Capitulo 53
En los ultimos dias de su vida, Lily habia cambiado su testamento. Por ironico que fuera habia dejado la casa de River Road a Glory y todo lo demas a Santos. Y el anuncio oficial supuso un verdadero golpe para el detective. No pensaba que mereciera la casa, ni le preocupaba en modo alguno lo que valiera. Pero la amaba.
Habia sido su hogar.
Santos miro al albacea sin poder creer lo que habia oido.
La casa de River Road se habia convertido en la mansion de Glory, y ya no podria volver nunca a su hogar.
Hasta entonces no se habia dado cuenta de lo importante que era aquella casa en su vida.
Miro a Glory. Al parecer ella tambien estaba sorprendida. Al sentir su mirada lo observo como disculpandose.
Lo ultimo que necesitaba Santos era la simpatia o la lastima de aquella mujer. Ya se sentia suficientemente mal despues de haberle demostrado que la deseaba, despues de haber hecho el amor con ella.
Por desgracia, desde el dia en que se acostaron juntos la deseaba aun mas. El simple hecho de verla se habia convertido en una verdadera tortura. Y no podia hacer nada. Glory Saint Germaine era territorio prohibido.
Veinte minutos mas tarde salieron del pomposo despacho del albacea y se dirigieron a los ascensores. Santos la miro y dijo:
– Felicidades.
– Gracias. Yo… Lo siento. No tenia idea de que planeara… No lo esperaba.
– Olvidalo -dijo, en el preciso momento en que se abria el ascensor-. No se que habria hecho con la mansion si me la hubiera dejado.
– Podrias haberla vendido.
– No, jamas. De todas formas, no podria mantenerla con mi sueldo de policia. Es mejor que la tengas tu.
Glory toco su brazo con suavidad, pero Santos se aparto.
– Se que amas esa casa. Se que la querias.
– ?Ahora te dedicas a leer las mentes de los demas?
– No es necesario. El dia que estuvimos en River Road pude ver la expresion de tus ojos. Y he observado tu gesto cuando supiste que Lily me la habia dejado en herencia.
– Tu tambien la quieres -se encogio de hombros-. Que mas da.
Una vez abajo, cruzaron el vestibulo en direccion a la Salida.
– Me preguntaba una cosa -dijo Glory.
– ?Que?
– Doce anos atras mi madre necesito un prestamo familiar para pagar las deudas del hotel, Al menos fue lo que dijo entonces. Lo supe cuando me hice cargo del Saint Charles. Era una suma bastante importante. No pregunte nada porque entonces creia que su familia existia, y que era muy rica.
– Lily era su unica familia.
– Exacto. Entonces, ?de donde saco el dinero?
– ?Cuanto era, exactamente? -fruncio el ceno.
– No lo se, tendria que revisar la contabilidad. Pero creo que varios cientos de miles de dolares. Cuatrocientos… No, quinientos mil.
– ?Cuando fue? ?Lo recuerdas?
– Hace diez anos, casi once. El ano en que… El ano en que murio mi padre.
1984. El ano en que se habian conocido. El ano en que descubrio que Lily era la madre de Hope. El ano en que, repentinamente, Lily empezo a tener problemas economicos.
El no se habia ocupado nunca de los asuntos economicos de Lily, y no habia hecho preguntas al respecto. No era asunto suyo, ni le importaba en modo alguno su hipotetica riqueza.
Sin embargo, ya entonces le habia parecido extrano que empezara a tener problemas cuando siempre habia vivido de forma mas que desahogada. No se habia preocupado nunca por el dinero, y estaba acostumbrada a comprarse todo lo que le apeteciera.
Pero las cosas habian cambiado de forma subita. Lily empezo a controlar los gastos, dejo de donar fuertes sumas a organizaciones de solidaridad, dejo de permitirse caprichos y hasta dejo de ir al cine.
Las piezas encajaban. Lily habria hecho cualquier cosa por su hija, incluso empenarse hasta las cejas. Ahora comprendia que significaban aquellos sobres que entregaba a Hope Saint Germaine. Tras la traicion de Glory lo habia olvidado por completo. Eran cheques. Pero aun no sabia que le entregaba Hope a cambio.
– ?Que sucede, Santos?
Santos parpadeo. Se habia olvidado de todo lo demas.
– Oh, estaba pensando -sonrio, ausente-. Estoy cansado. Ha sido una manana muy larga.
El detective abrio una de las enormes puertas de cristal y la mantuvo asi para permitir que Glory saliera. Habia empezado a lloviznar, y se subio el cuello de la chaqueta.
– ?Donde has aparcado el coche?
– Un poco mas arriba.
– El mio esta aqui mismo. ?Quieres que te lleve?
Glory dudo, pero nego con la cabeza.
– No, gracias, no esta tan lejos.
– Si estas tan segura… tengo que marcharme.
– Estoy segura.
Santos se alejo, pero apenas habia dado unos pasos cuando oyo que lo llamaba.
– ?De donde crees que saco mi madre ese dinero? -pregunto Glory.
Santos aun no estaba seguro. Lo sospechaba, pero a pesar de todo se encogio de hombros y disimulo. No queria decir nada, al menos de momento.
– No lo se, Glory. Tal vez deberias preguntarselo a ella.
Capitulo 54
Hope miro a Victor Santos con disgusto. Lo recorrio lentamente con la mirada y sonrio con frialdad, sin tomarse la molestia de ocultar lo que sentia.
– ?Que puedo hacer por usted, detective? Tengo entendido que ha venido en calidad de policia.
Santos levanto una ceja, divertido.
– ?Le ha dicho eso el ama de llaves? No se de donde habra sacado tal idea. Lo siento, pero esta visita es estrictamente personal.
Hope reforzo su aire de superioridad divertida y senalo la puerta con un gesto.
– Entonces, le ruego que se marche.
– No creo que quiera que me vaya -entro en el vestibulo y miro a su alrededor sin disimular la curiosidad-. Es una cabana muy acogedora.
Seguia hablando con sarcasmo, sin tomarsela en serio. Hope cerro fuertemente los punos, furiosa por tener que soportar su compania por el hecho de que fuera agente de policia. Si no lo fuera, no lo habria recibido.
– No tengo nada que decirle.
– Eso lo veremos -la miro a los ojos-. Tengo algo que creo que puede interesarle.
– Dudo que me interese nada que usted tenga que decir -se cruzo de brazos, sintiendo curiosidad a pesar de si misma-. Pero si insiste en seguir con este ridiculo jueguecito, le concedere un minuto.
– Insisto -sonrio Santos-. ?Se ha enterado de que su madre ha muerto?
– Por supuesto -dijo con un tono que no dejaba duda de lo poco que le importaba.
Observo en la forma en que Santos apretaba los labios que habia conseguido lo que se proponia.
– Ha dejado a Glory la casa. El sitio en que paso la ninez. ?Tambien sabe eso?