– Ahora deja que te pregunte de nuevo, Drew-dijo suavemente ella-, ?alguna vez te has metido con Peter Houghton?
Drew echo un vistazo a Patrick y trago. Luego abrio la boca y comenzo a hablar.
– Es lasana a las brasas-anuncio Alex despues de que Patrick y Josie hubieran dado cada uno su primer bocado-. ?Que les parece?
– No sabia que la lasana pudiese asarse-dijo Josie con cautela. Y comenzo a separar la pasta del queso, como si estuviera diseccionandola.
– ?Como es eso, exactamente?-pregunto Patrick, alcanzando la jarra de agua para volverse a llenar el vaso.
– Era lasana normal. Pero algunos de los rellenos se desparramaron por el horno y empezo a salir humo… Estaba a punto de comenzar de nuevo, pero entonces me di cuenta de que solo agregando una cosa, carbon, cambiaria el sabor de la mezcla.-Esbozo una sonrisa-. Ingenioso, ?verdad? Quiero decir, mire en todos los libros de cocina, Josie, y esto nunca se ha hecho antes, hasta donde puedo asegurar.
– ?Fijate!-dijo Patrick y tosio en su servilleta.
– En realidad me gusta cocinar-dijo Alex-. Me gusta escoger una receta y, ya sabes, irme por la tangente para ver que ocurre.
– Las recetas son un poco como las leyes-respondio Patrick-. Puede que sea mejor intentar cenirse a ellas, antes de cometer una felonia…
– No tengo hambre-dijo Josie de repente. Alejo su plato, se puso de pie y subio corriendo la escalera.
– El juicio comienza manana-dijo Alex, a modo de explicacion, y fue detras de Josie, sin ni siquiera excusarse. Sabia que Patrick lo entenderia. Josie habia cerrado la puerta de golpe y subido el volumen de la musica; no tendria sentido golpear. Giro el pomo de la puerta y entro, se llego al estereo para bajar el volumen.
Josie estaba acostada boca abajo en su cama, con la almohada sobre la cabeza. Cuando Alex se sento en el colchon a su lado, ella no se movio.
– ?Quieres hablar de eso?-pregunto Alex.
– No-dijo Josie, con la voz apagada.
Alex se tendio y le quito la almohada de la cabeza.
– Intentalo.
– Es solo que, Dios, mama, ?que pasa conmigo? Es como si el mundo hubiera comenzado a girar otra vez para todos los demas, pero yo ni siquiera pudiera volver a subirme a la calesita. Incluso ustedes dos. Ambos deben estar pensando en el juicio como locos, pero aqui estan, riendo y sonriendo como si pudieran sacar lo que ocurrio y lo que pasara fuera de sus cabezas, mientras que yo no puedo no pensar en eso cada uno de los segundos que estoy despierta.-Josie levanto la mirada hacia Alex con los ojos llenos de lagrimas-: Todo el mundo ha salido adelante. Todo el mundo menos yo.
Alex puso la mano en el brazo de Josie y lo froto. Podia recordar el examen fisico de neonatologia de Josie, despues de que naciera-de que de algun modo, de la nada, ella hubiera creado aquella minuscula, calida, encogida, impecable criatura-. Habia pasado horas en su cama, con Josie al lado de ella, tocandole su piel de bebe, sus deditos de los pies como saquitos, el pulso de su fontanela.
– Una vez-dijo Alex-, cuando estaba trabajando como defensora de oficio, el cuatro de julio, un tipo de la oficina organizo una fiesta para todos los abogados y sus familias. Yo te lleve, aunque solo tenias unos tres anos. Habia fuegos artificiales y yo desvie la mirada un segundo para verlos; cuando volvi a mirar, tu te habias ido. Comence a gritar y alguien se dio cuenta de que yacias en el fondo de la piscina.
Josie se sento, fascinada por una historia que nunca antes habia oido.
– Me lance y te saque fuera; te hice la respiracion boca a boca y tu escupiste. Ni siquiera podia hablar de lo asustada que estaba. Pero tu reviviste peleando y furiosa conmigo. Me dijiste que estabas buscando sirenas y que yo te habia interrumpido.
