Sus ojos sonreian.

— ?Quieres echar al demonio con un poco de atletismo ligero? Un asno, eso es lo que eres.

— Asno o alazan, tienes que decidirte — replique —. ?Y que hay de malo en ello?

— Que no saldra bien. ?Te has acercado demasiado a alguien?

— ?Como… si le he ofendido? No. ?Por que?

— Si te has excedido, si le has tocado, o puesto las manos encima.

— No hubo motivo. ?Por que?

— Es algo que no te aconsejaria.

— Dime por que.

— Porque equivale mas o menos a dar una bofetada a tu ama de cria. ?Comprendes?

— Mas o menos. ?Es que la has armado en alguna parte?

Intente ocultar mi asombro. A bordo, Olaf era uno de los hombres mas duenos de si mismos.

— Si. Y me converti en un completo idiota. Ocurrio el primer dia. O, mejor dicho, la primera noche. No sabia salir de la oficina de Correos; no tiene puertas, solo esos inventos giratorios… ?Los has visto?

— ?Puertas giratorias?

— Que se yo. Supongo que deben de tener algo que ver con esa gravitacion recien inventada. En suma: di vueltas como una peonza, y un tipo que iba con una muchacha me senalo con el dedo y empezo a reir…

De repente senti que me tiraba la piel de las mejillas.

— Ama de cria o no — comente —, espero que no vuelva a reirse de esta forma.

— No. Le rompi la clavicula.

— ?Y no te hicieron nada?

— No, porque sali en seguida de aquel invento y era el quien me habia provocado; yo no le golpee sin motivo, Hal. Me limite a preguntarle que era lo que encontraba tan gracioso, yo habia llegado hacia poco a la Tierra, y entonces aquel tipo volvio a reirse y dijo, senalando hacia arriba con el dedo: «Ah, vienes de ese circo de monos…» — ?Circo de monos?

— Si, y entonces…

— Espera. ?A que se referia con «circo de monos»?

— No tengo idea. Tal vez habia oido decir que a los astronautas se les mete en una maquina centrifuga. No lo se, ya que no hable mas con el… Bueno, permitieron que me marchase, pero desde entonces el ADAPT de la Luna tiene que adiestrar mejor a los que vuelven.

— ?Ha de volver alguien mas?

— Si. El grupo Simonadi, dentro de dieciocho anos.

— En tal caso, disponemos de bastante tiempo.

— De mucho tiempo.

— Desde luego, hay que reconocer que son mansos — dije —. Le rompiste la clavicula y te dejaron escapar…

— Me parece que se debio a esta cuestion del circo — observo —. Ya sabes… Bueno, ya conoces sus sentimientos respecto a nosotros. Porque tontos no lo son. Y se habria producido un escandalo. Creo, Hal, que no sabes nada de nada.

— ?Que quieres decir?

— ?Sabes por que anunciaron nuestra llegada?

— Algo debieron de decir en el real. Yo no lo vi, t>ero alguien me hablo de ello.

— Es cierto. Pero si lo hubieras visto, te habrias muerto de risa. «Ayer a! amanecer regreso a la Tierra una expedicion de investigacion del espacio extraplanetario. Los participantes se encuentran bien y ya han iniciado el estudio de los resultados cientificos de su expedicion.» Cierre, punto y fuera.

— ?Que?

— Palabra de honor. ?Y sabes por que lo han hecho asi? Porque nos tienen miedo. Por eso nos reparten por todo el mundo.

— No. Esto no lo comprendo. No son idiotas; tu mismo lo has dicho. ?No van a pensar que somos fieras dispuestas a saltar al cuello de la gente!

— Si lo hubieran pensado, no nos habrian dejado volver. No, Hal. No se trata de nosotros, se trata de algo mas. ?Por que no puedes comprenderlo?

— Soy un estupido. Habla.

— La gente no se da cuenta del hecho…

— ?De que hecho?

