Madre maltratadora… Los Servicios de Proteccion del Menor tuvieron que sacar a David de su casa en dos ocasiones, pero las dos veces lo habian devuelto. Bonnie senalaba que tendrian que pedir los expedientes a los tribunales.
Dos delitos cometidos en la adolescencia. De eso tambien tendrian que pedir los expedientes.
Una detencion por violacion a los dieciocho anos. Interesante, David cursaba primer ano en la universidad Lewis and Clark, en Oregon. Lo detuvieron por violacion, pero la victima se retracto. El se aferro a la coartada de que habia pasado la noche en casa de su hermana, dato que su hermana confirmo. ?Acaso la victima quedo tan traumatizada que renuncio a llevar el juicio adelante?
Un detalle le llamo la atencion a Nick. Los pechos de la victima quedaron marcados de por vida con un cuchillo.
Todo encajaba. Un hogar sin padre, una madre maltratadora, que probablemente abusaba sexualmente de el. Tendria que ver los archivos de los Servicios de Proteccion del Menor. Crece en un ambiente dominado por mujeres. La madre lo acosa. Los pechos son a la vez un objeto sexual y un objeto maternal. David se ensanaba con los pechos de sus victimas como hubiera querido hacer con su madre.
Su hermana mayor se convirtio en su tutora despues de la muerte de su madre. Se definio oficialmente la causa de la muerte como «accidental». Su hermana le sirvio de coartada ante la acusacion de violacion. O la hermana lo protegia o David la tenia aterrorizada. O ambas cosas a la vez.
La hermana… hermana. Quinn siguio hojeando el expediente.
Delilah. ?Donde habia oido ese nombre recientemente? Richard Parker. Su mujer se llamaba Delilah. El nombre era tan poco comun que tenia que ser ella. Desde luego, Delilah Parker no parecia una victima, aunque Quinn sabia que las apariencias podian enganar. Solo la habia visto esa unica vez, y la habria definido como meticulosa, organizada e inteligente.
Sin embargo, hasta las mujeres mas distinguidas podian ser victimas de abusos y manipulaciones por parte de una persona a la que amaban o temian. Quinn tendria que proceder con cuidado con los Parker.
Si Delilah Parker no sospechaba que su hermano era peligroso, quizas era porque no queria reconocerlo, y puede que intentara advertirle de la investigacion. Quinn conocia varios casos en que un pariente cercano, un amigo o amante no creian que alguien en quien ellos confiaban podia ser un asesino.
Por otro lado, si estaba al corriente de lo que David Larsen hacia con esas mujeres, estaban ante una dinamica del todo diferente. Era evidente que no habia acudido a la policia a denunciar sus sospechas. Quizas el abusara de ella y la manipulara, y luego quizas la convenciera para que lo protegiera. O quizas fuera complice de sus actividades.
Habia que vigilar de cerca a Delilah Parker.
Quinn leyo el resto del informe y encontro la confirmacion que necesitaba.
Despues de que se retirara la acusacion de violacion, David Larsen ingreso en la Universidad de Montana y se fue a vivir con su hermana, que cogio un empleo como secretaria en el despacho de la Junta de Supervisores.
Richard Parker era supervisor durante la epoca en que ella estaba ahi.
Sam Harris se habia llevado el informe para prevenir a Parker a proposito de su cunado. Parker era un juez influyente, pero ?en que estaria pensando Harris? Poner en peligro toda la investigacion solo por salvar el prestigio politico de alguien?
A menos que su intencion fuera averiguar el paradero de David Larsen gracias a su hermana, creyendo que el solo seria capaz de atraparlo.
?El muy imbecil!
Quinn dio un salto. Llamo al sargento de guardia.
– ?Ha encontrado a Harris?
– No, senor.
– Siga intentandolo. ?Quien esta libre ahora para acompanarme en una salida?
– Estamos muy escasos de personal, senor -dijo el sargento, mirando su hoja-. Puedo llamar a Jorgensen. Hoy esta en trafico.
– Llamelo.