—Las cuatro pantallas estan justo delante de mi —aseguraba Benj—. Ahora mismo estoy solo en este puesto, aunque hay mas gente en la habitacion. Mi madre se encuentra a unos tres metros frente a las pantallas del Esket. ?Te ha contado alguien que en una de ellas se ha movido algo? El senor Mersereau acaba de salir para tener otra discusion con el doctor Aucoin.
Barlennan hubiese dado bastante por oir aquella frase.
—Hay unos diez observadores en la habitacion vigilando los otros equipos, pero no conozco muy bien a ninguno. La pantalla de Reffel continua en blanco; hay cinco personas trabajando en la camara del Kwembly, donde se encuentra tu otro equipo, aunque no puedo decir que es lo que hacen. El grupo que marcha a pie continua su camino. Unicamente puedo ver unos cuantos metros a su alrededor, solo en una direccion. Las luces no son tan fuertes como las que estan alrededor del Kwembly. Si algo viniese detras de ellos o surge algun problema, se enteraran antes que yo. Hay que tener en cuenta el retraso con que puedo decirselo.
—?Quieres recordarselo? —pregunto Dondragmer—. El jefe se llama Stakendee. No conoce lo suficiente el lenguaje humano. Es posible que confie demasiado en que tu le avisaras por el comunicador. Me temo que di por supuesto, sin decir mucho mas, que cuando planeabamos la busqueda, su equipo le serviria de aviso. Por favor, dile que simplemente es una comunicacion indirecta entre el y yo.
La respuesta del muchacho tardo mucho mas en llegar de lo que se explicaria por el retraso de la luz. Seguramente estaba cumpliendo con la peticion, sin molestarse en dar el enterado. El capitan decidio no darle importancia al asunto; Hoffman era muy joven. Habia muchas mas cosas que necesitaban atencion, y se ocupo de ellas hasta que la voz de Benj llego una vez mas al puente.
—He estado en contacto con Stak y le he dicho lo que me pediste. Prometio tener cuidado, pero todavia no esta muy lejos del Kwembly, entre las piedras; recuerda que desaparecen un poco corriente arriba. Creo que todavia estan dentro de los limites del mapa, aunque en realidad no puedo distinguir un metro cuadrado de otro en ese jardin de rocas. Se trata de planicies de hielo, o de hielo del que sobresalen rocas, u ocasionalmente de rocas sin hielo entre ellas. No veo como pueden buscar de forma efectiva. Aunque trepen a las rocas mas altas, hay muchas otras que bloquean la vista por detras. Los helicopteros no son muy grandes, y vosotros los mesklinitas, mas pequenos.
—Pensamos en ello cuando enviamos al grupo —replico Dondragmer—. Una busqueda entre las piedras realmente efectiva sera casi imposible si los desaparecidos estan muertos o inconscientes. Sin embargo, como tu mismo dices, las piedras se convierten en roca desnuda a corta distancia de aqui; en cualquier caso, es posible que Kerv o Reffel puedan contestar a las llamadas o pedir ayuda ellos mismos. Por la noche es mas facil ser oido que ser visto. Ademas, la causa de su desaparicion quiza sea mayor o mas facil de localizar.
El capitan tenia una idea bastante clara sobre como reaccionaria Benj ante la ultima frase. No le faltaba razon.
—Encontrar la causa perdiendo otro grupo no nos haria adelantar mucho.
—Si, si en realidad nos enterasemos de lo que ha pasado. Por favor, Benj, continua en contacto con el grupo de Stakendee. Voy a atender otros asuntos. Tu siempre sabras lo que pase medio minuto antes que yo. Supongo que esos segundos no importaran mucho, pero por lo menos estas mas cerca de Stak que yo en el tiempo.
«Ademas, tengo que salir al exterior. El trabajo de sacar la barra del casco esta llegando a un punto peligroso. Traere uno de los equipos al exterior para estar en contacto mas cercano contigo, pero no te podre oir bien a traves de un traje. El volumen de vuestros comunicadores no es muy impresionante. Te llamare cuando este de nuevo dispuesto; no hay nadie a mano para dejarlo aqui de guardia. Mientras tanto, por favor, no dejes de observar lo que le suceda a Stakendee. Anotalo en la forma que halles mas conveniente.
El capitan espero lo suficiente para recibir el enterado de Benj, que esta vez llego antes de ponerse su traje y dirigirse a la escotilla. Prefiriendo trepar mas bien por el interior que por el exterior, subio por las rampas hasta el puente y utilizo la pequena escotilla en la parte superior del casco: una tuberia de forma de U, llena de amoniaco liquido, lo suficientemente grande para un cuerpo mesklinita. Dondragmer corrio, levanto la cubierta interior y penetro en un estanque liquido de tres galones, mientras la cubierta se cerraba sobre el por su propio peso. Siguio la curva hacia abajo y de nuevo hacia arriba, saliendo a la superficie a traves de una cubierta similar en la parte exterior del Kwembly.