Metiendo las rodillas debajo de su menton, Josie sonrio un poco.
– ?En serio?
Alex asintio con la cabeza.
– Te dije que la proxima vez tenias que llevarme contigo.
– ?Hubo una proxima vez?
– Bueno, dimelo tu-replico Alex, y ella dudo-. No necesitas agua para sentir que estas ahogandote, ?o si?
Cuando Josie sacudio la cabeza, las lagrimas se dispersaron. Se levanto, colocandose dentro del abrazo de su madre.
– No estas sola en esto-dijo Alex: una promesa para Josie, un voto para si misma.
Aquello, Patrick lo sabia, seria su ruina. Por segunda vez en su vida, estaba acercandose tanto a una mujer y a su hija que se olvidaba de que realmente el no formaba parte de la familia. Miro la mesa, con los restos de la horrible cena de Alex y comenzo a vaciar los platos intactos.
La lasana a las brasas se habia enfriado en su fuente, un ladrillo ennegrecido. Apilo los platos en el fregadero y abrio el grifo del agua caliente; luego agarro un trapo y comenzo a fregar.
– Oh, Dios mio-dijo Alex detras de el-: Realmente eres el hombre perfecto.
Patrick se dio la vuelta, con las manos todavia enjabonadas.
– Ni de lejos.-Siguio con los platos-. ?Josie esta…?
– Esta bien. Estara bien. O al menos ambas seguiremos diciendolo hasta que sea cierto.
– Lo siento, Alex.
– ?Y quien no?-Ella se sento en una silla de la cocina, con una pierna a cada lado, y apoyo la mejilla en el respaldo-. Manana ire al juicio.
– No esperaba menos.
– ?Realmente crees que McAfee puede conseguir que lo absuelvan?
Patrick doblo el pano de cocina y lo dejo junto al fregadero, luego se acerco a Alex. Se arrodillo frente a la silla y quedo mirandola desde el otro lado de las varillas verticales, como si ella estuviera atrapada en una celda de prision.
– Alex-dijo-, ese chico entro a la escuela como si estuviera llevando a cabo el plan de una batalla. Comenzo en el estacionamiento, colocando una bomba para distraer. Dio la vuelta hasta la fachada de la escuela y le disparo a una chica en los escalones. Fue a la cafeteria, disparo a un grupo de chicos, asesino a algunos de ellos y luego se sento a comer un maldito tazon de cereales antes de seguir con su excursion de asesinatos. No veo como, presentado con ese tipo de pruebas, un jurado podria sobreseer los cargos.
Alex lo miraba fijamente:
– Dime una cosa…?por que Josie tuvo suerte?
– Porque esta viva.
– No, quiero decir, ?por que esta viva? Ella estaba en la cafeteria y en el vestuario. Vio gente morir a su alrededor. ?Por que Peter no le disparo a ella?
– No lo se. Hay en todo eso un monton de cosas que no entiendo. Algunas de ellas…bueno, son como el tiroteo. Y otras…-Cubrio la mano de Alex con la suya y tomo una de las varillas de la silla-. Otras no lo son.
Alex lo miro y Patrick recordo otra vez que haberla conocido-estar con ella-era como el primer azafran de primavera que veias en la nieve. Justo cuando te habias hecho a la idea de que el invierno duraria para siempre, aquella belleza inexplicable te tomaba por sorpresa; y si no apartabas los ojos de ella, si seguias mirandola, el resto de la nieve se derretiria de una u otra forma.
– Si te pregunto una cosa, ?seras honesto conmigo?-pregunto Alex.
Patrick asintio con la cabeza.
– Mi lasana no era muy buena, ?verdad?
El le sonrio a traves de los listones de la silla.
– No menosprecies tu trabajo del dia-dijo.
En mitad de la noche, Josie seguia sin poder dormir. Se levanto de la cama y fue a recostarse en el cesped de delante de la casa. Miro fijamente al cielo, que en ese momento de la noche se veia tan bajo, que casi parecia que las estrellas fueran a pincharle la cara. Alli fuera, sin su habitacion cayendosele encima, casi era posible creer