— De que esta desapareciendo el espiritu investigador. Saben que ya no hay expediciones, pero no piensan en ello. Creen que no las hay porque no son necesarias y ya esta. Pero existen personas que saben perfectamente lo que ocurre y las consecuencias que se derivaran. Y las que ya empiezan a manifestarse.

— Bueno…, ?y que?

— Bombon. Bombones para toda la eternidad. Nadie volvera a volar a las estrellas. Nadie volvera a arriesgarse a realizar un experimento peligroso. Nadie volvera a probar en su propio cuerpo una nueva medicina. ?Crees que no lo saben? ?Claro que lo saben! Y si ahora publicaran quienes somos en realidad, que hemos hecho, por que volamos, como ha sido realmente, ?jamas, entonces, jamas podrian volver a ocultar esta tragedia!

— ?Bombon? — pregunte, usando su palabra, que tal vez se habria antojado ridicula a un extrano que escuchara esta conversacion. En cambio, yo no tenia ganas de reir.

— Claro. Y tu que opinas, ?no es una tragedia?

— Lo ignoro. Oh, escuchame. Al fin y al cabo, para nosotros tiene que ser algo grande, y siempre lo sera. Permitimos que nos arrebataran todos estos anos, y muchas cosas mas, porque para nosotros era mas importante. Pero quiza no lo sea. Hay que ser objetivo. Despues de todo, dime, ?que hemos conseguido?

— ?Que estas diciendo?

— Vamos, vaciate bien todos los bolsillos. Ensena de una vez lo que te has traido de Fomalhaut.

— ?Te has vuelto loco?

— Claro que no. ?Cual es, pues, la utilidad de nuestra expedicion?

— Nosotros solo eramos pilotos, Hal. Preguntaselo a Gimma o Thurber.

— Oh, no digas tonterias. Estuvimos alli juntos, y tu sabes muy bien que hicieron; que hizo Venturi antes de morir, que hizo Thurber… Vamos, ?por que me miras asi? ?Que hemos traido? Cuatro sacos llenos de los mas diversos analisis, espectrales y los que quieras, y muestras de minerales; y ademas ese foco, o ese metaplasma, o como se llame esta porqueria de Arturo-Beta. Normers pudo verificar su teoria del torbellino gravimagnetico, y tambien se pudo determinar que en los planetas del tipo C pueden existir, no triploides, sino tetraploides de silicona, y que en esa luna donde Arder estuvo apunto de reventar no hay mas que lava y geodas del tamano de un rascacielos. Y solo para convencernos de que esa lava se solidifica en semejantes enormes y malditas geodas, hemos desperdiciado diez anos y regresado aqui para convertirnos en seres grotescos y figuras de circo; ?por que, entonces, por todos los diablos, hemos tenido que trepar hasta alli? ?Acaso puedes explicarmelo? ?Era necesario?

— Serenate — me dijo.

Yo estaba furioso, y el tambien. Entrecerro los ojos. Ya estaba pensando que ibamos a pegarnos, y mis labios temblaron, cuando de pronto me sonrio.

— Viejo alazan — murmuro —. Eres capaz de encolerizar al mas pintado, ?lo sabias?

— Al grano, Olaf, al grano.

— ?Que significa eso aqui de «al grano»? Tu mis — ?no te vas por las ramas. ?Y si hubieramos traido un elefante de ocho patas que supiera algebra… estarias satisfecho? ?Que esperabas realmente de Arturo? ?Un paraiso? ?Un arco de triunfo? ?Que quieres? En diez anos no te he oido decir tantas tonterias como ahora en un solo minuto.

Contuve la respiracion.

— Olaf, no me trates como a un idiota. Sabes perfectamente a que me refiero. Me refiero a que la humanidad tambien puede vivir sin esto…

— ?Como no! ?Desde luego!

— Espera. Pueden vivir igual, y si es cierto lo que tu dices, de que a causa de la betrizacion ya no volveran a volar, entonces, amigo mio, queda por contestar la pregunta de si ha valido la pena. De si compensa haber

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