Ante el suave plastico del casco deslizandose hacia abajo en todas direcciones, excepto a sus espaldas, se sintio algo tenso, pero hacia mucho que habia aprendido a controlarse incluso en los lugares elevados. Sus pinzas volaban de un estribo a otro mientras retrocedian hasta el lugar donde los pocos empalmes que quedaban en el refrigerador todavia estaban intactos. Dos de ellos eran los contactos electricos que se extendian a lo largo del casco y, por tanto, eran los que preocupaban mas a Dondragmer. Los otros, como habia esperado, estaban desprendiendose cual si fuesen clavos de la superficie del vehiculo; pero estos ultimos tendrian que ser cerrados de forma que mas tarde pudieran conectarse de nuevo. Empalmar y soldar eran actos que Dondragmer conocia unicamente en teoria. Sabia que cualquiera que fuese el procedimiento a utilizar, se necesitarian seguramente unos fragmentos que sobresaliesen del casco como punto de partida. El capitan queria estar particularmente seguro de que el corte tendria esto en cuenta.
El acto mismo de cortar, segun se le habia dicho, no seria un problema para las sierras de los mesklinitas. Selecciono cuidadosamente los puntos donde iba a hacer los cortes e hizo que dos de sus marineros se dedicasen a la tarea. Aviso al resto para que se apartasen cuando la barra estuviese suelta. Esto no solo queria decir que bajasen a la superficie, sino tambien que se alejasen del casco. La idea era bajar el metal al lado de la compuerta, una vez estuviese suelto, pero Dondragmer era prudente en cuanto a pesos, y sabia que la barra podria no esperar a que la bajasen. Hasta un mesklinita lamentaria encontrarse debajo cuando descendiese desde la parte superior del casco, por debil que les pareciese la gravedad de Dhrawn.
Todo esto habia llevado la mayor parte de una hora. El capitan se preguntaba sobre el progreso del grupo a pie, pero antes tenia que examinar otra parte del proyecto de deshielo. Volvio a entrar en el vehiculo y busco el laboratorio, donde Borndender estaba preparando una unidad energetica que se ajustase a la improvisada resistencia. En realidad no habia mucho que hacer; enchufes polarizados, uno en un extremo del bloque y otro en el opuesto, proveerian la corriente directa si la barra podia ser introducida en los agujeros, y cualquier cambio que fuese necesario para hacerlos ajustar tendria que hacerse mas en la propia barra que en el generador. Solo se necesito un momento para aclararle esto al capitan, quien, mirandolo, decidio que el cientifico tenia razon y se dirigio apresuradamente al puente. Solo cuando llego alli e intento llamar a Benj comprendio que nunca se habia sacado el traje; hablar a Borndender a traves del traje era una cosa; hablar por radio con un ser humano, otra muy distinta. Se desvistio lo suficiente para que su aparato sifonico vocal quedase al descubierto, y hablo otra vez:
—Ya he vuelto, Benj. ?Le ha pasado algo a Stakendee?
Mientras esperaba la respuesta termino de sacarse el traje, lo aliso y lo coloco cerca de la escotilla del centro. Aquel no era su sitio, pero no habia tiempo para bajarlo al armario junto a la escotilla principal y volver antes de que llegasen las palabras de Benj.
—Nada realmente importante, a juzgar por lo que se, capitan —llego la voz del muchacho—. Han caminado bastante, aunque no puedo saber cuanto. Unos cinco kilometros quiza desde que os marchasteis, pero es una suposicion. No ha habido senales de ninguno de los vehiculos. Lo unico que hemos visto que pudiera haber afectado a cualquiera de ellos ha sido una nube de vez en cuando a unos cuantos cientos de metros de altura, que se dirige en direccion al Kwembly; por lo menos eso fue lo que Stak supuso. Yo no puedo verlo bien. Supongo que si accidentalmente se penetra en una gran nube uno puede desorientarse, o caso de ir bajo, estrellarse antes de poder enderezar el rumbo; en tales cacharros no hay ningun instrumento para volar a ciegas, ?verdad? Es dificil creer que les haya pasado eso. Por supuesto, si estaban mirando al suelo, en lugar de atender su vuelo…; pero Stak dice que ninguna de las nubes que hemos visto hasta ahora es lo suficientemente grande como para que tuviesen tiempo de perder el rumbo.
Dondragmer se inclinaba a compartir esta duda sobre la responsabilidad de las nubes; habria dudado de ellos incluso si no tuviese un motivo para otra opinion. Una mirada hacia arriba mostro que ninguna nube habia alcanzado todavia al Kwembly. Puesto que Benj acababa de decir que las nubes venian hacia el vehiculo, las que Stakendee habia visto debian constituir la avanzadilla de la formacion y encontrarse mucho mas al oeste cuando los helicopteros volaron. Esto quiza no valiese para el caso de Kervenser. El podria haber llegado muy lejos del Kwembly. Tampoco era probable que Reffel las hubiese encontrado. Dondragmer volvio a atender a Benj, que no se habia detenido a esperar una contestacion. —Stak dice que el lecho del torrente tiene una pendiente hacia